Vencido.

11 9 0
                                    


Vencido por tu poder;

cansado de la maldad

ansiando la libertad

que Cristo ofrece con creces.

Me entrego como mereces,

rendido ante tu justicia

siendo tu ley la delicia

de esa infinita bondad

que nos da felicidad

y que promete volver.

Volverse a ti con pasión

liberando las tensiones;

reconociendo emociones

donde tengo la ocasión

de renunciar al dolor,

y al apego a lo prohibido

que me promete un vacío,

sustituyendo por gozo

lo que un día hizo un destrozo

de mi pobre corazón.

Poemario celestial IDonde viven las historias. Descúbrelo ahora