it's a lovely day today

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Resumen: Beca recuerda los momentos con Chloe mientras se prepara para verla después de tres años alejadas.

*

Beca parpadea frente a su reflejo en el espejo de cuerpo entero en la habitación de su loft en Nueva York. Un suspiro se atasca en su garganta y mueve sus manos nerviosamente por las mangas de su chaqueta de cuero tratando de calmar sus temblorosos dedos. Su corazón late desenfrenadamente, las puntas de sus dedos se sienten electrizantes, su respiración se acelera y Beca teme, por un leve momento, que pueda terminar sufriendo un ataque cardíaco.

Pero sabe que todo se debe al sin fin de emociones que atraviesan su cuerpo como un rayo.

En primer lugar, está la alegría. Después de tres años no puede creer que finalmente haya llegado el día en que volvería a ver a la pelirroja. Estaba tan emocionada después de que los últimos meses fueran lentos y sus sentimientos estuvieran tan a flor de piel, que su única solución fue escribir.

Y así terminó gastando cuatro cuadernos con letras, que eventualmente terminarían construyendo un nuevo y exitoso álbum.

Pero mientras dejaba que esos sentimientos se filtraran fuera de su cuerpo y de su corazón, llegó la ansiedad. Con la ansiedad llegaron los constantes "¿y si...?" que no la dejaban dormir y la mantuvieron en vela la mayor parte del último año.

¿Y si ella no se hubiese marchado?

¿Y si le hubiese pedido que se quedara?

No, claro que no. Beca jamás se lo pediría. No sería capaz de hacer que Chloe dejará una gran oportunidad solo por quedarse con ella.

Pero ¿Y si conocía a alguien más?

-Pff -chista el pensamiento lejos de sí y se preocupa en arreglarse el pelo, tratando de evitar volver a hacerse las mismas preguntas.

Sus emociones estuvieron en un estado muy volátil últimamente cuando esa pregunta se abría paso en su cabeza, y muchas veces Theo tuvo que pagar los platos rotos. Eso la hace sentir un poco culpable, especialmente al recordar el incidente de la semana pasada. Toma nota mental de hablar con su manager cuando vuelva al estudio el lunes para arreglar las cosas.

Pero decide no pensar más en eso, no ahora que está a poco de reencontrarse con Chloe y eso es lo único que tiene en mente. Chloe. A quien no ve desde que se fue a la Antártida a una expedición con otro grupo de veterinarios y científicos. Había sido una gran oportunidad para ella, y Beca no iba a detenerla incluso si la pelirroja se lo pidiera.

Piensa en Chloe y en lo bonita que se ve en las fotos que le envió en sus correos semanales, y en lo más bonita que se verá cuando la vuelva a tener en sus brazos. Recuerda que fue justo eso lo que pensó la primera vez que se encontraron. Pensó que era la mujer más bonita que había visto en sus veintitrés años.

Beca había pasado por unas muy malas experiencias en el amor antes de tropezar con Chloe en la app de citas en la que su mejor amigo la inscribió sin su permiso.

*

-Como tu lesbro oficial -le había dicho Jesse irrumpiendo en su oficina.

-Te he dicho que no uses esa palabra -le replicó Beca poniendo los ojos en blanco y dejándose caer contra el respaldar de su silla de trabajo.

-Como tu lesbro oficial -repitió y ensancho su sonrisa maníaca-. Tengo el título legalizado y apostillado, por si lo quieres ver.

-De hecho, sí.

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