ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ ᴠᴇɪɴᴛɪɴᴜᴇᴠᴇ

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—Eso es de mal gusto. —se quejó Taehyung a mi lado.

—Tu cara es de mal gusto. —espeté con desagrado.

—YoonGi.

—Taehyung. —los dos nos miramos desafiantes, dando en hincapié nuestros tonos serios.

—No opines, Taehyung. Esta no es tu boda. —intervino Hoseok encontrándose a la par de nosotros, le miré de reojo y le brindé una sonrisa en agradecimiento, él notándose aún lo terriblemente bronceado que estaba por haber estado en California.

—Gracias hyung. Ahora, cómo yo decía. Creo que el tema debe ser rojo y negro. ¿Acaso Jungkook no se vería sexy con una corbata roja?

—Tú te verías sexy con una corbata roja. —una vez más intervino Hoseok en un momento inoportuno. Taehyung y yo nos volteamos para darle una palmada en la cabeza, él quejándose al momento.

No hables de mi novio de esa manera. —la voz de Jungkook se hizo audible en toda la zona, haciendo que los tres volteáramos a verlo yendo hacia nosotros. Él se encontraba subiendo las mangas de su camisa, encaminándose a mí para sentarse al lado mío, separándome de mis amigos. Sonreí e incliné mi cabeza en su hombro.

—Eres lindo cuando estás celoso —le dije— ¿Qué tal si en vez de eso coqueteas un rato conmigo? —Jungkook me miró eufórico, sonriendo de manera penosa para después esconder su rostro en mi cuello.

—¿Así es como somos nosotros? —habló Taehyung.

—Sí, así.

—Está bien, lo entendemos. Tenemos que irnos —Taehyung se levantaba lentamente de su asiento—. Nos reuniremos en el almuerzo para repasar más cosas. —con una sonrisa en rostro, los acompañé hasta la puerta. Sabía que captarían la idea. Una vez que se fueron, me di la vuelta y le hice un guiño a Jungkook.

—Entonces, ¿qué es lo que quieres hacer ahora, futuro esposo? —le pregunté. Él negaba, mientras sonreía notoriamente, para después palmear su regazo en señal de que yo fuera. Salté encima y no tardé en acomodarme, estando a espaldas de él mientras sentía su cálida presencia envolverme.

Envolvió sus brazos alrededor de mi cintura y recargó su rostro contra mi espalda.
—¿De verdad quieres pasar por la molestia de planear una boda? —suspiró—. Podríamos ir a las islas y tener nuestra propia boda, sólo tú y yo. —aw, ¿está siendo tímido?

Así, con la ubicación decidida, el siguiente paso fue ponerse en contacto con mi familia en cuanto a la cena pre-boda. La parte más dificíl de esto, por supuesto, era decirle a mi familia.
Me senté en el sofá con Sam echado a mis pies mientras Jungkook estaba en la cocina preparando la cena. Mirando fijamente el teléfono, solté un suspiro.

—¿Qué crees que dirán, Sam? —pregunté a mi mascota con un puchero en labios, él ladeó la cabeza hacia un lado. Claro, como si él fuera a ser de mucha ayuda. Él prácticamente me despidió como su dueño ahora que Jungkook, de alguna forma, le había agarrado cariño.

La cena está lista. —se escuchó la voz de Jungkook resonar en toda la sala, quien me miró del otro lado del mostrador y movía su mano en señal de que fuera.

—Estaré allí en un segundo, amor. Sólo quiero darle una llamada a mis padres.

—Has estado tratando de darles una llamada desde que salimos del trabajo esta tarde. Yoon, déjame hablar con ellos. —la manera con la que habla Jungkook a veces me hace tan vulnerable que estoy a nada de ceder. Pero no, negué con la cabeza e hice mis manos puños.

—Tengo que hacer esto.

—Bueno, entonces ven a la cocina por lo menos. No quiero que se enfríe tu cena. —dicho eso, le sonreí e inmediatamente me levanté.

—Sí, señor. —solté. Sam caminó detrás de mí, encontrando su lugar preferido debajo de la mesa: junto a los pies de Jungkook. Me acurruqué en la silla y marqué el número de la casa de mis padres.

Hola. Residencia Min. —¿es mi hermano?

—H-hola, soy YoonGi. —

¡Gatito! ¿Cómo estás, hermano? —sonaba tan alegre de escucharme después de mucho tiempo, y yo también lo estaba.

—No mucho... El trabajo es bueno, encontré un lugar agradable para vivir, me voy a casar dentro de unos días. Nada fuera de lo común, ya sabes.

Espera, ¿qué? ¡¿Te vas a casar?! ¡Cierra la puerta! —dijo y un portazo se escuchó de fondo. Rodé los ojos.

—Sí... En realidad sólo estoy llamando para decirle a mamá y papá. No he llamado en un tiempo. —Jungkook levantó un poco de arroz en una cuchara y me dio de comer.

Bueno, elegiste un momento bastante bueno. Con Yuna estamos en casa este fin de semana, y mamá y papá acaban de regresar de sus vacaciones. Entonces, ¿quién es la chica afortunada?

—Chico. —le corregí.

¿Eh? —y otra cucharada de arroz de Jungkook.

—Preguntaste quién era la chica afortunada. No es así, sino quién es el chico afortunado. —dije sin rodeos. Inquietante, estaba lo suficientemente tranquilo en el otro extremo como para oír car un bolígrafo.

¿Finalmente saliste del closet? —¿qué demonios? ¿Qué quiere decir con 'finalmente'?

—Hyung, siempre he estado fuera. Pero no para mamá y papá. —caray, vivimos en la misma casa todos estos años, y no se dan cuenta de este tipo de cosas.

Hm, bueno, eso está... bien. ¿Cómo piensas darle la noticia a ellos? —decía con lentitud. Solté un suspiro y me recosté en la silla.

—Quería hablar con ellos hoy e invitarlos a una cena que mi novio y yo vamos a realizar, pero creo que en persona sería mejor, ¿eh?

Creo que sí. Quiero decir, no te avergonzarán delante de un montón de gente y sabes que mamá todavía es blanda. ¿Cuándo es la cena?

—Hemos decidido que será el sábado en un hotel del centro. ¿Crees que podrás ir? —mis palabras salían sin control, importándome poco el hecho de estar firmando mi propia sentencia. Él rió y sabía que probablemente estaba saltando en un pie, así de emocionado.

Por supuesto que puedo. Volví a casa porque finalmente logré tomarme unas vacaciones. No te preocupes, con Yuna y los niños estaremos allí. Hablamos luego. —dijo eufóricamente. Sonreí ante su tono y le dije que se cuidara antes de colgar. Jungkook me miró.

—Entonces, ¿qué hay de nuevo? —preguntó con una mirada esperanzada. Me encongí de hombros, soltando una pequeña risa para que se tranquilizara y comencé a comer.

—Vamos a tener una cena el sábado y mi familia estará allí. Ve preparándote. —Diablos, ni siquiera yo estaba preparado.

Dᴇᴠɪʟ Bᴏss ; 국기 [KookGi] ᴀᴅᴀᴘᴛᴀᴄɪᴏ́ɴDonde viven las historias. Descúbrelo ahora