Los hermanos Min siempre competían por todo, y ese hermoso omega pelirrojo no sería la excepción.
YoonSeok
Omegaverse
YoonGi, YoonJi alfas / Hoseok omega.
Solo minutos después de llegar a casa Yoongi se enfrentó a la primera prueba. Cómo era de esperar, Hoseok no respondió ninguna de sus llamadas en toda la noche, ignoró cada mensaje de voz y también cada mensaje de texto, pero YoonGi no se dió por vencido estuvo horas intentando comunicarse con él sin resultados.
Tampoco le sorprendió el hecho de que YoonJi no regresó en toda la noche, fue hasta temprano en la mañana que se digno a volver a casa, el alfa se dió cuanta por el ruido que hizo al cerrar la puerta de su cuarto.
YoonJi estaba en casa.
Yoongi estaba parado frente al espejo, se arreglaba para ir a la escuela y había dormido poco, por lo tanto tenía ojeras bajo los ojos, pero poco le importaba en ese momento. Lo que pensaba era; «¿Cómo debería reaccionar frente a su hermana gemela? ¿Qué hacer cuando lo único que quieres es golpearla hasta que sienta toda la impotencia que cargas en tu interior?». Esa fue la segunda prueba que enfrentó después de todo lo sucedido; no saber cómo reaccionar en su presencia, pero tampoco supo la respuesta tan pronto, pues cuando bajó a desayunar ella ya se había marchado.
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—¡Es un maldito!— Taehyung se encontraba incluso más ofendido que Hoseok, estaban en la cafetería de la escuela y varios alumnos detuvieron un momento sus conversaciones para voltear a ver curiosos al omega que no midió el volumen de su voz.
—lo es— Hoseok suspiró mientras repasaba en su mente una y otra vez todos los recuerdos que tenía del día de ayer, cada uno era hiriente y al mismo tiempo confuso.
Todas las llamadas de Yoongi, el techo de su habitación, la compañía de la alfa, la noche entera sin poder dormir, su desayuno insípido, el camino a la escuela en el auto de Yoonji, todo pasó tan desconcertantemente rápido.
—¿Cómo estás? ¿Necesitas que le dé una paliza?—el omega pelirrojo se hubiera reído, pero sabía que su amigo no bromeaba, por lo menos no del todo, así que solo negó con la cabeza.
—Estoy bien, no es necesario. Solo necesito concentrarme en otra cosa ahora— parte de él se sentía muy herido, por supuesto que sí. Pero tuvo toda la noche para llorar por eso así que la sensación que más lo dominada en ese momento era el enojo, enojo con Yoongi, con ese omega, con todos.
Con todos menos con Taehyung y con Yoonji.
—Insisto, es un alfa, pero tú sabes que peligroso que puedo llegar a ser cuando se meten con mis amigos— Tae comenzó a lanzar algunos golpes al aire, simulando tener una reñida pelea de box enmedio de la cafetería.
—Por favor, dejemos el tema de lado— suplicó Hoseok.
Tal vez luego hablaría con el alfa para decirle un par de verdades, para desahogarse como es debido y escupirle la cantidad de insultos que se merecía, pero en ese instante no quería verlo ni en pintura así que estaba desesperado por dejar de hablar de él.
