Tal Vez (Fanfic Pecados Placenteros)

Capitulo 10

#FANFIC 

RACHEL

Veo el periódico y son imágenes de anoche con Oliver, aparece besándome y tocando mi vientre. Por dios, no, ahora todo el mundo lo sabe.

-Christopher lo sabe y viene para acá, no pude frenarlo- me dice Alex poniéndome peor de lo que ya estoy.

-¿Como pude ser tan estúpida de salir sin escoltas? 

-No lo sé, pero ya es tarde para lamentarse. Ahora lo sabe y eso no es lo peor, sino que todo el mundo sabe de tu embarazo y piensan que Oliver es el padre. 

-¿Que yo que?- dice Oliver con la boca llena de tostadas. 

Solo lo miro y no que se hacer. Ahora si que lo jodí, no solo por Christopher que ha de estar furioso, sino que Antoni ya debe saberlo y eso es algo a lo que le temo más. 

Me voy corriendo a mi habitación, Alex me sigue pero no llega a impedir el portazo que doy, cierro con pestillo y camino por todos lados pensando en como actuar a partir de hoy. 

-Rachel, abre. 

Alex golpea la puerta pero es inútil porque por ahora no saldré. 

Salgo al balcón, sentándome en una tumbona. Ubico mis manos en mi vientre acariciándolo. 

-No sé que pasara ahora, pero les prometo que los cuidare con mi vida. 

Patean y son los únicos que pueden sacarme una sonrisa en momentos como estos.

Trato de serenarme, ya hace 2 horas que estoy aquí y el ruido que viene de afuera hace que me levante. 

Abro la puerta y camino hacia la sala. 

Es cuando lo veo. 

Christopher. 

Esta parado en medio de mi sala, mira con furia a Alex y esa mirada se posa en mí. Baja la vista a mi vientre y noto el cambio de sentimiento. 

-A ver si tu puedes contestar mi pregunta, Rachel- mira a Alex antes de empezar a caminar hacia mi-¡¿En que demonios estaban pensando cuando decidieron ocultarme algo como esto?!

-¿Que haces aquí?-camino hacia atrás cuando lo veo avanzar-No quiero verte, hazme el favor de irte a Londres con tu querida esposa. 

Se reí antes de mirarme con esos ojos grises cargados de furia. 

-No seas ridícula, vine por mis hijos, no por ti.

-No son tus hijos-miento.

-¿No? ¿De quien son entonces?.

Me quedo callada. 

-Dime, Rachel. ¿Son del ridículo de tu coronel? ¿Del pordiosero?- mi silencio lo pone peor- HABLA.

-No tengo porque darte explicaciones de mi vida, si eso es todo, te pido que te retires. 

Doy media vuelta intentando volver a mi habitación pero me toma del brazo acercándome a su pecho.

-No vas a huir, no vas a negar lo obvio y no voy a irme. 

Solo me dedico a mirarlo, no se como a reaccionar ante esta situación y no me resulta fácil tenerlo cerca.

-Vamos a ir al hospital, para saber como están mis hijos y espero no tener que obligarte. 

-No iré a ningún lado contigo. 

Endurece la mandíbula y Alex opta por interrumpir antes de que esto se salga de control.

-Rachel, ve por tus cosas para ir al hospital-me mira casi con suplica.