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¿Ustedes sabían que Trein tenía unas hermosas hijas?... ¿No? Bueno, tampoco los alumnos de primer año.
— Es todo por hoy, no olviden que todavía tienen hasta el viernes para entregar sus actividades retrasadas — Trein acariciaba a Lucius observando cómo sus alumnos tomaban nota rápidamente, esos momentos los gozaban cómo no tienen idea.
Trein quitó su presentación dejando a algunos sin escribir completo el apunte.
— ¡Profe! No terminé de copiar ¿Podría regresarlo, por favor? — Epel habló un poco preocupado, no quería recibir regaños de su madre y Vil.
— Lo siento jóven Felmier, tuvo el tiempo suficiente para copiar... — Trein fué interrumpido por el azotón de su puerta dejando ver a una hermosa pelirroja con un pastel en manos.
— ¡Papi! — La misteriosa chica no se dió cuenta que su padre aún no terminaba su conferencia — Te hice un pastel de manzana, tu favorito — Una dulce sonrisa adornó su rostro contagiándole está a Trein.
— Anastacia, aún no he terminado mi clase — Lucius saltó de las piernas de Trein al suelo acercándose a una de las piernas de la pelirroja.
— ¡Oh! Lo siento mucho chicos — Su mirada se fijó en la cámara sonriéndole a los alumnos.
Todos los alumnos se encontraban maravillados por la hija de su profesor, pero había uno en especial, quién se enamoró a primera vista de Anastacia.
Ace, si, esté chico le llegó la flecha de cupido.
En toda la clase se encontraba escuchando música, pero exactamente cuando apareció la pelirroja comenzó a sonar 'Closer' de The Chainsmokers.
Su corazón latía con fuerza, su rostro lo sentía caliente, la estúpida sonrisa que siempre tiene se duplicó, su cuerpo temblaba cómo un chihuahua.
«¿Éstos son los síntomas del amor?»
— ¡Jóven Trappola! — Trein llamaba al único alumno que aún seguía conectado en su videollamada, creía que era una foto, pero la música del otro lado le quitaba un poco las dudas.
— ¿Le habrá pasado algo malo? — Anastacia veía preocupada al chico que tenía una estúpida, pero tierna sonrisa — ¡Tal vez le dió un infartó! ¡Llámenos a emergencias!
— No te alteres cariño, es muy estúpido, puede ser uno de sus viajes
— ¿Estás seguro? — Ace salió de su trance, peros sus sentidos no estaban al cien.
— Profe... ¿Puedo ser su yerno?
¡Boom! La videollamada se cortó dejando a un celoso padre y una avergonzada chica.
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¡Ah, siento que quedó muy mediocre este capítulo! 😩👊
Si mi manera de escribir dejó de ser buena para ustedes, díganme, siento que escribo puras cosas incoherentes o aburridas.
