"M & F ❤" 3

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Había dos momentos favoritos que, sin duda, Misato y Mashiro no se perderían por nada del mundo: el entrenamiento y el baño, ya que estos momentos eran los que más disfrutaban por la sola presencia del omega.

Primer momento favorito del día: el entrenamiento.

Misato y Mashiro disfrutaban de ver como Futaba estiraba aquellas piernas en las que querían dejar marcas, por lo que los entrenamientos habían dejado de ser aburridos para ellos. El simple hecho de ver lo que tanto podía estirarse el omega los hacía delirar. Querían enterrarse dentro del castaño una y otra vez mientras lo tomaban de sus piernas y las estiraban aún más para darles más espacio para entrar en el agujero virgen del chico. Pero aquel entrenamiento fue diferente. Su primer momento favorito del día se había vuelto el peor.

—¡Sigue así, Shotaro! —lo animaba el senpai rubio, ayudándole al omega a estirarse, debido que la posición era algo incómoda para el menor y todavía no podía mantenerse en equilibrio. Ambos alfas voltearon a ver la escena, encontrándose con que Shotaro estaba estirando todo su cuerpo hacia atrás, como si quisiera dar una voltereta, manteniendo las palmas de sus manos sobre el suelo y su vientre al aire, haciendo que su blanca camisa se resbalara un poco y vieran un poco de su vientre. Gruñeron de satisfacción por tal perfecta vista. —Trata de relajarte, estás muy tenso. —le dijo Onagawa mientras tocaba el abdomen del chico, tratando de relajarlo. Sabía que dicha postura era difícil, y más si se estaba en dicha posición por más de 10 minutos, pero tenía que ayudar a Shotaro a avanzar.

Antes de seguir animando al omega, el rubio miró a sus compañeros de primer año, notando su mal humor de alfas por haberse atrevido a tocar el vientre del omega al que cortejaban. Era de conocimiento común el saber que los alfas instintivamente protegían a los omegas más cercanos a ellos, no solo a sus parejas, sino también a sus padres, hijos e incluso amigos, pero, sobre todo, protegían sus vientres, debido a la naturaleza de no extinguir la especie. En este caso, lo que más deseaban los lobos interiores de Misato y Mashiro era el preñar a su omega cortejado, por lo que estaban a punto de saltar sobre el beta de cabellos rubios por el simple hecho de tocar el vientre no preñado de su omega.

Probablemente moriría después de aquel entrenamiento, pero Onagawa-senpai no moriría sin molestar aún más a las estrellas.

—¡Que miedo, las estrellas me quieren matar, Shotaro-kun! —chilló el rubio con falso medio, ayudándole al chico a levantarse para después aferrarse a él, mientras seguía viendo las expresiones de Misato y de Mashiro.

—Voy a matar al teñido. —susurró Mashiro con claro enfado. Era claro que él era superior al beta y que Futaba lo elegiría a él como pareja, pero le molestaba el saber que hubiera más gatas rompe hogares además de Misato.

Misato no amenazó al senpai rubio, pero en su mente ya lo había asesinado un montón de veces por atreverse a tocar a su omega. Gruñó de enfado, sacando a relucir sus feroces colmillos.

Futaba, como ya era común, no se dio cuenta de las miradas de ambos alfas sobre el rubio, por lo que siguió con su rutina habitual, yendo hacia Watari para que lo ayudara con los saltos. Y ahí fue el turno de Watari de ser asesinado por la mirada de ambas estrellas celosas.

Segundo momento favorito del día: el baño.

—¿Misato-kun? ¿Estás bien? —preguntó el castaño, preocupado de ver como su amigo pelinegro estaba muy distraído, lo cual no era común ver en él. Shotaro no quería pensar en que Misato se haya enfermado.

—Estoy bien —le contestó el alfa —, solo estoy un poco cansado. —Shotaro miró a su compañero. ¿La estrella del equipo estaba cansada tras una práctica? Por lo que él había notado, el entrenamiento no había sido muy extenuante, por lo que nunca se le pasó por la mente el que su querido amigo simplemente estuviera cansado. —No te preocupes por mí, me daré un baño antes de dormir.

Diario de un omega despistado |Bakuten / Backflip| 🔞حيث تعيش القصص. اكتشف الآن