33 ❄ Decadencia

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Meses después...

Pasó tiempo desde la operación para el exterminio de los Tsukiyama.

Eto, cuando ya se recuperó de sus heridas, habló con su editor para publicar el que sería su último libro, 'Byleyg, el Rey'. Uno de sus últimos movimientos de ajedrez.

Haise o, mejor dicho, Kaneki abandonó el grupo de los Quinx. Este se reestructuró y se incluyeron nuevos miembros. El inspector, por su parte, comenzó con una investigación que tenía como objetivo desenmascarar a Sen Takatsuki como Eto Yoshimura. Además, ahora tenía un nuevo subordinado, Furuta.

Por otra parte estaban Hiki y Arima, aunque no había nada que decir sobre aquellos antiguos amantes. Su relación era más fría que ellos mismos.

La CCG encontró la guarida del Árbol Aogiri. Se ubicaba en la Isla Ru, cerca de la bahía de Tokio. Ahora, su principal objetivo, era acabar con ellos.

Sala de Interrogatorios

"Haise" cerró la puerta a su espalda, mirando al editor de Sen Takatsuki con semblante serio. El hombre se asustó un poco al verle. Se acercó hasta él y le pegó una patada a la mesa. El editor se cayó de la silla del susto.

-Si Sen Takatsuki es una ghoul y tú eres consciente de ello, me remitiré a la ley 119 para el tratado de ghouls. Haberla quebrantado significará que serás condenado a muerte - advirtió.

El editor frunció el ceño, asustado y agobiado.

Rato más tarde...

Haise y Furuta estaban en la azotea de Cochlea, hablando de la investigación que les había llevado a trabajar juntos.

-¿Lo lograste? - Preguntó Furuta.

-Sí - asintió Haise.

-Bueno, supongo que imaginaba que había demasiadas evidencias - murmuró el otro. - Es mejor prevenir que lamentar.

De pronto, Kaneki comenzó a alejarse de su subordinado.

-¿Eh, a dónde vas? - Preguntó Furuta.

-Solo quiero que revisen los documentos - contestó. - Por alguna razón, se han producido algunos retrasos.

-Qué trabajador - rió Furuta. - Por cierto, acerca de esa persona... ¿Su nombre era Fueguchi? Parece que será sentenciada en los próximos días.

Kaneki notó un nudo en la garganta, pero lo disimuló, olvidándose de él.

-Ya veo... - murmuró.

Día Siguiente

Ayato estaba apoyado contra una pared, apartado de los periodistas, mientras Sen Takatsuki daba la presentación de un nuevo libro, el último que iba a publicar.

-Hay algo que quiero informarles a todos hoy. Yo... yo soy una ghoul - confesó con su kakujan activado. Ayato abrió los ojos sorprendido.

Despacho de Hiki Washu

La joven miró sorprendida la televisión, al igual que Arima.

-Eto... - murmuró Hiki.

"¿Por qué lo has hecho?", se preguntó con una ligera presión en el pecho.

Arima se levantó y subió el volumen.

Sala de Prensa

-Un mundo que sea mejor para los humanos y los ghouls, un mundo donde ambas especies puedan coexistir... ese el mundo que deseo - dijo Eto. - Con mi última obra, 'Byleyg, el Rey', quisiera expresar los sentimientos de los que nacen como yo.

-¿Qué es lo que pretende? - Le preguntó Kaneki a Ayato. El chico se dio la vuelta, preguntándose cuánto tiempo llevaría allí.

-No lo sé - contesto Ayato.

-Lo escribí para dar una voz de aliento a aquellos que creen que ya no tienen esperanza - explicó Eto.

-La sentencia de Hinami ya se ha decidido - dijo Kaneki.

Ayato abrió los ojos y le miró.

-Deseo con todas mis fuerzas que esta novela pueda llegar a muchas personas y ghouls - deseó Eto.

La joven escritora terminó de hablar y se acercó hasta el inspector, "Haise", ignorando a los periodistas, que no paraban de hacerle preguntas y sacarle fotos. Eto y Kaneki se quedaron mirando unos instantes. Ambos comenzaron a caminar, para llevarla a Cochlea.

-Eto... - murmuró Ayato cuando pasó por delant. Ella se detuvo y le miró.

-Ya hiciste suficiente, Ayato. Vive a tu manera - contestó Eto. Se acercó hasta Kaneki y le sonrió.

-Sen Takatsuki , mejor dicho, Eto Yoshimura estás bajo arresto por violar la ley antighoul - informó el inspector.

-Qué buena expresión tienes ahora - sonrió la chica.

Cochlea

Después de hacerle una breve visita a su editor, Kaneki y Eto fueron hasta la celda donde ella sería encerrada.

-¿De dónde conseguiste la inspiración para el libro? - Preguntó el inspector mientras caminaban.

-Todo lo que escribí es cierto - sonrió la escritora. - Los del Clan Washu son simpatizantes de los ghouls. ¿Conoces una organización llamada V?

-¿V? - Preguntó Kaneki.

-Es una organización que piensa que todo el mundo le pertenece - contestó Eto.

-¿Los Washu son esos V? - Preguntó el chico.

-Sí - asintió ella.

-Es una mentira - respondió Kaneki.

-¿Tú crees? - Preguntó Eto. - ¿Por qué no reaccionó la puerta a mis células RC?

-Porque eres mitad ghoul mitad humana - contestó.

-Te equivocas, en ese caso no debería responder a ti - sonrió ella. - Las puertas RC están configuradas para que no reaccionen a los ghouls con cierta estructura molecular.

-¿A qué te refieres con eso? - Preguntó Kaneki.

-La constitución de los ghouls pertenecientes a V - respondió Eto. - Los miembros del Clan Washu, como Tsuneyoshi, Matsuri, Yoshitoki, Hiki o Arima; mi padre, Kuzen; yo, su hija y, por último, Rize Kamishiro. La mujer que llevó este infierno a ti es una ghoul que escapó de V.

Kaneki la miró, sorprendido pero con algo de desconfianza.

-Vamos, Kaneki, es bastante obvio - dijo Eto. - Cuando te muerdes la lengua, ¿no te sale sangre?

Despacho de Hiki Washu

Al acabar la rueda de prensa de Sen Takatsuki, Arima apagó el televisor. Dejó el mando a distancia sobre una estantería y miró a Hiki.

Ella se levantó y se acercó a Arima.

-¿Tú sabías algo? - Preguntó él.

-Hace años que no hablo con Eto - contestó Hiki. - Y la última vez que hablé con Tatara fue hace un par de semanas, cuando la CCG descubrió la guarida del Aogiri. No me dijo nada.

Los antiguos amantes se quedaron mirándose unos segundos.

-¿Qué crees que ha escrito en ese libro? - Preguntó Arima.

-Todo - contestó Hiki. - Toda la verdad que nosotros le hemos contado y la que ha descubierto ella. Es su último libro, sus últimas palabras. Conociéndola, no creo que se haya callado nada.

-Y respecto a lo que habrá escrito sobre nosotros, ¿qué hacemos? - Preguntó Arima.

Hiki se acercó a él, le puso las manos sobre las mejillas y le besó. Él la abrazó por la cintura y la acercó un poco más.

Cuando se separaron, se miraron. En sus ojos oceánicos.

-He llorado por ti y he corrido por ti, moriría por ti, pero ¿harías tú eso por mí? - Preguntó Hiki.

GARDEN ❄ Kishou ArimaWhere stories live. Discover now