Los Merodeadores en 1996

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1971

Chloe Potter estaba durmiendo relajadamente en su gran cama en la Mansión Potter, hasta que su hermano gemelo, James, saltó encima de ella, haciendo que el oxígeno saliera de sus pulmones.

"Lizzy, ¡levántate! Mamá ya ha hecho el desayuno y tengo hambre" exclamó el mayor de los hermanos Potter en su oído, usando el apodo con el que llama a su otra mitad.

Si hay algo que Chloe Elisabeth Potter odia, eso son las mañanas. ¿Por qué te tienes que despertar temprano cuando puedes dormir? No lo entendía, así que, protestando e intentando golpear a James en la cara, se levantó y fue al aseo de su habitación para asearse.

Mientras se lavaba los dientes recordó que día era, y no tardó en correr de vuelta a su cama, donde el niño con pelo despeinado estaba viéndola con una sonrisa divertida, esperando a que se acordase. Jay - como ella lo llamaba - conocía a su hermana mejor que nadie, y estaba seguro de que se había olvidado que que era uno de Septiembre, también conocido como el día de vuelta a clases para magos y brujas de Inglaterra, o en el caso de los gemelos y muchos niños más de once años, su primer día en Hogwarts.

"¡James! ¡¿Por qué no me has despertado antes?! ¡Vamos a llegar tarde a la estación si no mueves el culo ahora mismo! ¡Y QUITA TUS ASQUEROSOS PIES DE MI ALMOHADA!" Chloe gritó mientras elegía un conjunto de ropa que ella describiría como 'ideal e inolvidable para marcar huella en la escuela' de su armario

James no tardó tiempo en hacer lo que ella le había mandado, porque su hermana pequeña - como a él le gustaba llamarla a pesar de ser solo doce minutos mayor que ella - había usado su nombre completo, y no un apodo, lo que solo pasaba cuando: uno, Chloe no estaba de buen humor, dos, estaba enfadada con él, o tres, estaba a punto de darle un puñetazo, y sinceramente al chico de gafas no le gustaba ninguna de las tres opciones.

Después de arreglarse, los gemelos bajaron a la cocina, donde Fleamont y Euphemia Potter, sus padres, estaban esperándolo con grandes sonrisas en sus caras.

"Buenos días niños. ¡He hecho vuestro desayuno favorito! Ahora parad de hacer el tonto y comed, porque no creo que queráis llegar tarde en vuestro primer día en Hogwarts" dijo muy divertida Euphemia. Ella amaba a su familia con todo su corazón, incluyendo a sus momentos de hacer el tonto.

"Rápido, comeos las tortitas, no tenemos mucho tiempo, sobretodo tu James, porque estoy un 95% segura de que todavía no has hecho las maletas."

"De echo, madre querida, si lo he hecho. Chloe me hizo hacerlo ayer. Lo único que me falta por empacar es mi escoba" James dijo, tratando de convencer a sus padres para que le dejen llevar su Nimbus 1987 por la milésima vez desde que recibieron sus cartas de admisión, ya que según él, era una crueldad privarle de su bebé, o dicho de otra manera, su escoba.

"Hijo, ya hemos hablado de esto..." empezó Monty divertidamente.

Y así es como los Potter pasaron su última mañana juntos antes de que los niños se fueran por meses: riendo, hablando, empacando cosas de último minuto y los gemelos despidiéndose de Binky, su elfo doméstico, a quien veían como parte de la familia.

Cuando la familia de cuatro termino de decirse adiós en la plataforma nueve y tres cuartos, James y Chloe entraron al tren para sentarse en un compartimento, listos para un nuevo capítulo en sus vidas.

Algo más de diez minutos hablan pasado cuando un chico con pelo largo y oscuro, ojos grises, rasgos aristocráticos y, según Chloe, muy atractivo, se unió a los hermanos.
Su nombre era Sirius Black.

Solo había pasado media hora desde que el trío se conoció, pero ya habían conseguido crear una unión irrompible.

Una hora después podías encontrar a cinco niños en el compartimento. Ahora Peter Pettigrew y Remus Lupin eran parte del pequeño grupo de amigos, no, parte de esta familia.

Las horas pasaron rápidamente, y ahora todos los niños de once años estaban en el Gran Comedor esperando para saber su casa.

Los ojos de Hogwarts estaban centrados en el grupo de pequeños magos y brujas que temblaban, algunos de emoción y otros de nerviosismo.

Muchos niños ya habían sido seleccionados con su nueva familia, incluyendo a cuatro de los cinco amigos, los cuales estaban sentados en la mesa de Gryffindor esperando a que su quinto miembro fuera llamado por la profesora vestida de esmeralda.
En ese momento dicha bruja, la Profesora McGonnagall habló otra vez.

"Potter, Chloe."

La hermosa niña - según la opinión de la mayoría de la población masculina de Hogwarts (y mucha femenina) - ahora estaba bajo el sombrero seleccionador, esperando a que hiciese su decisión bajo cientos de pares de ojos que susurraban apuestas en que casa seria la afortunada de recibir a la Potter.

Sin embargo, nadie estaba esperando lo que dijo el sombrero a continuación.

"¡Slytherin!" exclamó el sombrero.

Silencio.

Todo estaba callado.

La primera Potter en Slytherin.

Nadie hacía ni decía nada hasta que cuatro novatos de Gryffindor empezaron a aplaudir y celebrar por su hermana o amiga, haciendo que estudiantes y profesores se les unieran.

Chloe sonrió ante esto. Estaba feliz con su casa, incluso si no era la de los leones. Y estaba incluso más contesta y agradecida con su hermano y sus nuevos amigos por aceptarla sin juzgarla por el color de su corbata por los próximos siete años.

Se sentó en la mesa de las serpientes y empezó a hablar con una chica de su edad, también Slytherin. Era rubia, con postura elegante y ojos de un azul glaciar. Narcissa Black. Quien pronto se convertiría en su mejor amiga.

Chloe Elisabeth Potter se sentía más feliz que nunca, su historia ha empezado y no podía estar más emocionada.

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1053k palabras.
¡Primer capítulo!

Aquí vemos el inicio de la amistad de los Merodeadores y su primer día en Hogwarts.
He decidido poner a Chloe en Slytherin porque no he visto ninguna historia así antes.

Espero que os guste :) No olvidéis votar y comentar

- Violett ♡

Por cierto, se me olvido mencionarlo, pero los edits del capítulo de los personajes los hice yo, estoy orgullosa, creo que quedaron bastante bien :)