Lost On You|| Bucky Barnes|| Primera Parte

-14- Un Padre No Muy Padre

El ambiente había reinado con un silencio bastante incómodo, él se acercó a Pepper y la abrazó de la cintura y dio un beso en su mejilla

¡¿Qué mierda?!, ella dijo que no eran nada.

—Cariño, ¿Quién es ella?, no sabía que teníamos visitas.– te miró y después a Pepper tratando de saber que pasaba.

—Tony, ya te lo había comentado antes, ella es Hailey, su tío Hesh nos llamó hace unos días. –trató de hablar bajo para que no lo escuchará pero fue inútil era tal el silencio que pude escuchar toda su conversación.

—Bien, pero, lo que no entiendo es, ¿Qué hace aquí?. – te dió la espalda para poder hablar con ella en privado.

—Tú dijiste que me ocupará de este asunto así que yo tomé la decisión por ambos, no podemos dejarle solo, no tiene a nadie y corría peligro allá afuera.

—Cariño. – puso ambas manos en los hombros de la mujer, tomó una bocanada de aire y habló. – recuerda de lo que hablamos, aún no teníamos planeado tener niños aquí.

—No es un niño, es tu sangre y necesita de ti.

—Sí pero, esto no será fácil.

Estaba empezando a molestarte, se supone que él te había aceptado sin ningún problema, pero resulta que la Pepper fue la única interesada por tí,  además, no podrías ser un estorbo para él, se la pasa en viajes y en fiestas, así ha sido toda su vida.

—Oigan, en si verdad no me quieren aquí puedo ir me y llamar a Hesh, solo saldría por ahí y ya. Ya que son pareja me imagino que querrán estar solos, sin ninguna interrupción por en medio.

—¡Eso es una-!.

Fue golpeado por el codo de la rubia haciendo que se quedara a mitad de la frase.

—¡Mala idea!. Cariño, mira, lamento no decirte antes que era la esposa de Tony, yo no quería  que–.

—¡¿Eres su esposa?!.

—Corrección, futura esposa.–corrije el mayor mientras recibía una mirada molesta de la rubia.

Cada vez las cosas empezaban a ponerse peor, al final la historia de tu madre era verdadera, tu padre la abandonó por otras mujeres y su estúpida empresa, ella tuvo que ir para poder criarte sola al lado de Logan.

Sientes  un nudo en la garganta y un peso en el pecho, la respiración cada vez era más agitada y te costaba trabajo tomar oxígeno. Pepper se acercó a mí preocupada,  por instinto te alejas de ella, no querías nada de ellos, sales corriendo de ahí hacia el ascensor, tocas el botón del primer piso.

—¡Hailey espera!.

Ella trató de detenerte pero las puertas del elevador se cerraron antes de que pudiera hacer algo. Retrocedes hasta chocar con la pared del elevador, te dejas caer despacio hasta sentarte en el suelo, el elevador tardaría en bajar así que podrías tomar un pequeño descanso.

Después de un rato las puertas se abrieron y sales corriendo fuera de aquel edificio, por un momento creías que tu "padre" podría llevarse bien, corres varias cuadras hasta dar con un callejón sin salida, allí te ocultas por un buen rato,  para distraerte miras el teléfono y revisaste las redes sociales, dos números desconocidos te habían marcado en todo este rato, se debía tratar de ellos dos.

Lo guardas y sueltas un gran suspiro, habías llorado por un buen rato, pensando en que ahora mismo preferías haber aceptado la oferta de Fury, justo en estos momentos estarías con Hesh sin ningún problema.

Escuchas unos pasos para acercarse hacia tí, miras a la persona y era una mujer.

—¿Natasha?.

—Hola, te he estado buscando, me dijeron que te habías escapado.

—Ah, no quiero saber nada del estúpido de mi padre.– abracé mis piernas, no dejarías que  ella me convenciera de volver con ellos.

—Bien, no insistiré, solo espero que mi compañía no te moleste.– caminó hasta llegar a un lado tuyo y se sentó a mi derecha.

Ninguna decía nada, quizás el ambiente empezaba a ponerse incómodo y decidiste hacerle platica.

—Nat, creí que estaría bien conocer a mi padre biológico pero, resultó peor de lo que podría salir.– ocultas tu rostro con tus brazos y piernas, ella solo te miraba con una mirada serena.

—Bueno, no se me da muy bien dar ánimos a los demás, pero sé que te puede servir, conozco una heladería muy buena cerca de aquí, ¿Qué dices si vamos?.

—¿No es ninguna trampa?.

—No lo es, te lo prometo, pero a cambio quiero que quites esa mirada triste.

Sonríes levemente, ambas se  levantaron y caminaron dos cuadras hasta llegar a la heladería que ella te había mencionado.

Piden los helados y toman asiento, ella comía su helado de fresa y tú de chocolate, veían a las palomas que estaban cerca y como algunas peleaban por una pieza de pan, no puedes evitar reír un  poco por ello.

—Oye. – Natasha te llamó y la miras, parecía que quería decirte algo.– sé que no quieres hablar de ello, pero, ¿Fue muy malo la primera impresión?.

—Pues, a como lo imaginaba sí, incluso peor de lo que pude imaginar. Puedo decir que mi padre Logan ha sido mejor en todos los ámbitos que, Tony.– bajé la mirada, esto me ponía muy mal.

—Oh, entonces, ¿Qué piensas hacer?.

No lo habías pensado, sólo actuaste por el momento, quizás podrías llamar a Sam, no, él estaría ocupado con Steve investigando sobre el paradero de Bucky, Hesh estaba en Europa, no podría llamarlo para que viniera a recoger a su sobrino llorón.

Recuestas tu frente contra el de la mesa, no lo habías pensado antes.

—Me lo imaginé, mira, podemos hacer esto, estaré unos meses por aquí cerca en lo que busco una nueva identidad, podríamos salir a dar unos paseos debés en cuando, quizás hasta podría enseñarte defensa personal, pero necesito que me digas lo que harás.

Levantas el rostro de la mesa, su mirada ahora era seria y preocupada, suspiras, no podrías creer lo que diría.

—Me quedaré con Tony, ¿Feliz?.

Sonrió al escuchar tu respuesta, ambos se levantaron de la mesa y fueron de regreso a su nuevo hogar.

Allí te esperaba Pepper, lucia bastante preocupada y cuando te miró no dudó en acercarse a tí y abrazarte. No sabías si aceptar el abrazo pues aún te dolía lo que había pasado antes. Agradeció a Natasha por encontrarte y entraron al gran edificio, la pelirroja se despidió de tí no sin antes darme un papelito, lo verías después, ahora debía afrontar lo que me esperaba.

«...»

Eran las siete de la tarde y comenzaba a anochecer, te encontraba en tu nueva  habitación, no habías salido de allí después de que había regresado a casa.

Tony no se encontraba así que estaba bien así, no querías ver al imbécil de mi padre, estabas recostado en la gran cama que tenías mientras revisaste el teléfono, al momento recuerdas el papelito que Nat te había dado lo lees y era un número celular. No puedes evitar sonreír, registras el número y le mandas un mensaje.

Al instante ella te contestó, así me la pasaste una hora hablando con ella y haciendo planes para mañana,  quería mostrarte la ciudad y te dijo había hablado con Pepper para que pudieran dejarme ir con ella , por suerte accedió a la petición de Nat.

Al terminar de hacer planes Nat me dijo que empezaría a trabajar así que tuviste que dejar la conversación hasta ahí, estos días serían bastantes difíciles, pero harías lo mejor para poder adaptarte.