Capitulo 11

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Nota: Reki está en graves problemas :)


El pánico invadió su cuerpo, no sabía que había hecho mal. El guardia parecía bastante molesto, más no recordaba que hiciera algo que lo molestará.

Reki se abrazo a si mismo, se había ofrecido a vigilar mientras los demás dormían. Si tan solo pudiera hablar con los guardias, pero no está seguro de que lo dejen.

— ¿Pasa algo? — el anciano se sentó al lado de él, al escuchar su voz Reki dió un pequeño salto del susto.

— Oh no es nada — Trato de sonar lo más tranquilo posible — Solo pensaba en mi familia — No mentía del todo, si le preocupa su familia y más ahora que no tiene ninguna pista.

El anciano mostró un cierto interés por saber más sobre eso.

— ¿Y qué es lo que te preocupa?

Reki abrazo sus piernas, cerro sus ojos, dió un pequeño suspiro. Le preocupa todo, ni siquiera sabe si su familia se encuentra bien.

— Yo solo quiero saber lo que hacen — y no mentía, en verdad desea verlas — Quiero saber si mamá toma sus medicinas o si mis hermanas están portandose bien...

Reki sonrió de forma inconsciente al recordar las bromas que sus hermanas le hacían, siempre fueron chicas muy energéticas, al igual que él. Recordó las mañanas que era despertado por ellas, cada día le hacían cosquillas con una pluma. Y aunque Reki ni siquiera sentía las cosquillas fingía morirse de la risa.

— Eres un buen chico — Reki borro sus sonrisa.

Miro al anciano.

— No lo soy, les mentí — la culpa comenzó a invadir a Reki. Si él moría si familia ni siquiera lo sabría, ellas solo esperarían su llegada, volvió a abrir los ojos— Y-yo —La voz de Reki se rompió — E-ellas piensan que estoy en mi "nuevo trabajo" soy un mentiroso— No pudo evitar que las lágrimas comenzarán a bajar de sus ojos.

El anciano no parecía reaccionar, solo se quedó viendo a la nada.

— Mentiste por su bien, no eres tan malo, aveces las mentiras son buenas — su mirada de perdió en algún punto.

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Las luces se encendieron y de inmediato un grupo de guardias entraron, todos se pudieron en alerta. Reki vio hacia atrás, su rostro se puso pálido al ver a un hombre colgado de las camas, además de eso noto algo extraño.

Dibujos de niños en la pared.

Los guardias les ordenaron a todos levantarse, ni siquiera les dieron tiempo se hacer otra cosa.

Un nuevo juego. Reki sintió como si estuviera a punto de morir, ese alfa fue un tramposo, ni siquiera le dió las pistas y lo dejo tirado en la cama.

Kazu agarro la mano de su amigo. Fueron llevados a un cuarto grande. Les dieron la orden de formar equipos de dos.

— Kazu... — Reki levantó su mano en dirección a su amigo, su pecho comenzó a dolerle al ver que ni siquiera lo noto y que escogió a otro compañero. ¿Cómo debería sentirse? No lo sabía.

Kazu busco a alguien fuerte para hacer pareja, Reki es un Omega así que es débil.

— Lo siento — Murmuró, el pelirrojo solo le sonrió, se quedó parado en su lugar. Solo le quedaba buscar un compañero.

Uno debe salir del juego... Y parece que todos ya tienen un equipo, incluso el anciano.

Los guardias se acercaron a Reki, no sabía cómo sentirse, el pánico llegó a él. Aguanto las ganas de soltarse a llorar ahí mismo. Miro a su amigo, los guardias lo tomaron del brazo.

— Dile a mi mamá y hermanas que las amo mucho — Ese era su único deseo — Por favor...

Su amigo lo vio con lastima, los guardias sacaron a Reki del lugar. Reki suspiro profundamente, ellos no se detenían, pensó que habían llegado al lugar de su juicio. Se disculpo mentalmente por su mamá varias veces.

Cerro los ojos cuando llegaron al cuarto, espero que le dispararán. Pero el ruido nunca llegó.

— ¿Asustado? — La voz del alfa lo puso en alerta, dió la vuelta al ver al guardia "Snow" sentado — Tranquilo no morirás... Aún

Reki se estremeció en su lugar.

— Mentiroso... — Las lágrimas comenzaron a bajar de sus ojos, enserio había pensado que moriría está vez. El alfa se levantó de su lugar.

Se acercó a pasos lentos y silenciosos al Omega.

— No te di ninguna pista porque no lo necesitabas, necesito que te limpies y me sigas

Snow comenzó a caminar, sus pisadas son las únicas que se escuchan.

— No... — no quiero — Reki dió la vuelta, fue a sentarse — Me quedaré aquí y esperaré a los demás — levantó la frente en algo y miro fijamente al alfa.

Está decidido a no seguirlo esta vez.

— ¿Piensas romper el trato? — El guardia se acercó hacia Reki. El Omega no se atrevió a moverse incluso cuando el alfa lo sostuvo de los hombros — Está es tu oportunidad de salir de aquí

Reki se quedó en Shock, el hombre frente a él estaba ofreciéndole escapar.

— ¿Qué? — un pequeño escalofrío recorrió su espalda — No puedo, necesito el di...

— No es un problema para mí — El guardia agarró sus mejillas — Solo necesitas quedarte a mi lado después de sacarte de aquí

— ¿Y tú qué ganas con eso?

¿En qué le beneficiaba su existencia al otro?

— Tu cuerpo — escuchar eso no le gustó ni un poco a Reki. Es cierto que ahora lo usa para tener ventajas, pero hacerlo por siempre es diferente — ¿Entonces que eliges?

En este momento Reki tiene dos opciones, la primer es continuar con el juego y tal vez morir en el o ganar o puede escoger la segunda opción, escapar con Snow darle su cuerpo por siempre.

Pero si aceptaba irse entonces tendría que darle su cuerpo, justo lo que a tratado de evitar toda su vida.

— ¿Y mi familia? ¿Qué pasará con ellos? — sus manos habían comenzado a sudar.

Snow acarició sus mejillas.

— No te preocupes por eso, les daré dinero y nunca tendrás que verlas — Reki abrió su boca.

Si aceptaba nunca vería a su preciada familia, ellas estarían bien pero nunca lo volverían a ver.

En cambio si continuaba y perdía tampoco se verían... Pero si ganaba podría volver a casa, estar con ellas de nuevo y vivirían tranquilos.

¿Qué debería de escoger?

— Y-yo...

El juego del calamar versión Sk8Where stories live. Discover now