Me arrebataste algo que era mío, a quien amaba. ahora yo te arrebatare lo que más amas.
¿Creíste que esto se iba a quedar así? Pues no, esto no se va a quedar así, no sabes quién soy, no sabes nada de mí, pero yo sé todo de ti; voy a ser tu peor p...
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Paige
Ariadna ha solicitado una junta donde tengo que mostrar los avances que llevo para la exposición, estoy un poco nerviosa al respecto, ya que no sé si aceptaran los cambios que quiero implementar, sé que es demasiado arriesgado, pero creo que puedo llevarlo a cabo, solo necesito que confíen en mí. Sé que el primero en criticar mi trabajo será Alonso, pero mi objetivo hoy, es que todos acepten mis propuestas y que me den su voto de confianza, porque si no lo hacen, no que voy hacer
.
—¿Estas lista? —me sobresalto al escuchar la voz de Ariadna a mis espaldas.
—Sí, estoy un poco nerviosa.
—No tienes por qué estarlo, todo irá bien, todos allá adentro confiamos en ti.
Quisiera decirle que no todos, pero decido callármelo y seguirla.
Las dos nos dirigimos a la sala de juntas, donde ya todos se encuentran allí, observo a los directivos, veo a Ariadna, que no me dijo que ellos vendrían, ella solo me da una sonrisa reconfortante que no me reconforta para nada, al contrario, me pone nerviosa, si ellos no aprueban mis ideas todo el trabajo que llevo hasta ahora se ira al carajo. Les entrego una carpeta a cada uno de los que se encuentran en la sala, conecto mi laptop al proyector para poder dar inicio a esta junta.
—Buenos días, bueno, esta junta fue hecha para ver los avances para la próxima exposición, y aprovecho que aquí se encuentran los directivos, para agradecerles la oportunidad que me han dado para organizar esta exposición, les prometo que haré todo lo posible porque esta sea un éxito.
Doy click en la presentación PowerPoint que he hecho para dar un resumen rápido y sencillo de lo que ira la exposición.
—Bueno, he pensado en darle un giro a la exposición —veo como los directivos me observan expectantes a que continúe —. Después de pensarlo un tiempo, he decidido llamarla sueños rotos, se preguntarán porque ese nombre, que no tiene nada que ver con las obras de arte que manejamos, pero quiero decirles que sí tiene que ver y mucho.
«¿Cuántas personas no han tenido al menos uno de sus sueños rotos? Ya sé que nosotros mismos los rompamos al sabotearnos nosotros mismos, o alguien rompiendo nuestra ilusión antes de que esta se llegue a realizar.
—Pero que nos impide a nosotros volver a reconstruir de nuevo esa esperanza y que ese sueño que se creía roto, logre hacerse realidad y deje de ser un sueño roto. —trago saliva, esperando a que digan algo.
Todos los presentes me observan, observo a Ariadna, que asiente con su cabeza para que continúe y así lo hago.
—La idea que tengo para esta exposición, es traer a nuevos artistas, encontrar aquellos a los que le han roto su sueño y que han luchado para lograr cumplirlo, que demostraron que, con trabajo duro, esfuerzo y perseverancia se puede cumplir.
