▫️ Capitulo siete ▫️

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Magnolia x790

— Hoy se cumple un año, maestro — mencionó la albina tras la barra.

— Si — el maestro permanecía sentado en la barra como de costumbre, dándole la espalda a la albina y mirando hacia al frente.

Todo en Fairy Tail parecía igual, las persona hacían misiones, comían en la barra, pedían cervezas, y algunas peleas que se calmaban rápido aprecian. Salvo que faltaban ciertas personas para el gremio número uno de Fiore.

— Si yo no... — comenzó a hablar el maestro pero Mirajane no lo dejo continuar.

— Hace tres meses fue su funeral, maestro, ya no podemos hacer nada por ellos — la albina se tragó sus lágrimas, mostrándose fuerte.

— Maestro, ¡estamos hablando del equipo de Natsu! ¡Ellos no están muertos! Ellos... — los gritos de Lisanna se volvieron susurros en solo segundos — Ellos volverán, tengo fe de que lo harán. ¡Ellos volverán igual que yo volví! — mirándolos a ambos, no encontró ni una placa de esperanza en sus ojos — ¡Natsu, Lucy, Erza, Gray y Wendy son fuertes! ¡Porque creo que mis amigos! — gritó la albina con la voz entrecortada.

El gremio lloraba, lloraba la pérdida de sus amigos y por la desesperación de no encontrarlos.

Después de tres meses que habían desaparecido, decidieron ir a buscarlos. Pero no tuvieron éxito al encontrarlos.

— Lisanna, déjalo ya. Ha pasado un año. Deja que la herida cierre de una buena vez. — contestó de mala manera Cana, quien repetía lo mismo constantemente en esos tres meses.

— ¡Ellos jamás se rendiría si se tratara de uno de nosotros! ¡Porque no logran entenderlo! — cada vez había más cabezas agachadas en el gremio.

— ¡ELLOS YA NO ESTÁN AQUÍ! ¡DEJA DESCANZAR EL DOLOR UNA VEZ LISANNA! — grito esta vez furiosa la bebedora del gremio.

Ella entendía lo que era perder a alguien, y perder a sus amigos, a quienes conocía desde la niñez, le dolía más que a nadie.

— Cana... Lo siento.

— Déjame sola, ¿quieres? — Levantándose de su lugar apartó a la albina de manera brusca, escapando lo más lejos del gremio.

Todos sentían el peso en su corazón. Todos sentían el dolor de ese día. Nadie quería creer que ellos habían muerto, no querían olvidar a sus amigos.

Pero era imposible pensar que seguían vivos después de un año perdidos en el océano.

No era igual que con la isla Tenrouhima, está vez no habría un acto milagroso que los podría salvar.

— ¡LOS ENCONTRE! — el maestro Makarov abrió sus ojos al ver quien había entrado de esa manera al gremio. Mavis.

— Primera — iba a comenzar a hablar pero ella se acerco deprisa para enseñarle el objeto que tenía en sus manos.

— Ellos siguen ahí — una luz ilumino al gremio de las hadas, dándoles una esperanza de encontrar a sus compañeros y amigos — Este objeto mágico es único. Viaje por muchos lugares para encontrarlo. Esto puede rastrear la magia de cada mago con algo que les permanecía. Sin consultar he tomado una de las cosas de Lucy que tenía en su viejo departamento y a funcionado. Los chicos siguen con vida.

— Como... — el maestro se sorprendió de ver la luz brillante marcando la vida de Lucy en ella. Mostrando que estaba viva.

— ¡Siguen con vida! — grito alguien al fondo.

— ¡Los traeremos de vuelta! — Grito alguien más al otro lado.

— ¡Estarán de regreso pronto! — comenzaron a gritar.

Fairy Tail estaba dispuesto a traer a sus amigos de regreso y para eso, necesitaban algo mas que magia. Necesitaban a alguien que podia controlar el espacio.

Una vieja amiga, Minerva.

Sabertooth x790

Despues de que Sting, Rogue y Yukino se fueran de misión. La encargada actual de Sabertooth era Minerva. Quien había regresado después de la invasión de Tártaros.

Sabertooth a diferencia de Fairy Tail no les había hecho un funeral a sus compañeros. Ellos seguían esperando a que ellos cruzaran por esa puerta con una sonrisa en el rostro. Como siempre lo hacían después de terminar una misión.

Algo ese día, le inquietaba. Fairy Tail. Ella no odiaba a Fairy Tail. Estaba agradecida con ellos por lo que habían hecho por ella después de Tártaros. Ahora era mas gentil y sabia apreciar las cosas con más intensidad.

Fairy Tail le había enseñado la luz y el cariño que su padre jamás le dio.

Al igual que sus pensamientos, varios miembros del gremio de magos de Fairy Tail interrumpieron la morada de Sabertooth llenando de sorpresa a los integrantes del gremio.

— Somos del gremio de Fairy Tail. Estamos buscando a su maestra, Minerva Orland. — Hablo el maestro del gremio número uno de Fiore — Díganle, que los hemos encontrado.

La respiración de algunos miembros se cortaba y algunos otros solo abrían demaciado los ojos, y por otra parte gritaban de alegría.

— ¡Maestra Minerva! — interrumpió un muchacho de cabello negro y ojos azules intensos que sostenía la emoción.

— Les he dicho que solo me digan Minerva o Lady, no necesitas llamarme... – dejando de tomarle importancia, preguntó: — ¿Qué sucede?

— Lady, Fairy Tail a encontrado a... — sin darle la oportunidad de terminar salió de su oficina para ir a la planta principal.

— ¡Makarov! dime, que está sucediendo — llegando a la entrada del gremio, miró al hombre de tercera edad.

— Necesitamos tu ayuda, Minerva.. lo que pasa es que al parecer ellos no están en esta dimensión.

— ¿De que diablos estas hablando, Makarov? — esta frunció el ceño arrugando suavemente su rostro.

— Fairy Tail tiene sus barcos listos para partir. Necesitamos irnos y en el camino te contaremos con más detalle. Pero necesitamos saber una cosa, ¿estás lista para lo que sea? — este preguntó viendo a los ojos a la maga de dimensiones.

— Si — relajo el ceño y sonrío — Chicos, los traeré de vuelta — volteó a ver al grupo de magos atrás de ella — Cuiden del gremio. Bolten, quedas a cargo de que este lugar no se vaya cuesta abajo. Regresare con ellos. Lo prometo. — esta salió del gremio levantando su mano en forma de adiós mientras su gremio la miraba partir.

Los gremios de todas partes, festejaban al recibir la notica de que sus amigos, estaban por regresar.

*

Bien, me gusta que voten, me sonrojan chicos... mi primera historia esta por buen camino y me gusta que les guste. Muchas gracias por leerla, me hacen llorar.

Hasta la próxima y espero que les haya gustado el capítulo.

Las ama,
Yusa-rin «3

Difícilmente te dire adiós » end » naluWhere stories live. Discover now