Casius y Deviant están en busca de la humana indicada para formar un núcleo familiar. Ya están en la edad de procrear y tanto el inminente colapso de su pueblo como la presión de sus padres, los obliga a hacer un viaje a la tierra para escoger a la...
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Sobrevolaban a muy buena distancia el planeta Obvius.
Los chicos habían descendido a el en una nave más pequeña siguiendo el plan de que sólo un grupo iría a enseñarles sobre combate. En otra nave de mayor dimensión se encontraba Dánica oculta tras las placas invisibles del exterior de la nave mayor, para no ser detectada.
Se suponía que su intervención debía ser sorpresiva.
Por eso ella estaba de pie frente al comunicador del panel de mando atenta a los chicos, quienes le darían información de sus hubicaciones y le indicarian el punto exacto en que la nave debería dirigirse para atacar a los reptiles controlados por el parásito gusano.
- Hermosa... - Susurró Deviant y ella se tenso.
- Aquí estoy Dev.
- Nos dirigimos a un valle. Se supone que daremos las "Clases de lucha" ahí por ser un sector alejado de las residencias y espaioso. - Hablaba un poco molesto. - Bajo la tierra se encuentran los primitivos y el parásito, por lo que nos advirtió Sliv. Estaremos justo sobre ellos.- Guardó silencio.- Al transcurrir treinta minutos varias máquinas nos rodearán, no te alarmes, éstas dispararán a la tierra para hacerlos emerger. Larg ordenó desactivar las alarmas de entrada a la atmósfera así que podrán ingresar sin problemas y estar sobre nosotros a los segundos del ataque. Manténgan la nave camuflada y sigan nuestra señal de vida.
- Esta bien. ¿Donde está Casius?
Ella se preocupaba por ambos. Que solo Dev se comunicará con ella le provocaba ligera angustia por el rubio.
- Tranquila, se encuentra creando una distracción para yo poder darles el mensaje. - La comunicación paró un instante y ella se envaro sintiendo su corazón latir asustado. - Debo cortar. Sólo sigan nuestra señal, el resto dependerá de ti hermosa.
Le escuchó dándole el mando y sintió mucho amor por él al tomarla en cuenta cuando ella a ambos les ocultaba la importante noticia de que serían padres. En ese momento tenía la urgente necesidad de decirles, pero sabía que eso los desconcentraria. Debía ocultarlo un poco más, sólo hasta que todo hubiese terminado.
- Confía en mi.
- Siempre amor...
Cerró los ojos para no ponerse a llorar, no debía perder la determinación.
La comunicación terminó y ella tomó una profunda respiración, todos estaban en silencio aguardando sus ordenes.
Se giró y los enfrentó muy seria, actuando como la líder que requerían en ese momento.
- Qué las naves de apoyo estén listas para desacoplarce. - Dijo a un macho a su derecha, el comandaria a los tres pilotos para mantener seguros a todos desde el aire utilizando los proyectiles que cada mini nave portaba, contra cualquier amenaza.- Dividanse en grupos equitativos de machos y hembras, conformen unidades de apoyo y no ataquen solos, siempre cubran sus espaldas y las de sus compañeros. - La miraban atentos y algo enbelesados por sus ordenes contundentes. - Los sanadores permanecerán fuera del rango de ataque en bases móviles, atenderán a todo el que lo requiera y eso incluye a los Largios. - Se mantuvo en silencio e hizo contacto con todos los presentes, hasta que fijo su mirada en la cámara del techo que permitía al resto, distribuido por la nave, observarla y escuchar. - Los líderes de equipo recibirán ordenes de los lores, yo me encargaré de solo distribuirlos para abarcar mayor terreno, por lo que un equipo de hembras estará a mi cargo transmitiendo los mensajes y socorriendo a los eridos que serán atendidos. Mi grupo se encargara de evitar a la amaneza ir en direccion a las residencias. Seremos el escudo de los habitantes mientras todo ocurre. Atentos a las señas. - Alzó sus manos un momento antes de bajarlas.
