ATTE: MYG [Min Yoongi]

1. Agust

MYG

¿Es normal despertar antes de que suene la alarma? Porque eso me ocurría, todos los días.

Me levanté de cama sin querer hacerlo, habían pasado tal vez dos horas desde que recién me había acostado, y obviamente tenía mucho sueño aún.

Generalmente dormía más, pero está semana he estado tan ocupado que ni siquiera he tenido una comida decente.

Me dí una larga ducha antes de salir de casa y entrar al elevador, atrayendo las miradas de varias personas en este. ¿Supongo que es por mi nuevo look?

Entré a mi carro, intentando acomodar mi cabello naranja pasando mi mano de adelante hacia atrás, pero este seguía cayendo y acomodándose en mi frente.

—¿Debería cortarlo o... raparme?

Reí levemente al imaginarme sin cabello, en estos momentos era una molestia tenerlo algo largo.

Mientras sacaba el carro del estacionamiento, recibí una llamada, la cual se fue directo al buzón.

La verdad no he querido hablar mucho con los chicos, a pesar de que ya había pasado mucho desde que terminé con ella. Dos años para ser exactos.

Había atendido algunos mensajes de ellos, pero dejé de hacerlo, y está claro que no merecen que los trate así, después de todo, fue problema nuestro... no de ellos.

En menos de una hora ya estaba frente al edificio de la empresa donde trabajo.

—Hola —saludé a la chica que llegó a mi lado—.

—No es posible, ¿estoy viendo al mejor productor frente a mi?

Sonreí, tenía unos días que no la veía por estar ocupado. Asentí a los segundos, tampoco iba a negar que soy el mejor.

—No has dormido bien, ¿cierto? —estiró mi mejilla derecha— Tus ojeras casi tocan tus pies.

—Déjame en paz.

Rió antes de alejarse de mi por completo, despidiéndose con una gran sonrisa.

Subí hasta que llegué a la planta dónde está el estudio, encontrándome con algunos conocidos, junto a Seo-joon.

Ambos entramos, viendo como uno de los artistas más famosos estaba ya listo para comenzar a grabar. Le dimos la indicación, y al instante comenzó a cantar.

...

—Te lo digo en serio Min, es un desperdicio que esas letras no sean cantadas, y producidas.

—Podrías venderlas a alguna empresa.

Dejé mi cuerpo caer sobre la silla, esperando quedarme dormido antes que seguir escuchando las sugerencias de ambos.

—Las tiraré a la basura si siguen insistiendo.

—Yoongi, deberías intentar algo nuevo, no siempre podrás ser ese productor anónimo.

Soo-hyun bebió de su tarro de cerveza mientras golpeaba el hombro del otro chico, incitando a que la apoyara, pero el no dijo nada.

Me gustan las cosas anónimas, ¿no puedo hacer lo que me gusta? Solo pocas personas conocían mi identidad, y para mí eso era... ¿interesante?

Mi trabajo había cambiado de un momento a otro; me mudé a Seoul buscando un futuro para mi carrera, y terminé en la industria musical. Todo por estos dos chicos frente a mi.