Capítulo 5

4.7K 318 60
                                    

Rachel

Luisa estaba caminando de un lado a otro en el aeropuerto, yo la miraba caminar tratando de distraerme de sus fantasías paranoicas.

― ¿Y si el avión se estrelló? ― Volvió a preguntar en voz alta.

―Solo han pasado veinte minutos. 

―Un avión se puede estrellar en menos de cinco minutos. 

―El avión no se estrelló. 

― ¿Cómo lo sabes? ¿Venias con Harry? 

―Que sepas desde ya que nunca veré mis problemas psicológicos contigo. Saldría con más. ― Me puse de pie mirando la puerta de desembarco.

Lo logró, me puso nerviosa, era casi imposible que se hubiera estrellado el avión; pero Luisa tenía que ser la que implantará la semilla de la duda.

Harry: Estoy bajando.

―Luisa, deja de moverte. Dice que llegó. ―Sujeté el brazo de Luisa para que dejará de moverse.

Solo suspiró, de verdad; ella quería estudiar psicología y lo más probable era que les terminara contando problemas propios a sus pacientes.

Nos pusimos frente a la puerta de desembarco y esperamos hasta que vimos a Harry con una sonrisa cansada, pero amplia.

Iba a saltar sobre él, pero tuvo que buscar sus cosas junto a los otros pasajeros. Estaba rebotando en las puntas de mis pies mientras lo miraba hablar con personal del aeropuerto, mientras que Luisa intentaba arrancarme el brazo de los tirones que me daba.

Harry avanzó hacia nosotras con bolso en mano y una maleta arrastrándose, pero cuando estaba a unos pasos soltó lo que tenía y nos abrió los brazos.

No lo pensé dos veces antes de correr hacia él, casi tumbándolo en el proceso. Luisa choco contra mi espalda, pero solo pude oler el olor de detergente que desprendía la camiseta de mi hermano, lo había extrañado demasiado.

―Bienvenido. ―Me había alejado y solo lo miraba con una sonrisa.

―Que puto dolor es viajar en avión. ―Se quejó mientras rodeaba a Luisa con sus brazos.

Solo me reí y tomé su bolso y maleta para llevarlos al auto.

―Rachel, puedo llevarlo yo. ―Intentó quitarme la maleta, pero fui más rápida y avance hacia la salida.

―Lo sé, pero estas cansado. Además de que Luisa me dijo que habías muerto en un accidente de avión, así que déjame hacer esto por ti. 

― ¿Qué? ―Harry miro a Luisa que caminaba a su lado con una sonrisa avergonzada.

―Solo tardé media hora más. ―La miro como si le hubiera surgido una segunda cabeza.

―Un avión puede estrellarse en menos de cinco minutos. ―Imité lo que Luisa había dicho antes.

―Puede pasar. ―Se defendió Luisa.

―Puede, pero no lo digas cuando es nuestro amigo quien viaja en avión. 

Cuando llegamos, metí las maletas al portaequipaje y me senté en el asiento del copiloto, Harry se sentó atrás y Luisa iba de chófer.

―Entonces, ¿alguna novedad? ¿Luisa ya reprobó algo? ―Harry se inclinó en medio de los asientos mirándonos.

―Sorprendentemente le va mejor que en Estados Unidos. ―Le dije, era cierto y bastante sorprendente considerando lo distraída que era.

―El problema no era yo. ―Hablo con orgullo.

FANFIC PECADOS PLACENTEROSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora