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Advertencia: Masoquismo y Violación.
Había transcurrido seis meses desde que Sayuri había finalizado su relación con Geto Suguru y en ese tiempo la de cabellos plateados se había concentrado en sus estudios universitarios, aunque a la misma vez había investigado sobre la desaparición de su antigua pareja, ya que desde que ella había decidido terminar aquella relación que mantenía con el pelinegro no había sabido nada sobre el.
Sayuri admitía y aceptaba que extrañaba al pelinegro pero a la vez lo consideraba algo tonto, ella trataba de alejar a Geto de sus pensamientos pero no lo lograba, estaba preocupada por el estado del pelinegro después de todo su ex novio era conocido normalmente por sus peleas y travesuras, en pocas palabras era alguien bastante peligroso.
—Sayuri ¿Quieres venir con nosotros a la discoteca esta noche?
—Quizás en otra ocasión, Utahime.
—Siempre dices lo mismo y nunca sales con nosotras.
—Por favor, sal con nosotras y los chicos. Te vas a divertir y te relajaras un poco de los trabajos.
—Esta bien, Shoko.
—Te enviare la dirección del lugar.
La de cabellos plateados asintió y salió del aula para asistir a su otra clase, una pequeña sonrisa apareció en su rostro al pensar que esa noche quizás podría divertirse y que podría olvidarse por un momento del pelinegro que rondaba en sus pensamientos.
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Una falda de tubo de cuero negro que apenas le llegaba a la mitad de los muslos, acompañados con un croptop rojo con escote y unos botines negros, es el conjunto que eligió Sayuri para esa noche. La de cabellos plateados estaba terminando de arreglarse cuando escucho el sonido de unos golpes tocando su puerta y al abrirla se encontró con Choso.
—¿Ya estas lista?
La de cabellos plateados asintió y salió con Choso del edificio, habían quedado que el pelinegro la fuera a recoger ya que el auto de la femenina se encontraba en el taller siendo reparado, después de un par de unos minutos habían llegado a la discoteca que estaba a rebosar de personas.
