❛Promise❜『Bakushima』

ғɪғᴛᴇᴇɴ

Un extraño pero reconocido olor a carne quemada le hizo abrir lentamente los ojos, la sensación junto al olor a humedad le hicieron recordar de pronto a su último despertar junto a Denki.

¿Acaso había fracasado de nuevo y alguien lo estuvo cuidando todo ese tiempo?

Trató de enfocar su mirada pero por algún motivo no funciona, solo veía la fogata y detrás de ella una silueta grande y robusta que imponía un respeto que no sabía de donde salía.

Por lo menos sabía que era hombre, la forma se lo decía.

Se intentó reincorporar del suelo al apoyar la mano pero sintió dolor, pronto se logró ver notando como sus dedos estaban morados.

También su nariz, y sus piernas.

De alguna forma logró sentarse con la espalda apoyada en la pared de la cueva.

ーOh, sigues vivo, creí que había traído inútilmente un cadáver a mi casa ー

Una voz más que conocida le hizo enfocar de inmediato su mirada en una dirección, quiso llorar, quiso gritar, quiso correr a abrazarlo pero logró contener todo eso en una pequeña sonrisa que apenas se asomó por sus labios.

ーQuédate tranquilo, voy a vender tus manos y piernas, no quieres perderlas, ¿Verdad? ー

Se limitó a mover un poco la cabeza aún algo anonadado por la situación, Katsuki, una copia exacta a su Katsuki estaba frente a él mientras sacaba unos paños de sobre unas rocas calientes que tenía al lado de la fogata, pronto entendió que había hecho eso varias horas, tenía las manos sumamente sucias.

ーTuviste suerte que te encontré, un par de horas más y habrías muerto, ¿Cómo puedes ser tan imbécil para salir con esa ropa? ¿O es que acaso te robaron? ー

Movió un poco la boca para hablar sintiendo cómo su sistema volvía a funcionar, ¡No tenía que sanar tan rápido! Katsuki se daría cuenta que no era humano.

No sabe cómo lo logró pero su sanación mágica se detuvo.

ーNo... No recuerdo cómo llegué ー

Se atrevió a preguntar viéndolo sonreír. Oh diosa, cómo extrañaba esa sonrisa, como extrañaba ver el ceño a medio fruncir cuando algo le daba gracia.

Agradecía estar vivo en el mismo momento que él.

ーSoy Eijirōー

ーBakugō ー

Se quedó mirando atentamente mientras le vendaba la mano, la forma que lo hacía era tan delicada que le asombraba, no era para nada como el Katsuki de sus recuerdos.

ー¿Sólo Bakugō? ー

ー¿? No, pero no te has ganado el derecho de saber mi nombre completo ー

Ahora fue su turno de sonreír, ahí estaba la altanería que siempre poseía.

ーGracias por salvarme, Bakugō ー

ーNo fue gratis ー

ーOh, no esperaba que lo fuera ーreconoció ーEntonces señor Salvador de mi vida, ¿Qué espera obtener de mi? ー

Y lo vio reír, lo escuchó reír, quería tanto tocarlo.

ーCuando te puedas mover acompáñame en un viaje, me aburrí de viajar sólo ー

ーComo ordene señorー

Se sonrieron antes de que Bakugō le ofreciera un pedazo de carne que estuvo más que gustoso en recibir.

Izuku le había dicho que Katsuki debía matarlo por lo que no creía que moriría pronto, quería creerlo y esta vez se aseguraría que así fuera.