𝐋𝐀 𝐏𝐔𝐒𝐇, 𝐍𝐄𝐖 𝐌𝐎𝐎𝐍

chapter one

chapter one: el cumpleaños dieciocho y la visita de jake
or beth recibe un vestido y un regalo sorpresa
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LA ALARMA DESPERTÓ a Elizabeth quién bostezó cansada antes de recordar qué día era aquel.

Miró su calendario y recordó lo aburrido que había sido su pasado cumpleaños, no dejaría por nada del mundo que aquello se repitiese ese año.

Salió de debajo de sus mantas y corrió irrumpiendo en la habitación de su melliza.

-¡Bella levanta es nuestro cumpleaños!-Dijo la rubia emocionada tirándose sobre su hermana.

Bella se quejó soltando manotazos al aire y solo frenó cuándo su hermana pequeña se quejó por culpa de un golpe. La castaña se sentó en su cama y su hermana la imitó, llevaba entre sus manos un objeto rectangular envuelto en papel de regalo, porque por mucho que Bella hubiera dicho que no quería regalos, Beth era terca e iba a hacer lo que le daba la gana, como siempre.

-Buenos días Lizzie.-Dijo Bella sacando un regalo del cajón de su mesita.

-Para ti.-Murmuró la menor sonriendo.

Le entregó el regalo antes de coger el suyo y rasgar el papel con rapidez.

-Alice me ayudó a escogerlo, espero que te guste.-Murmuró Bella mirando los ojos de su hermana que brillaron con emoción.

Un collar de cadena de oro y al final una piedra lunar brillaron entre los dedos de la chica quien sonrió con fascinación.

-Es precioso Bells, venga abre el mío.-Pidió su hermana sentándose en la cama y mirando a su hermana.

-Bueno.-Musitó rasgando el papel.

Elizabeth sonrió cuando el regalo estaba abierto, Drácula de Bram Stoker, Bella rodó los ojos.

-Aunque te dije hace tiempo que lo quería, sé que esto viene con doble sentido.-Dijo ella divertida.

-Ya me conoces Bella, no podía no aprovechar la ocasión.-Dijo Beth suspirando con gracia.

Bella abrió la tapa encontrándose con una dedicatoria escrita con la caligrafía de la melliza rubia.

"Espero que esto sea una guía de supervivencia para tu excéntrico y pálido novio, con amor, la que tardó más en salir de la barriga."

-No tenías porqué Bethy.-Musitó Bella con una sonrisa divertida.

-Estupideces, sabes que eres mi hermana favorita.-Dijo antes de abrazarla.

-Soy la única que tienes, debes dejar de decir eso.-Reprochó la castaña rodando los ojos.

-No le quites emotividad al momento Bella.-

Unos golpes en la puerta hicieron que las mellizas se separaran. Charlie entró con dos regalos en las manos haciendo que su hija menor sonriera entusiasmada ante la idea de recibir más regalos.

-Dijimos que nada de regalos.-Musitó Bella sonriendo con timidez.

-Dilo por ti, yo lo quiero.-Musitó Beth sonriendo a su padre.