❤︎Amistad online❤︎

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-Capítulo 3-

Caminaba por el campus de la universidad al lado de Emma quien iba hablando entre dientes con la vista pegada a los apuntes del último mes, sabía que estaba repasando para el examen de hoy y aunque yo también debería hacerlo elegí no agobiarme más...

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Caminaba por el campus de la universidad al lado de Emma quien iba hablando entre dientes con la vista pegada a los apuntes del último mes, sabía que estaba repasando para el examen de hoy y aunque yo también debería hacerlo elegí no agobiarme más con el tema a mi parecer ya había dado suficiente de mí semanas atrás por lo que anoche decidí irme a dormir temprano e intentar tener una noche tranquila, pero sabía que mi concejo a Emma no le sería muy útil pues ella suele estresarse más que yo así que solo me quedaba acompañarla y cuidar que no sufrirá alguna especia de colapso antes del examen.

Ashlynn B:
Revise algunas decoraciones para la fiesta
Uy, esto no es el grupo
Perdón

Alyssa Varley
No pasa nada, envíalas y revisamos entre todas
Puede que Em y yo tardemos tenemos un examen.

Ashlynn B:
Voy a ello
Odio los exámenes, mucha suerte a ambas les ira bastante bien

Alyssa Varley:
Gracias

—¿Con quién hablas? —escuche a Emma hablar a mi lado.

Me gire a mirarla señalándome —¿Yo?

—No, el vecino.

—Ah, hablaba con Ashlynn dice que ya encontró las decoraciones —respondí metiendo mi celular.

La pelirroja miro su celular —A mí no me llego nada.

—Ajá, porque se equivocó de chat.

Emma enarco una ceja —Ah, ¿Cómo es que estas tan tranquila?

Me encogí de hombros al oír su pregunta, era verdad que durante el primer semestre no existía nada más para mí que no fuese la escuela y sacar buenas notas, pero hacer eso solo me había traído problemas en cuanto a mi salud y lo último que quería era volver a eso —Sé que me ira bien.

—A veces te odio —dijo cruzándose de brazos.

Le sonreí dándole un empujón con el codo —Me ira bien a mí y te ira bien a ti, porque eres una persona muy inteligente y centrada que consigue lo que se propone, ahora deja eso antes de que te salga una ulcera o tu cabeza explote.

—Las cabezas no explotan de estrés —dijo entregado me los apuntes.

—Podrías ser la primera persona a la que le ocurra, así que mejor no nos arriesguemos.

Tome las hojas para meterlas con cuidado en la mochila cuando sonó el timbre que indicaba el inicio de clases. «Esa cosa algún día me va a dejar sorda», pensé cubriéndome los oídos para amortiguar el ruido.

Emma me miro inquieta —Mejor devuélveme mis apuntes —dijo estirando su mano para tomar mi mochila.

—No —respondí dado un paso atrás alejándome de ella.

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