Capítulo XVIII

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Jonathan y Harry llevaron su mirada hacia una mujer de aproximadamente veinticuatro años.

—¿Ella es su hija?—Preguntó Jonathan señalando a la bebé, la mujer asintió y corrió hacia ellos.

—Oh, muchas gracias, pensé que la había perdido.—Harry le entregó a la pequeña.

—Tiene que tener cuidado, los doctores a veces pasamos rápido y no nos damos cuenta.—

—Gracias, solo había ido a repartir comida, la niña se zafó de mi agarre.— Sonrió.

—No se preocupe, me han alegrado el día.— Se sinceró Harry, la mujer sonrió.

—La pequeña alegro mi día también.— Harry llevó su mirada hacia Jonathan y sonrió.

La pequeña sonrió, alzó sus manitas hacia Harry.

—¿Puedo?— La mujer estuvo de acuerdo.

Darcy se fue con Harry, la pequeña lo abrazó, el corazón del menor comenzó a latir rápido.

—Doctores, ¿Les puedo pedir un favor?—

—Sí claro, ¿Qué pasa?—

—Mi hija al momento de nacer, las enfermeras del hospital donde me atendieron la dejaron caer fuerte a los cuneros, me dijeron que podía presentar algún malestar ya que fue en su cabeza ¿Quería saber si ustedes pueden examinarla? No quiero que nada le pase.—

—¿Le parece si mañana la trae al hospital? La atenderé.— Dijo Harry.

—¿A qué hora?— Preguntó.

—¿A que hora viene a dejar la comida?—Preguntó.

—A las diez.—

—En ese caso a las diez.— La mujer asintió.

—Gracias.—

Estuvieron hablando un poco, ya que les estaba explicando cómo había pasado todo, desde que la bebé nació.
Hasta que al darse cuenta que era tarde, la mujer decidió irse, Darcy ya estaba dormida abrazando a Harry, el chico dejó a la pequeña en sus brazos.

—Muchas gracias, nos vemos mañana.— Asintieron.

La mujer comenzó a caminar hacia la recepción, Harry y Jonathan caminaron hacia el ascensor, esperaron unos minutos y entraron.

—Al menos la bebé alegro nuestro día.— Susurró Harry.

—Se encariño rápido contigo.— Sonrió.

—Sí, es tan tierna.—

—¿Alguna vez pensaste tener hijos?—

—Parece estúpido, pero si... Cuando tenía dieciocho.—

—¿Tan joven?— Asintió.

—Sí, quería tener un hijo de Louis a esa edad.— Frunció el ceño.

—¿Se conocían antes?—

—Sí, Louis era maestro en la institución en donde me inscribí, bueno... Lo conocí antes, pero ciertas cosas pasaron, mi etapa de adolescente, aunque... Aún así, quería formar una vida juntos, quería formar una familia... No me iba a arrepentir, lastimosamente después de tomar decisiones, no lo vi, hasta que en Londres lo vi con su amigo, pero no sabía que pensar, solo me fui a Canadá...—

—¿Y ahora ya no te gustaría tener hijos?—

—Siento que es muy riesgoso...—

—Tienes una excelente salud, no creo que tengas riesgo alguno. —

DOCTORS -L.S-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora