"Reloj de arena"

¿El anillo de compromiso?

Pov Arizona

Vamos una semana, una semana de luchar contra el desorden alimenticio que Callie afronta, recién mañana tenemos que volver con la doctora y ahí sabremos qué pasó con todo este esfuerzo de la primera semana.

Ella está como puede, sé que conmigo finge estar bien, me doy cuenta enseguida porque la conozco más que a mí misma, pero sé que está dando todo por salir adelante y sobre todo para demostrarme que puede.

Nuestra relación no tuvo grandes cambios, yo la amo...nos amamos, pero fue una semana tan pesada que no pudimos llegar a más que algún que otro beso cuando nos íbamos a acostar, pero yo le hacía toda la compañía que le hacía falta.

- ¡Call vamos a desayunar! –Le grité desde la cocina, ella estaba arriba. –

- Dale Calliope, mañana tenemos que ver a la doctora y me preocupa que no llegues al peso. –Ella seguía sin contestar así que subí. –

Entre a nuestra habitación y ella dormía abrazada a mi sweater salmón, ama que use ese sweater en particular, pero cuando yo baje ella se estaba cambiando o eso me dijo, parece una nena.

- Me acerqué a su cara y acaricie su mejilla, me llenaba de paz. – Callie, mi amor, arriba, tenes que desayunar. –Ella se aferró más al sweater y no abrió los ojos ni por un segundo. – Calliope lo digo enserio, quiero que mañana llegues a ese peso, no te quiero tener que ir a ver a un hospital. –Dije y ella se levantó de golpe, se puso mi sweater y se fue al baño. –

Me quedé desconcertada, yo no le había dicho nada malo, o quizás sí, pero no me di cuenta.

Sentada en la esquina de la cama mirando el piso, esperaba que ella saliera del baño al menos para que me dijera algo, no tuve ni mis buenos días.

- Estaba tan perdida pensando en que había pasado que no me di cuenta que ella estaba frente mío. - ¿Vamos a desayunar o qué? –Dijo seca. –

Me levanté y bajamos juntas, bueno fue una semana muy tranquila y tenía que llegar su malhumor, pero justo conmigo que hago todo lo que puedo para que ella esté mejor...bueno igual estamos en una pandemia encerradas, así que está bien.

Desayunamos en silencio, ella comió todo lo que tenía indicado en la dieta y una pequeña sonrisa salió de mí al ver que había terminado todo.

Junto y lavó todo sola, no pensaba meterme entre ella y los platos porque claramente salía perdiendo, así que me limité a sentarme en el sillón y esperar que algo saliera de su boca, así fuera un grito.

Pero nada pasó, vino se sentó a mi lado y enterró su cabeza en mi pecho quedando recostada sobre mí, yo no entendía nada, pero sentí la necesidad de quedarme callada y acariciar su pelo.

Pov Callie

Sí, se preguntarán que me pasó, bueno es simple...

El anillo de compromiso de Arizona sigue reposando hace una semana en el mismo cajón donde está desde que volví a casa.

Cada mañana me levanto y abro el cajón de su mesita de luz esperando a que hoy se lo haya puesto, pero nunca sucede y por más de que sea un simple "símbolo", para nosotras lo era todo y siento que algo está roto si ella no lo tiene, si todo estuviera bien, el anillo encajaría perfecto en su mano izquierda, pero solo brilla dentro de la oscuridad del cajón vacío...

Vengo intentando que no me afecte todos los días, pero ya llega un momento en el que caigo en el engaño de que está todo bien, que todo está como antes, pero después vuelvo a ver el anillo ahí y todas mis esperanzas de recuperar lo perdido se desvanecen.