Los ocho (#1)

CAPÍTULO 27

                              
                                   Maratón 1/3

Capítulo 27 Originales

Estábamos en una carrera ilegal, Liam, Diego, Alonzo y yo. Puse los ojos en blanco no soporto al italiano. Liam estaba terminando una pelea ilegal.

- Vaya, vaya siempre metida en lugares turbios- me di la vuelta al reconocer su voz.

-Adam- grité. Corrí hacia él y lo abrace.

-Dama- me abrazó con fuerza.- Te extrañe- me dió un beso en la nuca.

-Yo también- le di un beso en la frente.- Pensé que no vendrías hasta mi cumpleaños-me separé de él y sujete su cara con mis manos.

-Cambio de planes- se encogió de hombros.- Me voy a quedar hasta después de tu cumpleaños- sonreí con emoción. Vi como Liam dejaba cao al chico lo declaraban ganador y bajaba del rin viniendo hacia nosotros.

-¿Adam Black?- preguntó Davis finalmente al lado nuestro.

-El mismo que apunta y mata- me reí de la derivación de Adam.

-Un gusto volver a verte Adam- Alonzo apretujo la mano de Adam como saludo.

-Me encantan tus ojos verdes- murmuré refiriéndome a Adam.

-Si vieras los de Dante.- Los hermanos Black, Dante y Adam. Dante es el mayor el encargado de las relaciones públicas, no lo conozco, Adam el menor el responsable de los negocios en general.

-Ver para creer- me puse al lado de Adam mientras hablaba, Adam pasó su brazo por mis hombros.

-Algún día te lo presentaré- me sonrió.

-Eso espero. Quédate en mi casa mi madre no viene hasta el veinticuatro- lo miré con ojos de cacharrito. Adam ladeo la cabeza pensando.

-Está bien Dama- entrelace nuestras manos y di saltitos de alegría. Para ser mafioso era un encanto de persona.

Diego, Alonzo, Liam, Adam y yo nos fuimos a la playa. Liam estaba durmiendo en la arena, Diego y Alonzo se estaban bañando, Adam y yo hablábamos en la arena.

-Ten cuidado Adam, tienes una debilidad, Dante- dije enterrando mis dedos en la arena.

-Son dos, Dante y tú- me regaló una sonrisa. No sabía que era tan importante para él.- Pero tu debilidad es Liam- vi como Liam estaba dormido en la arena, sonreí.

-Ten cuidado- me advirtió, suspiré.

-Adam deberías tener cuidado tú también, tú sí que tienes que perder en verdad- lo miré fijamente. Liam se acercó y me tiró del brazo para meternos en el agua. Nadé un rato en el agua y después me acerqué a Adam que también se había metió en el agua.

-Te estas enamorando Olivia, no es como Will, él te gustaba, este te está enamorando- Adam había pasado sus brazos alrededor de mi cintura. Yo pasé mis brazos por su cuello.

-No digas tonterías- quité un brazo de su cuello y le golpeé el hombro. Puse mi brazo de vuelta alrededor de su cuello. Él puso una mano en la cabeza y, me hundió en el agua, hasta que se cansó y quito su mano de mi cabeza y me ayudo a salir a la superficie.

-Cabrón- murmuré quitándome agua de la cara.

-Sé que me quieres- me sonrió con amabilidad.

-Si te quiero- murmuré echando la cabeza hacia atrás.- Bueno nos separamos- dije quitando mis brazos alrededor de su cuello.

-Esto ha sido demasiado cursi para mi gusto- aseguré, Black asintió quitando sus manos de mi cintura.

Al día siguiente

-Cam, Ian- grité abrazándolos. Habían vuelto por navidades. Adam apareció por el salón en bóxer. Cam e Ian lo miraron con la boca abierta, y luego me miraron a mí. Tenía puesta una camiseta de Ian.

-Esa camisa no es mía- mi primo dijo con la boca abierta.

-Es mía tranquilo- dijo Ian poniendo una mano en el hombro de Cameron.

-¿Y este?- preguntó Ian.

-Adam Black, es un amigo- dije ayudándole con las maletas.

-Más te vale que seas amigo, que se nota que eres mayor que ella- Ian señaló a mi gran amigo Black. Cameron se le quedaba viendo sin reaccionar y lo entiendo. Sus ojos son verdes, ahora son más penetrantes igual a los de él.

-Cuanto tiempo Black- Cameron lo saludó. Black y Mesa se abrazaron.

-Hace mucho tiempo que no veo a los dos Patrison juntos- Adam pasó un brazo por mis hombros y otro por los hombros de Cameron.

-Ya, ambos estamos muy ocupados- Cameron habló por los dos.

-Oye, oye yo también existo- se quejó Ian.

-Pobre de mí chico- me separé de Adam y acune la cara de Ian en mis manos.

Un llamada corto el gran momento. Atendí la llamada.

-Otra vez este viejo- me quejé

-Deben ir Los ocho originales, con Paco, Logan e Ilian. Guerra de mafias, la dirección ya te la envié, ahí está un viejo amigo tuyo- iba asintiendo hasta lo del viejo amigo. ¿Viejo amigo? Mínimo serán unas veinte personas para la próxima debería especificar mas.

-A sus órdenes - colgué y mire a los chicos.

-Chicos vámonos, lo siento Adam.

Los ocho originales en realidad somos diez- William, Christopher, Ian, Cameron, Alejandro, Diego, Mattheo, Liam, Ben y yo- Los ocho originales tenemos un tatuaje en diferentes partes del cuerpo, se trata de ocho círculos, los dos últimos están dividido en dos con una línea en medio. Cada círculo representa a cada uno de nosotros, el mío es el penúltimo círculo la primera mitad, la segunda mitad es de Liam. Nuestras mitades están pintadas de negro. Mi tatuaje está en la costilla izquierda a la altura de mis senos, horizontalmente.

Entramos en un lugar lleno de cajas, había muchos hombres armados sabían de nuestra presencia, pero no nos dispararon. Vi la figura de un hombre, no podía distinguir quien era. Hice una seña con la mano para que los chicos se ocultaran detrás de cajas, columnas o puntos ciegos. Todos con arma en mano se asomaron de sus posiciones apuntando. El hombre salió de la oscuridad. Me quedé perpleja.

-Cuánto tiempo Dama, ¿Qué tal?- habló, tenía la misma voz. Después de tanto tiempo no le había cambiado la voz...

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Bueno, bueno ¿Quien creen que es el viejo amigo? Hagan sus apuestas porque en menos de diez minutos lo sabrán.

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