.♬•𝑷𝑳𝑨𝒀𝑳𝑰𝑺𝑻•♫•.ᴹᵉʳˡíⁿ ˣ ᴸᵉᶜᵗᵒʳᵃ

𝑨𝒓𝒄𝒂𝒅𝒆

—japi birdei.. Japi.. Japi..

Soltaste un suspiro. Estabas practicando la pronunciación del Feliz Cumpleaños en Inglés y sentías que no podías. Apoyada en el respaldo de tu cama, miraste a todos lados, todo tan gris como lo recordabas desde que naciste.

En un mundo donde todo es gris, hasta que encuentres a tu alma gemela, no tenías el derecho de ver como es el mundo a tu alrededor más que en aquellos tonos opacos y oscuros.

Era una total mierda, pensaste, mientras volvías a tomar tu teléfono con la canción del Feliz cumpleaños en Youtube.

En lo personal, sentías que ya habías encontrado al amor de tu vida, pero, aún no podían ver aquel mundo de colores del que todos hablaban. Aún así, ambos no pensaban mucho en eso, porque los momentos felices que compartian juntos nadie se los iba a quitar.

Aun así, seguiste pensando mientras veías el cabello despeinado de Merlín durmiendo a tu lado. Querías que el pudiera ver ese mundo de colores del que todos disfrutaban menos ustedes y ya casi era su cumpleaños, así que te la pasabas deseando cada noche antes de dormir que el pudiera verlo pero cada año era lo mismo.. Sin poder ver ese mundo.

Querías que este año fuera diferente, que el pudiera ver su mundo de colores y por fin el destino aceptará que ambos eran su pareja destinada.

Dejaste tu teléfono de lado y te acostaste, sonriendo de inmediato al ver a Merlín acomodarse entre tus brazos. Besaste su frente, notando como dormía tranquilo y cerraste los ojos. Eran las 08:30 de la mañana y aún tenian tiempo de poder seguir durmiendo.

Y antes de poder caer en el más profundo sueño, volviste a desear que Merlín pudiera ver ese mundo de colores, sin saber.. Que pronto se cumpliría.

⏳

La alarma suena, tan estridente como siempre. Ambos se levantan con un susto y Merlín se estira en su posición, viendo de reojo como apagas la alarma de un golpe.

—Buenos días..—Dices, con un bostezo.

Merlin se apoya de lado con uno de sus brazos y se acerca a ti, sintiendo sus labios encontrarse con los tuyos.

—Mi beso de buenos días.—Finaliza alzándose, ganándose una sonrisa de tu parte la cual corresponde.

Sentado en su cama, busca su ropa por todas partes, notando como por la ventana, ya entraba la luz del sol. Luz que no sabía exactamente como se veía o de que color era.

Miró el calendario en la mesita de noche, estaban a una semana de su cumpleaños.

Su cumpleaños número veinte para ser exactos.. Veinte años de vida en el que jamás había visto los colores del mundo y el siguiente año serian veintiuno si no lo lograba este año.

Lo cual era lo más probable.

Hace ya casi cinco años te había conocido. Cinco años de puro amor y risas, mientras disfrutaban el mundo tal cual era a sus ojos. Pero dolía, dolía cada vez que alguien los paraba en la calle al verlos tan felices y enamorados preguntando como se sentía descubrir el mundo al conocer a tu alma gemela.

Y ellos sufrían, porque al ver a la pareja frente a ellos lo notaban, notaban esas dudas y miedos en sus ojos al pensar que la persona que llevaban de su mano no era la indicada. Así que ambos siempre desviaban la situación para poder salir de ahí.

Porque ambos sentían que eran los indicados, ambos habían compartido tanto que era inevitable sentir una felicidad cada vez que se veían.

Era un amor diferente, pero no se arrepentian. Solo maldecian aquel mundo en el que nacieron, donde se les impedía ver el mundo en sus vivos colores.