Capitulo 1

2K 214 75
                                    

Cuando Reki era un pequeño y un inocente niño, pensaba en que haría muchas cosas, pero cuando creció todo se fue en la basura.

Primero su padre murió dejándoles una enorme deuda a pagar y ahora Reki es despedido de su trabajo, lo único que lograba sostener un poco a su familia, el único trabajo en el que lo aceptaron aún sabiendo de su género, pero ahora que firmarían contrato con otra empresa debían deshacerse del "error" de la compañía.

A ellos no les importo cuanto rogó para que no lo despidieran o sus problemas. No quieren un obstáculo.

Por si eso no fuera poco ahora mismo estaba siendo golpeado por los cobradores, la suave piel y blanca (bronceada) del omega ahora está llena de moretones.

Los golpes son acompañados por gritos de dolor, nadie se molesta en entrar al callejón y ayudar al omega, solo pasan de largo sin importarles la situación.

Un hombre está viéndolos a lo lejos, esperando el momento perfecto para acercarse al pelirrojo.

— ¡Entendiste bien! — El hombre sostiene con gran fuerza el cabello del chico — ¡Si no pagas el próximo mes te atacare!

Ellos dejaron de golpearlo.
Reki asiente con la cabeza, intenta tocar la mano del hombre pero fue apartado de un manotazo.

Uno de ellos saco un papel y una pluma, los acerco ha Reki.

El pelirrojo apenas y podía ver bien, las lágrimas obstruyen su vista, pasa la manga de su suéter en su rostro. Respira con un poco de dificultad.

— ¿Q-qué es esto?

— Es un contrato, dice que si no pagas entraras en un burdel — Un escalofrío recorre el cuerpo de chico — a tu voluntad ¿Entendiste? O sería mejor viola...

— Aunque es lo mismo — Habla otro de sus secuaces, ellos comenzaron a reírse — Si no fueras un omega ya estarías muerto

Reki muerde su labio, de nuevo jala su cabello hacia arriba. De todos modos Reki no tiene opciones, firmó aquel contrato, él lo soltó.

Ya agustos con lo que hicieron decidieron irse y junto con ellos se fue la última paga del chico.

Reki se da la vuelta, se abraza a sí mismo, su cuerpo le duele. Había prometido llevar el almuerzo a casa, pero sus planes fueron interrumpidos. Cuánto le rompía el corazón el solo hecho de imaginar que sus adoradas hermanas no comieran, aún son unas niñas.

Reki se levantó con un poco de dificultad, definitivamente no quería acabar en un burdel, odia el solo hecho de imaginar que cualquier hombre lo toque cada noche.

— La has pasado bastante mal — Reki dio un salto, abrazo su estómago al sentir un punzón — Nacer como un omega es bastante malo en este tiempo

Reki vio al hombre, lleva una mascarilla y una especie de peluca color morada.

— Y-yo no tengo dinero — El hombre levanta su maletin. El chico asustando retrocede.

— Lo se, no tienes nada — Reki quedó perplejo al escucharlo — Te propongo un juego, si me ganas te pagaré mil llenes

— Por favor no juegue conmigo — Reki estaba a punto de llorar, en verdad necesita el dinero, no comer por unos días ya le está haciendo efecto, un nudo se forma en su garganta.

— No estoy jugando — El hombre abre su maletín — ¿Qué color quieres? Si yo ganó me pagarás

Reki se estaba arriesgando, pero si es cierto lo intentará.

— Y-yo lo haré... — Reki conoce muy bien el juego.

— Que color quieres... — Con la mano temblorosa Reki apunta al color rojo.

Reki perdió en la primera ronda, sintió que moriría.

— Y-yo no tengo dinero — Reki estaba a punto de salir corriendo, pero la bofetada lo dejo pensando varios segundos.

— Este es mi pago — Si no es dinero entonces no es tan malo como piensa — ¿Quieres seguir?

Reki acepto, lo hicieron varios veces y Reki al final ganó algunas rondas. El estaba tan feliz, por poco y olvidaba que lo golpearon hace poco.

— Oye — Reki sostuvo el dinero — Si quieres ganar más dinero de esta forma entonces llámame

El hombre le entrego una tarjeta, si solo son bofetadas Reki podría aguantar, sus deudas no se pagarán solas.

— ¡Por supuesto que acepto! — El hombre quedo confundido, ningún participante lo había aceptado a la primera. Él saco un pañuelo y se lo dio a Reki.

— A la media noche pasarán a recogerte y la contraseña será, luz roja, luz verde ¿Entendido? — Sin ninguna intención Reki había logrado captar el interés de ese sujeto — Un placer conocerte Reki

— ¿Qué? — de nuevo un escalofrío recorre su cuepo. Después de todo era mejor ser golpeado a que lo usarán cada día y noche.

Además arriesgarse un poco nunca ha sido tan malo ¿O si? Después de todo solo le darían bofetadas...



Nota: Cuando Reki dice que no a comido es porque el prefiere a que su mamá y sus hermanas coman, y él les miente diciéndoles que ya comió.

El juego del calamar versión Sk8Where stories live. Discover now