Tiny Omega [l.s]

• 3 •

Harry comienza su día temprano. Toma desayuno y luego va al gimnasio que instaló en su apartamento. Allí se pasa una hora.

Se baña, se viste, y sale de su apartamento. Por primera vez en todos los años que lleva viviendo ahí, espera que el olor a caramelo golpee su nariz, y en efecto, no tarda mucho en hacerlo.

El omega trae muchas cosas. Carpetas, libros, y todo lo sobrepasa. Harry a penas trae lo necesario.

Cuando va a ofrecerle su ayuda, ya en el elevador, el omega recibe una llamada.

"Sí Li, mañana te acompaño"
"No, eres un alfa, sabes que no es por eso"
"¿Y no puede ir?"
"Qué lástima"
"Sip, estoy bajando"
"Ya, nos vemos"

La conversación se resume a esas palabras del omega, y a Harry no le agrada demasiado. Sin embargo no es su asunto, y sabe que sentirse celoso sería algo idiota considerando que no son nada.

"Lou, te veo un poco cargado, ¿Necesitas ayuda?"

Louis niega.

"Liam va a ayudarme con esto"

Entonces el alfa. Huh.

Cuando el ascensor al primer piso, ve a un alfa muy grande saliendo de un deportivo negro, acercándose a Louis.

Ouch, con que ese era Liam.

Ahora ignora el hecho de que no son nada y se supone que no debe sentir celos, pero deja invadir por ellos.

Liam toma la mochila del omega, de forma en que Louis queda solo con las carpetas, y lo acompaña hasta el auto. Le abre la puerta, sonriente, y luego va al asiento del conductor. Pone su auto en marcha, y se van.

Todo esto mientras Louis sonríe ampliamente.

Ahora Harry quiere que esa sonrisa sea para él.

Cuando piensa en esto, descubre que quiere algo con el ojiazul.

Las personas con las que ha estado no son más que parejas sexuales de mutuo acuerdo, pero igual es incómodo cuando se da cuenta que Louis lo ha estado viendo salir con todas aquellas personas.

Decide acabar toda relación con su última pareja para poder empezar a construir algo con el omega.

Sin embargo tiene un poco de miedo.

Es decir, la criatura que vivía en el mismo piso que él era hermoso (siendo honestos, no hay excusas, solo era Harry siendo imbécil), pero le daba miedo cometer errores con él y herirlo sin intención.

Si aquel con olor a caramelo se asustaba por las miradas de sus amigos — que son brutos, pero no mala gente —, entonces sería muy fácil herirlo por cosas sencillas, que él mismo no sería capaz de detectar.

Va a la universidad dándole vueltas al asunto y cuando llega ve a Luca, su último amante.

Decide que ponerle fin a esa relación sin nombre para siquiera poder iniciar con buenas bases algo con aquella delicada criatura por la que, por ahora, siente un flechazo.

"Luca, esto se acabó"

No dice más, ni lo mira más de lo necesario, porque al final no era nada serio y ambos lo sabían.

Luca asiente, sin pedir explicaciones, y se va con su grupo de amigos.

Después de eso, la vida del rizado va normal hasta que sale de sus clases.

Es entonces cuando sus amigos, que están en otras universidades, lo esperan en la entrada.

"Oye, ¿Qué fue eso con el omega ayer? Es decir, es bonito, pero creí que ahora tu interés era Luca" Dice Zayn mirándolo, sin saludar.

"Primero se dice hola, maleducado. Segundo, creo que hay algo ahí, así que hoy terminé todo con luca" Harry responde.

Confía en sus amigos, después de todo.

"Bueno, se ve que es algo asustadizo" responde Nick, otro alfa "Hay un trabajo que hacer ahí con él para que se sienta seguro"

Todos asienten de acuerdo, y Aaron, un alfa, hace una seña para que vayan todos al café que está más cerca.

"Creo que le han enseñado a temer a los alfas" Todos giran la cabeza a un lado, confundidos, cuando Harry habla, dando unos pasos largos característicos de él. "Se asustó porque éramos muchos. Cuando estuve solo con él, su miedo no disminuyó, pero tampoco se alteró cuando lo toqué. Si lo hubiese hecho, pensaría que tiene un trauma"

Ahí entienden su punto.

"Bueno, si necesitas cualquier cosa puedes avisarnos, ya sabes" Es Zayn quién habla de nuevo. El resto concuerdan.

"¿Tienes intenciones de algo serio con ese omega?" Pregunta Nick.

"La verdad es que es un tema a considerar, después de todo nunca he tenido una relación seria"

"Entiendo el punto. Tienes miedo de herirlo. También me pasó con Gigi, pero ella no exactamente la clase de omega sumisa" Todos ríen, recordando cuando la omega golpeó a un beta por tocarle inapropiadamente sin su autorización "Mi único consejo es que vayas despacio, y pienses en las inseguridades que puede causarle tu contacto con otra persona al omega"

Harry asiente con una sonrisa.

Llegan al café y piden lo que les gusta. Sin embargo, Harry centra su atención en encontrar al dueño del conocido olor a caramelo. Una vez que lo hace, lo ve con Liam, el mismo alfa con el que hablaba por teléfono, y no le gusta demasiado. Por supuesto, tampoco es el único alfa mirando a la delicada criatura; hay al menos otros tres tan pendientes como él.

Pero no puede hacer nada. Tiene que pensar con su cerebro, no con la otra cabeza.

A pesar de todo, sus amigos notan lo que pasa y se ríen un poco de él, pero improvisan y de alguna forma que Harry simplemente no llega a entender, logran separar a Liam de Louis y ahora lo están empujando hacia el omega.

No se incentiva a ir hasta que otro alfa que lo ha estado mirando se levanta.

Ahí es cuando sus pasos se triplican en velocidad y llega al omega justo a tiempo.

"Hola Omega"

El ojiazul se encoge, de timidez y no de miedo. Su olor le dice todo.

"Hola Harry"

"No sabía que venías aquí, nunca te había visto"

Louis sonríe suavemente. Harry lo siente como el logro de su vida.

"Bueno, no lo había hecho" La voz de Louis se escucha pequeña.

"Oh, ¿es tu primera vez aquí?"

"Sí, ayer Liam vino con su omega y creyó que debía probar algunas cosas" La sonrisa del alfa es imborrable, y se le contagia al omega.

Harry se siente feliz e idiota. Feliz porque ha logrado mucho con Louis en menos de un día e idiota porque tuvo celos de un alfa emparejado.

No importa, de todas formas Harry gana con ambas.

"¡Louis!"  Es un omega quién habla, escandaloso, llamando la atención de todo el mundo.

Harry solo puede preguntarse ¿Quién carajo es este ahora?