SukuFushi Week [sᵘᵏᵘғᵘˢʰⁱ]

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La pista que nos unió

Patinaje AU / Historia mini corta

Donde Megumi es un patinador y está en un ensayo para la entrada de las presentaciones.

O donde Megumi sufre de constantes ataques de pánico en los que teme arruinar su carrera solamente por amar a alguien.

๑╹╹๑

Al momento de entrar nuevamente a la pista, el frío abraza a los patinadores, invitando a cada uno a surcarla con los mejores saltos y giros que tuvieran.

Las ovaciones de los patinadores que están presentes se hacen notar al momento en que un chico pelinegro entra a la pista. Las luces iluminan a los patinadores individuales, pero todos se centran en el joven de ojos azules y el aura que le rodea es simplemente esplendorosa.

El paso de los patines sobre el hielo es delicado, como si hubiera nacido en la pista. Aún cuando ese jovencito de diecinueve años solamente traía un pans normal de color negro y unos mallones entallados, la tela parece cubrirle y presentarlo como si fuera un hermoso cisne negro que nadaba entre la tranquilidad del agua cristalina.

Se colocan en la posición asignada los cinco patinadores y la música de la presentación que se ha repetido al menos cuatro veces vuelve a sonar en la pista y se vuelven a repetir los pasos en las que los jóvenes que participan en la rama individual han estado practicando toda la tarde para al día siguiente en la presentación de la competencia.

La música resuena y el momento de salir comienza. Los patines en la pista se deslizan, siguiendo la coreografía que les fue asignada, para después comenzar con la presentación de los jóvenes; pasa primero el patinador representante de Kioto, Kamo Noritoshi, deslizando de forma elegante su cuerpo, haciendo un Toe Loop perfecto que coloca un ligero ambiente de competencia entre cada uno de los participantes en esa corta presentación, queriendo cada uno superar al anterior.

Después le sigue el representante de la prefectura de Miyagi, Itadori Yuji, aquel chico con cabello rosa y negro que parece más que feliz de poder estar en ese lugar, deslizando sus patines amarillos igual que su sudadera, haciendo un excelente Salchow que le ayudó con el impulso que traía.

Alzó los brazos en alegría cuando logró clavarlo sin error y patinó de forma rápida hasta la fila de chicos que esperaba por presentarse. - ¡Fushiguro-kun! - dijo el pelirrosa, raspando el hielo con los patines, dejando que la alegría desbordara en cada uno de sus gestos. - ¿Que salto harás? ¿Harás un Salchow, un Loop, un Toe Loop, un Flip? - dijo el chico emocionado, alzando los brazos, mirando con un brillo impresionante al pelinegro.

El chico de ojos azules sonríe ante la actitud de su amigo, sabiendo que al menos 80% de los ahí presentes ya eran amigos de Yuji. Había sido tan sociable como cuando eran niños, confiando ciegamente en gente que se encuentra en cada lugar al que va.

- Aún no lo sé, lo decidiré cuando llegue el momento. - dijo tranquilamente el pelinegro, viendo cómo otro chico, de la prefectura de Saitama hacía un Flip perfecto.

El aura cada vez era más tensa entre los competidores, por más bien que todos se llevaran, al momento de presentarse y en la competencia, era una arena colosal en la que se mataban unos a otros para saber quién sería el mejor entre todos ellos.

Cuando llegó el turno del pelinegro, la pista quedó en silencio total, él siendo representante de Tokio, deslizando elegancia con cada uno de los movimientos que hacía, pensando seriamente en qué haría.

No lo pensó mucho, acelerando con los patines hasta que despegó el filo externo del patín, comenzando primero de frente, dando la media vuelta para impulsarse en el momento justo para hacer los giros.