Capitulo 1.

699 93 28
                                    

<⭐>

- Y-Yo creí que ya podía...- miraba sus manos con vergüenza, estaba tembloroso de solo recordar la situación a la que se fue a meter.

OMS le miro atento, ya sabia cual fue el acto que había hecho México, y le daba demasiada tristeza verlo así de desesperado.

- México, esto es un proceso, cada paso que des debe ser preciso y seguro, tratar de adelantar esto solo te hará retroceder...- México se encogió en su lugar, se sentía tan idiota.- Pero...- el tricolor subió un poco la mirada para saber que era lo que tenia que agregar la organización.- Fuiste muy valiente...

México se extraño al recibir esas palabras, ¿Valiente?, pero si literalmente tuvieron que sacarlo de la sala.

- Tuviste la voluntad de ir y presentarte a la junta...Tu quisiste que todos te vieran, quisiste enfrentarte a todos, la valentía que tuviste es envidiable México...Es algo que debo aplaudirte...- sonrió gentil al país, orgulloso de que en México aun viviera un espíritu guerrero.

- G-Gracias...- sonrió a sus adentros, creyó que lo único que recibiría serian regaños.

- México, quisiera que tu me contaras que fue exactamente lo que paso...- El tricolor le miro, luego aparto su vista a la nada, recordando el día anterior.

////

- Papá puedo entrar yo, no necesitas hacerlo...- volvió a hablar la capital, poniéndose más nervioso con forme se acercaban a las instalaciones de ONU.

- Necesito hacerlo...- hablo con fuerza y determinación. CDMX le miro de reojo preocupado. Ese día nunca creyó tenerlo tan cerca, su padre apenas se despertó pidió que le llevara a la junta de ONU, esto le dejo anonadado, que todo el camino a dicha reunión no paraba de cuestionarle si estaba seguro de su petición, proponiendo incluso ir él en lugar de su padre, pero México mantuvo su decisión.

La capital se detuvo cerca mirando a su alrededor, demasiados países caminando y acercándose al edificio, temía que esto fue muy abrumador para el tricolor. Volteo a ver a su padre en el asiento del copiloto, vestía un pantalón gris, camisa blanca de vestir y unos tirantes como decoración, México se había opuesto rotundamente a ponerse un traje negro.

- Papá...- Le hablo, México mantenía su mano en la manija de la puerta, se podía escuchar su respiración agitada y abrazaba con fuerza su pequeño maletín.- Podemos irnos, has llegado muy lejos hoy...

- No...quiero hacerlo...- México escucho el suspiro de resignación del menor, también escucho como se quitaba su cinturón dispuesto a bajarse del auto.- Quédate aquí...Yo iré solo...

- ¿Qué?...- México respiro profundo y abrió la puerta de su lado para salir.- Papá por favor...- Demasiado tarde México había decidido ir a ese lugar. CDMX no quería presionarlo o recibir alguna desaprobación, así que se quedo dentro del carro, apretando el volante y resistiendo las ganas de detenerlo. 

México miro como la zona se estaba despejando indicando que la mayoría de países ya estaban dentro. Sintió como sus manos temblaban y sus ojos de humedecían, el sudor llego a él de inmediato y una presión en el pecho lo ataco. Pero no pensaba dar un paso atrás ahora que estaba tan cerca. Avanzo importándole poco que sus piernas flaquearan casi tarándolo, siguió adelante hasta tener las puertas del edificio al frente, eran de vidrio arenado así que solo podía ver algunas siluetas de personas moviéndose dentro. Tomo la manija percibiendo como una gota de sudor resbalaba de su mano, trajo saliva de nuevo y la abrió sintiendo el miedo en cada parte de su ser, como si lo que estuviera del otro lado fuera su más horrorosa pesadilla, aunque para su mente si que lo era.

Reinició.- CountryHumans.- T.2Where stories live. Discover now