Between angels and demons// Heehoon/Sungseung

16

― ¡AHHHH! ― Gritó Sunghoon cayéndose de la cama

― Buenos días, mi principe. ¿Dormiste bien?―  Preguntó la Princesa con una gran sonrisa―

― ¿Cuánto tiempo llevas ahí? ¿Qué has estado haciendo? ― Preguntó  furioso―

― Oh, sólo unas horas, mirándote, sintiendo tus músculos fuertes ... Estás tan bien formado―  dijo la Princesa restándole importancia―

― ¡¿Tú-me estabas acariciando mientras dormía ?! ¿Qué le pasa señora? ¿Y dónde está Heeseung?

―¿Oh, él? Lo atrapamos en un lugar donde no nos moleste― dijo la Princesa sonriendo―

 Sunghoon la agarróde la parte superior de su vestido y la atrajo hasta que estuvieron cara a cara. Sus ojos eran fríos como el acero.

― ¿Dónde.... Está.... ÉL?― Preguntó  de forma lenta y haciendo notar su enojo ―

― No lo encontrarás. Está en el palacio ― hablo la Princesa con miedo―

  Sunghoon la soltó y salio dd aquella habitación. Emprendió la busqueda de su angel, recorriendo todo el palacio hasta llegar a un pasillo algo oscuro  en donde pudo escuchar la voz de su angel. Se adentro a el pasillo y lo encontró  atrapado en una habitación enorme.

― ¡Sunghoon! ¡Ahí estás!― Gritó Heeseung. De alguna manera, él podía verlo.

― ¡¿Heeseung?! ¿Cómo puedes verme?

― ¡¿CREES QUE ESO ES IMPORTANTE AHORA?! ¡Escucha, esta habitación es a prueba de magia! Tienes que encontrar una manera de abrirla― 

― ¿Romperlo? Oh, eso no será un problema. Total si es solo vidrio sera facil  ― Dijo Sunghoon con arrogancia―

  El principe hizo un gran agujero en el cristal y todo el cristal se rompió en su mano.  Sunghoon miró fijamente su mano cortada. Tendría que preocuparse por eso más tarde.  Saltó adentro y tomó en brazos a Heeseung.

― ¡Sunghoon! ¡Tu mano! ― Gritó Heeseung preocupado―

― Está bien ― dijo Sunghoon restándole importancia―

― Lo curaremos lo antes posible

― Entonces, ¿estamos a mano ahora? ― Comentó Sunghoon ―

― Oh, cállate ― bromeó Heeseung tratando de normalizar su respiración―

 Heeseung y Sunghoon volaron directamente fuera del palacio y apartaron a cada doncella a un lado.  En cuestión de horas, habían llegado al final de aquel gran camino.  Sunghoon parecía listo para desmayarse.  Heeseung lo acosto en una esquina de el camino, el angel estaba comenzando a hiperventilarse.  Luego, rápidamente se calmó.

―  ... te voy a sanar, quedare algo debin luego pero estare bien ― Puso sus manos en el área del corazón de Sunghoon  y  pronto Sunghoon  despertó.

El corte se había curado, pero la mano de Sunghoon todavía estaba manchada de sangre seca.  Heeseung  abrazó a Hoon con fuerza. 

― ¿Qué pasó? Todo lo que recuerdo es que estábamos volando, estábamos tan cerca ... y luego todo se quedó en blanco―  dijo Sunghoon confundido.  Heeseung le explicó todo.

― Bueno, vamos entonces― dijo Sunghoon levantandose―

― ¡Pero acabas de sanar!

― Está bien. Estoy bien ― dijo y extendió la mano, se aferró con fuerza a Heeseung mientras alcanzaban el gran palacio cercano―