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Narrador omnisciente:
Pensemos...después del partido, que hizo Ron?

El pelirrojo estaba tan enamorado...tan contento por haber ganado su primer partido y haber quedado bien delante de todo el colegio...pero sobretodo de ella.

Oh Hannah. La chica era la única que pasaba por la mente del pelirrojo en ese momento.

Pero de que hablaba? Ron siempre tenía en mente a Hannah...bueno, hasta después del partido.

Todos los Gryffindor fueron a su sala común a celebrar la victoria contra las serpientes, sin embargo había una estrella en ese momento.

Ron era el centro de atención y a él le encantaba.

Además, estaba emocionado, pues la chica que le gustaba había aceptado hablar con él. Ya era otro paso hacia ella.

-Somos los campeones!- gritaban todos.

Muchos aplaudían o reían, otros comentaban pero el pelirrojo comía junto con otros.
-Toma, debes estar sediento.- le dijo alguien al pelirrojo.

-Gracias!- respondió este algo cansado.

Hermione y Harry entraban en ese instante, la castaña se veía desanimada pues había escuchado perfectamente la invitación del pelirrojo hacia Hannah.

Fue cuando Ron se subió a la mesa y acompañado de él estaba Lavender.

No dijeron nada más para juntar sus labios en un empalagoso y apasionado beso.

Ron estaba besando a Lavender y Lavender estaba besando a Ron.

Toda la sala común aplaudía y silbaba, toda menos Harry, Ginny y Hermione que salió al ver tal gesto.
-No lo entiendo Harry! Ahora que pasa con Hannah!?- decía la castaña llorando.

Era cierto, por que Ron había besado a Lavender si quería arreglar las cosas con la serpiente?

Eso Hannah no lo sabía.

Ella se encontraba en su cuarto, junto con Pansy hablando sobre el partido y temas aleatorios.

-Estoy muy cansada, iré a dormir.- dijo la chica a lo que la peli negra le tomó la mano.
-Hoy no.- dijo estirándola y llevándola a la sala común donde también había una fiesta al parecer.

-Que es todo esto? No hemos ganado.- dijo la chica algo confundido.
-Acaso tenemos que ganar para montar una fiesta?- preguntó Blaise.- Yo creo que no.

-Donde está Draco?- preguntó a lo que el moreno le respondió "leyendo en su cuarto".

Hannah pasó como pudo entre toda la multitud y finalmente llegó al cuarto del platinado. Tocó la puerta y pudo escuchar un "he dicho que no iré a esa estúpida fiesta!".

Hannah sonrió para entrar y encontrarse al chico en su cama leyendo o al menos tratando de hacerlo.
-Hannah.- dijo este algo sorprendido.

-Veo que somos dos que no quieren ir a la fiesta.- dijo la chica sentándose al lado de él.- Que tal va todo?

Draco bufó.
-Solo pierdo el tiempo aquí, pero me es imposible arreglar el armario.- dijo a lo que la chica pensó.
-Déjame ayudarte.- dijo a lo que el platinado negó.- Vamos, necesitas ayuda.

-No.- dijo cerrando su libro de golpe. Estuvo unos segundos callado y volvió a hablar.- Me han dicho que has jugado muy bien. Me alegro por ti.

-Eso parece.- respondió la chica.- Draco, sabes que estoy aquí para ayudarte, recuerdas? La familia primero.- dijo a lo que el platinado la miró.

-Exacto, tú, y mi madre vais primero. Este es mi problema.- dijo a lo que Hannah bajó la cabeza.

Quería ayudarlo pero era inútil.

Hannah y el platinado se pasaron hablando durante gran parte de la noche y cuando la chica se durmió, serían aproximadamente las tres de la mañana.

Cuando Draco se despertó, notó un peso a su lado. Hannah se había dormido en su cuarto.

Se levantó cuidadosamente y se preparó para seguir con su misión, dejando a la chica dormir tranquilamente.

En cuanto Hannah se despertó, inmediatamente notó que no era su habitación.
-Que hago aquí?- preguntó para darle un vistazo.

La habitación estaba oscura y fría, se notaba que era de Draco y Blaise, pero la cuestión era, donde estaban estos?

Miró el reloj que había en la mesa del platinado y abrió los ojos para ver que eran las cuatro de la tarde.

Tanto había dormido? Si que estaba cansada al parecer...

Se miró un momento para ver que estaba en pijama. Sin embargo no le importaba en absoluto.

Salió de la habitación y vio el mayor desastre que podía haber, gente aún por el suelo y todo desordenado.

Rodó los ojos para entrar en su cuarto, sin embargo se llevó otro susto.

Pansy dormida en el suelo y Blaise en su cama.
-Genial.- dijo para volver a cerrar la puerta.

La chica no sabía que hacer así que se dirigió a las cocinas donde seguramente los elfos le podrían dar las sobras de lo que quedara de comida.

Aquel día, Hannah no se presentó en el gran comedor, así que no pudo ver como Ron y Lavender se besuqueaban ni se demostraban su amor.

Hermione deseaba que la serpiente lo viera para que se diera cuenta de que Ron no merecía la penas sin embargo eso nunca pasó.

Cuando la chica terminó con su comida, volvió a su cuarto. Aún recordaba que Ron le había dicho de encontrarse en la torre de astronomía así que no se lo perdería por nada del mundo.

Se puso ropa decente y se peinó. Cuando Hannah salió de la habitación, Pansy aún dormía.

La chica caminaba tranquilamente mientras pensaba de que querría hablarle Ron.

Notaba como muchas personas hablaban y cuchicheaban a sus espaldas y la miraban como si hubiera hecho algo mal.

Los ignoró y empezó a subir escaleras y escaleras hasta llegar al lugar donde no había nadie.

No había luna llena pero se pondrían ver las estrellas así que decidió esperar sentada como en los viejos tiempos.

Ron aparecería a tiempo?

it had to be you (Ron Weasley)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora