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El salón de eventos del hotel tenía el tamaño perfecto para los aproximadamente cien invitados que la pareja había invitado. Shuhua estaba segura de que más de la mitad de las personas ahí iban por Jaekyung, reconoció algunos colegas de su padre pero los demás eran completos desconocidos para ella.

Cuando la pareja compartió los votos Shuhua pudo notar como Lucy y Doyeon sonreían, eso le alegró porque creía que finalmente Doyeon había aceptado el hecho de que su familia iba a cambiar un poco, solo esperaba que Lucy no deje de adorar a su padre cuando se entere de la verdad sobre el divorcio de sus padres.

No había notado que estaba perdida en sus pensamientos hasta que la suave mano de su novia se acercó a su regazo, atrapando su propia mano y enredando sus dedos de forma natural.

—Están muy enamorados. —Susurró la mayor a su oído, su mirada se fue a la forma en que su padre tomaba a Jaekyung, como le hablaba casi como si fuera el ser más delicado del mundo. Y aunque le costaba admitir que su padre podría ser esa persona, no podía negar que el amor estaba en el aire.

—¿Algún día te quieres casar? —La pregunta de Miyeon le dejó sin palabras, quizá porque ese tipo de preguntas las solía hacer la taiwanesa. Miyeon era claramente una mujer romántica, pero ese tipo de palabras cursis eran más de la menor.

—Creo que nunca lo pensé. —Respondió en voz baja, después de todo una boda estaba ocurriendo frente a ellas y no quería parecer mal educada.

Miyeon rió, claro que no lo había pensado. Shuhua no era la típica chica que fantaseaba con princesas o cuentos de hadas, su vida era muy problemática como para pensar en ese tipo de cosas. —Pero si es contigo, estaría bien hacerlo. —Miyeon sonrió al final de su respuesta, Shuhua podría no ser la típica chica. Pero apenas tenía una idea en su cabeza no demoraba mucho en pensar en todos los supuestos.

—¿Y tú? —Shuhua le arrojó la piedra caliente a ella, no podías esperar confesar algo así sin querer obtener un poco de reciprocidad.

—Crecí viendo a mis papás enamorados. —Miyeon siempre estuvo agradecida de la familia que tenía, tal vez en la actualidad no estaban pasando por el mejor momento debido a la enfermedad de su madre. Pero antes de eso, Miyeon creía que su familia estaba muy cercana a la perfección. —Me encantaría tener algo como lo que tienen ellos.

Shuhua prefirió no agregar comentarios a la respuesta de su novia, lo comprendía a la perfección. Y aunque en su caso lo más cercano que tuvo a ver algo remotamente similar a la relación de los padres de Miyeon era ver a los padres de Soojin, creía que era suficiente para saber qué era exactamente lo que ella también quería.

Entonces en vez de hablar, decidió apoyar su cabeza en el hombro de su novia y seguir viendo la boda como si se tratara de una proyección en un cine. Pero en vez de preguntarse en qué terminaría el argumento decidió imaginar que la pareja frente suyo eran Miyeon y ella. Quizá hayan pasado los veinticinco años, planificando una vida juntos y compartiendo votos de amor infinito.

Cerró los ojos por un momento y suspiró deseando el amor. Deseando que la vida tuviera más para ella que lo que hasta ese momento le había dado.

Miyeon había sido su primera prueba del amor real y no podía esperar a sentir incluso más, porque realmente era adictivo.

Una vez finalizada la ceremonia todos los presentes se movieron a un salón incluso más grande donde la comida se llevó a cabo.

No tomó mucho tiempo para que algunas parejas decidieran dejar de lado la comida, y con apoyo de algunas copas de alcohol para salir a la pista de baile y ponerse un poco más divertidos de lo normal.

Viéndote con sus ojos (Miyeon&Shuhua)Where stories live. Discover now