Capitulo 16

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Han pasado tres meses desde que empezó lo que yo defino como nuestra "no-relación". Porque, a pesar de todo, hay algunos momentos en que nos separamos. No pasa muy a menudo, pero por ahora prefiero que sea así: en primer lugar, cada uno es responsable de su familia, así que en caso de comidas, cenas o cosas por el estilo, nos presentamos solos. Una cosa era ir a casa de sus padres cuando fingía que me acostaba con él, pero hacerlo ahora que nos acostamos de verdad sería confuso.

Están prohibidos los viajes en pareja: nada de fines de semana o vacaciones juntos, porque planificar las vacaciones es una actividad de pareja y nosotros no lo somos. Seguiré repitiéndolo hasta la saciedad. Él
no parece muy convencido, pero lo importante es que sepa qué opino yo
de todo esto.

Tratamos de trabajar juntos lo menos posible. Después de Madara, Kakashi nos pidió que colaboremos en algún otro cliente, pero yo me negué. Soy consciente de que mis facultades no están al cien por cien cuando me encuentro cerca de él, y prefiero estar completamente lúcida al menos mientras trabajo.

Durante los fines de semana no vivimos juntos, lo que significa que me niego a pasar la noche en su piso. Quería limitar el número de noches que pasábamos juntos, aunque no me salió muy bien hasta ahora, porque Shikamaru viene a dormir a mi departamento, a pesar de que es mucho más incómodo y no estamos solos.

Sé que no logré con éxito todos mis objetivos, pero al menos lo intente. Shikamaru, en cambio, se deja ir y me muestra una faceta delicada y dulce que me aterroriza. Es muy protector conmigo, como si fuera algo de su propiedad.

—¿Comemos? —pregunta Naruto asomándose a la puerta de mi oficina.

—¿Y los otros dos? —pregunto alzando la vista de la pantalla de mi notebook.

—Nos esperan abajo —dice impaciente.

Comemos seguido con Tenten y con Shikamaru. Como somos cuatro, es más difícil alimentar los rumores. Al menos en teoría.

Por lo que dice Naruto, es un no-secreto que entre Shikamaru y yo hay algo poco definido pero muy tangible. Incluso a mí me cuesta negarlo todo cuando nuestros compañeros tratan de indagar porque, veamos, si me pongo como un tomate cuando  alguien menciona su nombre, ¿cómo puedo negarlo de forma convincente?

Salimos del edificio y noto enseguida la mirada de Shikamaru.

—Hola —dice sonriendo.

—Hola —respondo desde una distancia prudencial.

Hoy, extrañamente, brilla el sol y sus ojos están todavía más brillantes. Parecemos un par de idiotas.

—Vamos chicos, no se pueden comportar así —nos reprende Naruto riendo mientras se acerca a Tenten para besarla.

Shikamaru y yo los miramos pasmados.

—Deberíais probarlo ustedes también —sugiere.

—Sakura me daría un golpe si lo intentara delante de la oficina.

—¡Por supuesto que lo haría! —confirmo—. Ellos son una pareja y pueden besarse, pero nosotros no lo somos.

Shikamaru arquea las cejas y me dedica una mirada desafiante.

—¿En serio? —dice y se acerca.

—¡Quédate donde estás! —le advierto levantando las manos para detenerlo.

Él me toma de todos modos e intenta darme un beso.
—¡Shikamaru! —lo llamo al orden con un tono que espero que sea tajante. Ríe al notar mi azoramiento. —¿Quieres portarte bien? —murmuro.

Trabajando Con El Enemigo *ShikaSaku*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora