Love Playlist for Kihyun - Changki.

Treinta y cinco.

Era casi mediodía. Kihyun no había recibido noticias ni de Changkyun, ni de Minhyuk ni de su madre.

Changkyun nunca abrió su mensaje, mismo caso que su madre; mientras que Minhyuk lo había dejado como leído. Algo empezaba a saberle muy mal y no le gustaba la sensación en lo más mínimo.

Como última alternativa, optó por llamar a Sunmi. Su madre le había obligado a guardar el número telefónico de algunos de sus compañeros, en caso de alguna emergencia. Kihyun supuso que esa era una situación calificada como urgente.

- ¡Kihyun! - el siempre amigable tono de voz de la enfermera llegó a su oído no mucho tiempo de espera después. - Qué sorpresa, ¿Está todo bien?

-Noona, hola. Perdón por molestarla... - Kihyun rió con algo de timidez, tomándose unos pocos segundos para formular una pregunta medianamente discreta a la mujer. - Estoy intentando comunicarme con mi mamá, pero no atiende el teléfono así que, uhm... ¿Quería saber si estaba todo bien? - Kihyun masticó la yema de su dedo con impaciencia, expectante a la respuesta que fuera a recibir a continuación.

-Oh, es verdad; tu madre tuvo que venir de emergencia anoche. - comentó ella, empleando un tono más sereno que el usado en su saludo. - Llegó uno de sus pacientes en un estado algo delicado y necesitábamos su ayuda aquí. No te preocupes, cielo, le contaré que preguntaste por ella y que te devuelva el llamado.

- ¡Oh! No, no, no, está bien. - ataja el chico, arrugando en su mano libre la esquina del cuaderno abierto sobre su escritorio. - Gracias igual. Otra cosa... De casualidad el paciente en cuestión... ¿Se llama Im Changkyun...?

-Él mismo. - Kihyun frunció los labios y bajó la cabeza al escuchar sus palabras. - ¿Seguro no quieres que le envíe un mensaje a tu madre?

-No hace falta; gracias, Noona. Yo... debo irme. ¡Nos vemos!

Ahora, el contexto de la situación respondía sus preguntas. El ciclo se repetía una vez más y que no les sea sorpresa que Kihyun esté preparándose para salir rumbo a ese hospital una vez más.

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-Sigo pensando que lo mejor es que estés en casa... - Daehyun entregó a su hijo mayor una mochila. A petición del joven, su padre le había llevado hasta el hospital algunas cosas que fuera a necesitar mientras esté pendiente de su hermano; primero que nada, un cargador de celular, ya que llevaba cerca de diez horas sin batería; su billetera, auriculares, un abrigo y demás objetos personales. - Debes descansar para estar bien para tu hermano.

De todas maneras, Minhyuk hizo caso omiso a las sugerencias de su superior. Ni loco se iría de ese edificio a sabiendas de que Changkyun llevaba horas intubado en una sala de cuidados intensivos, privado de toda compañía y contacto social fuera de sus médicos o enfermeros.

El peso de la noticia había caído sobre él como un baldazo de agua fría, desplomando toda la felicidad y emoción que había sentido a lo largo de su día.

Changkyun, su pequeño hermano peleaba por mantenerse con vida, sumido en un profundo estado de inconciencia hasta que su cuerpo decidiera reaccionar otra vez. Le lastimaba pensar en cómo se encontraría, y de odiaba con todas sus fuerzas por no poder hacer nada al respecto.

Por más que sus padres hubieran hablado con él, no podía evitar pensar que de verdad hubiera podido evitar el episodio desafortunado si tan sólo se hubiera quedado esa noche en casa. Quizá si hubiera notado la incomodidad del chico o si aunque sea hubiera hecho un esfuerzo mayor en escuchar lo que le decía en esa puta llamada, nada hubiera sucedido.

Pero no fue así.

Fue a esa fiesta. Pensó sólo en él y fue a esa tonta fiesta, como si no hubiera podido asistir a un millón más durante sus vacaciones. Dejó a Changkyun sufriendo solo y se fue.