Extra 1

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Charlas animadas, un lugar al aire libre decorado de forma sencilla pero linda dónde los hermosas blancas flores desprendían un aroma suave que daba un cosquilleo en la nariz. Que aún no era la gran sensación, a los novios les había gustado mucho por qué tenía un significado especial.

Pero en fin, la charlas continuaban y los risas de los niños jugando a un lado no faltaban, todas las personas invitadas se encontraban ya sentados a la espera de la "Novia" y uno que otro paparazzi oculto no faltaba.

Y mientras esperaban. Nanami se encontraba el altar con un hermoso traje negro con detalles de un azul profundo al igual que sus ojos, una postura recta y manos atrás en su espalda, mirando hacia adelante a la llegada de su futura "esposa". Con un Gojo a su lado igualmente vestido de negro, y una mirada perdida hacia el bosque que se encontraba a sus espaldas, pensando unas cosas que nadie podría imaginar, o bueno, algunos de lo presentes que ya sabían la historia ya podrían adivinar.

—¡Tks! —soltó un chasquido de su boca Sakuna, sentado en uno de los asiendo de primera fila por el lado de la novia, mirando en dirrección hacia el de cabellos blancos con molestia qué no estaba dispuesta a ocultar—. No entiendo por qué ese hijo de puta se encuentra aquí, no debería de haber venido, ¡El le hizo daño a él tonto de mi hermano! —se quejaba a lo bajo, cruzándose de brazos mostrando su insatisfacción— Debería estar en una tumba a diez metros bajo suelo, creo que ese sería el mejor regalo de bodas que podría darle al idiota —dijo mientras tenía el seño fruncido y apartaba su mirada hacia otro lado. No soportaba más ver al idiota sin que las ganas de darle un golpe aparecieran, aumentando con cada segundo que lo mirará como si las ganas le estuvieran animando fuertemente a qué lo haga.

Megumi, novio de sakuna, no dijo nada pero sonrió asintiendo levemente estando de acuerdo con su pareja.

•••

Cuando la música de entrada empezó a sonar, todos callaron y se levantaron mirando hacia el arco de flores por el cual entraron dos tiernos niños con una canasta llena de pétalos de rosa blanca que arrojaban en la alfombra mientras caminaban, y detrás de ellos iba la tan esperada novia, con un hermoso traje color perla al igual que las flores y con detalles dorados y rojos, además del velo que cubría su cara mientras es llevada por el brazo de su hermano mayor, Choso. Quien tenía las cejas y labios fruncidos junto las comisturas de sus ojos rojos que lo delataban de haber estado llorando anteriormente.

Todo eso siendo apreciado por los invitados que no pudieron evitar reír internamente al ya imaginar cómo el hermano mayor de la novia había estado haciendo un berrinche por qué lo pensará bien y no se casará, cosa que no funcionó por qué de lo contrario la novia no estaría ahí.

Cuando llegaron al altar, Nanami que sonreía y tenía un ligero sonrojo, extendió la mano para recibir a su futura esposa, sintiendo la penetrante mirada de la persona que la acompañaba, advirtiéndole silenciosamente de lo que le pasaría si lo lastima o dejaba, asintiendo para que por fin le entregaran a su hermoso novio.

—Queridos invitados hoy en esta ceremonía... —hablo el pastor mirando a todos. Pero Gojo solo tenía su mirada en la novia vestido hermosamente de blanco que miraba sobre el velo a su futuro esposo, imaginando ya su sonrisa, el brillo en sus ojos y el rubor que cubría sus mejillas levantadas por la amorosa sonrisa.

Todo eso podía ver a través del velo por qué alguna vez ese expresión fue usada para mirarlo a él en el día de su boda. Pero está vez no era para él, era para otra persona, era para Nanami, novio y futuro esposo de su amado Yuuji que ahora sonreía felizmente.

Lo que alguna vez fue suyo lo perdió por idiota, y ahora no quedaba nada del amor que alguna vez sintieron ambos.

Sin poder evitarlo más, bajo la mirada, sorprendiendose al encontrarse con la mirada azul esmeralda de una tierna niña, que lo miraba irritada. Esa niña era hija de su amado Yuuji, su cabello largo y ondulado era de un rosa al igual que Yuuji, aún que palido, pero su mirada, que es azul, no coincidía en nada con el azul rey de Nanami, por qué el azul que ella tenía era más suave y claro, pero profundo, igual que los suyos cuando se enojaba.

Poniéndose rígido cuando de repente algo paso por su cabeza. Esto, no podría ser, ¿Verdad?, Era imposible por qué nunca supo de un embarazo cuando Yuuji y el estaba juntos. Pero si tomaba en cuenta la edad de la niña, la última que tuvo intimidad con Yuuji y los años que desaparecido, todos parecía coincidir en qué él era el padre. Rápidamente miro a su amado Yuuji, quien ya estaba con el velo levantado y dando el beso de marido y esposo con Nanami.

Oficialmente ya se había casado con Nanami, ya no era suyo, ya no podría recuperarlo, pero estaba bien, mientras sea feliz no había problema, pero ahora lo que quería saber era si sus dudas y sospechas eran ciertas.

¡Primer extra terminado! :D

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¡Primer extra terminado! :D

Quedan uno más o dos, no sé. Depende de lo que se me venga a la mente xD

En fin ¿Cómo están? ¿Están tomando awita?
Espero que sí.

Ese es todo por hoy, nos leemos en otra próxima actualización, cuidense ✨

🌈Atte: lucky Girl 🍀

Volverte a ver (GoYuu)Where stories live. Discover now