a boku no hero academia fanfiction ⁺⁎
.˳⁺⁎˚ ୨୧ 𝒊𝒏𝒆𝒇𝒇𝒂𝒃𝒍𝒆
(adj.) too great or extreme to be expressed or described in words.
No había forma de explicar cómo los hilos del destino entrelazaron sus caminos; así como no...
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Los rayos del sol se abrieron paso entre las nubes, iluminando al pelotón de estudiantes que se posicionaban en hileras en el campus de la academia Yūei; al frente de todos, en el estrado, se encontraba el director de dicha escuela preparatoria: Nezu, un animal que había desarrollado una particularidad. Estaban por finalizar el tercer semestre de ese año escolar, era el último día de clases antes de las vacaciones de primavera. Los alumnos de cada promoción darían un paso hacia el curso siguiente, a excepción de los de tercer año: ellos ingresarían a la universidad, conseguirían un trabajo o, en el caso de los alumnos pertenecientes al departamento de heroísmo, obtendrían la licencia que los acreditaría como héroes profesionales.
Hirawa Mai, una chica de cabello rubio platinado, tez pálida y ojos azules tan claros como la celestina, posicionó su mano izquierda arriba de sus cejas, con la intención de proteger su vista de la incandescente iluminación que otorgaba el sol. A pesar de lo despejado que se encontraba el cielo, el frío todavía perduraba en las calles de Japón; en ese instante, tanto Mai como el resto de los estudiantes agradecían que el calor todavía no llegase.
El director, en medio de su discurso, llamó a uno de los alumnos del tercer año del curso de héroes: Kazuo Takeru. El joven de la clase B subió al escenario y los aplausos no se hicieron esperar; la mayoría de los alumnos clamaron su nombre y silbaron en aprobación. Mai no tenía ni idea de quién era (desconocía la identidad de más de la mitad de los casi seiscientos sesenta alumnos que cursaban la academia Yūei), pero supuso que se trataba de un chico popular. Por delante de ella, logró visualizar a una de sus compañeras de clases suspirar por él.
Decidió, motivada por su curiosidad, observarlo bien: su cabello era castaño claro, suave, con ondas y no muy brilloso; cejas rectas y ojos almendrados de color miel. Kazuo saludó al público y empezó a dar su discurso. Hirawa Mai cruzó sus brazos; al menos, desde su punto de vista, ese chico no era interesante, así que no comprendió por qué tanto revuelo por parte de los demás.
Sin prestar real atención a las palabras que soltaba el joven, Mai se balanceó y observó a sus alrededores sin un objetivo en mente, solo estaba aburrida. El sol le molestaba y deseaba desabotonar su bléiser grisáceo; aunque, por obviedad, no podía desarreglar su uniforme escolar, porque eso era desaprobatorio; además, sabía que si Aizawa Shōta (el profesor titular de su clase) se daba cuenta, la reprendería.
Los alumnos se encontraban en completo silencio mientras lo escuchaban; Mai, en un intento de ignorar la molestia que la luz le provocaba, optó por volver su atención hacia él. Kazuo les agradecía a los profesores de la academia por instruirlo en su camino al heroísmo; mencionó que deseaba de todo corazón convertirse en un héroe que les inflara el pecho de orgullo y que por, sobre todo, Japón y toda la ciudadanía depositara su confianza en él. El joven, entre lágrimas, dijo que su mayor deseo era proteger y salvar a quienes se encontraban en situaciones de vulnerabilidad. Kazuo hizo una breve pausa, en donde el público decidió aplaudir para darle ánimos. A esas alturas, lo único que la rubia lograba escuchar al interior de su subconsciente era ‹‹bla, bla, bla››.
