⏰: 14

350 42 37
                                    

“La belleza solo sirve para marear un par de ojos, pero para estrecemer el alma, se necesita más que eso.”

                                                    ☕. Sinnerateez28






—Sanie bebé, ¿Quién es? ¿Qué olor tiene?.—pregunto asustado, su hijo no decía palabra alguna.—Dime para que pueda ayudarte.—suplico una vez más.

—Café.—susurro levemente.—amargo.—artículo bajito.—alfa...

Jongho se encontraba asustado no sabía que hacer, pensaba un millón de cosas, y entre ellas el desgraciado que su cachorro aclamaba como su alfa. La palabra celos que daba corta ante la insertidumbre, el onojo que estaba inundando su ser.

Sentía irá, trato de calmarse un poco, saco su celular, debía llamar al pediatra era el único que sabría que hacer en una situación como está.

La llamada no entraba, sonó pero absolutamente nadie se digno a contestar, en el transcurso recordó a su madre, cambio de línea, solo bastó que sonará un par de segundos para escuchar una dulce voz.

—¡Jongho! Bebé.—grito con ímpetu.

—¡Mamá! San entro en celo y no se que hacer, mis feromonas no son capaz de calmarlo, su Omega proclama a su alfa...—dijo alarmado.

—Esto es malo, ¿Quién es el idiota que mi bebé llama?

—No lo sé...

La señora con desesperación recordó que en su juventud atravesó la misma etapa similar que su amado nieto.—Jongho necesito que te tranquilíces, pregúntale a su Omega por el olor que tiene su pareja, cuando lo haga consigue todos los ingredientes necesarios, una vez hecho todo hervelo a modo de sacar la esencia, cierra las ventanas, deja que la fragancia se expanda, una vez hecho esto dale un poquito a beber, luego libera tus feromonas, esto será suficiente para calmarlo, corre, si esto tarda mucho tiempo, podría llegar a morir, ¡Hazlo rápido!.—articulo de forma mucho más tranquila.

Pues sabía a ciencia cierta que eso daría un buen resultado.

El castaño colgó, le tomo poco tiempo llegar a la cocina, busco una olla para herver café...

(...)

Wooyoung sintió su cuerpo extrañamente pesado, pudo sentir su temperatura corporal subir levemente, comenzó a sentirse excitado, entre jadeos maldijo... Se suponía que aún faltaba para su época de calor, debía irse y resguardarse en su habitación.

—Debo irme.—hablo ligeramente.—estoy entrando en celo.

Mingi entendió de inmediato—Ten cuidado, conduce con calma.—sincero preocupado.

El pelinegro no tardó en salir de la mansión directo dónde debía ponerse a salvó... O más bien dónde no sería un peligro, ahora que su torpe lobo sabía quien era su destino.

Por su bien, tenía que hacer todo lo necesario para tener a salvó a su niño... Su bebé.

(...)

—San tranquilo, iré por el tío.—trato de calmarlo entre llantos, estaba más asustado que nunca, no entendía que pasaba, el porque su amigo se encontraba en aquella situación.—¡tío, tío!.—corrio en busca del mayor.

Al escuchar los gritos se alarmó, observo al otro infante entrar entre lágrimas, ante la angustia que sentía se olvidó de Yeo.—Cariño cálmate.—sostuvo entre sus brazos al pequeño.

—¡Sa.. San! ¿Qué le sucede!.—tartamudeo con miedo.

Abrazo al peligris sobando su espalda tratando de confortarlo, llevo su cabeza hasta su cuello para que pudiera sentir su calor paternal.—Tranquilo.—susurro.—todo estará bien.

Mi omega es un niño. [WooSan]Où les histoires vivent. Découvrez maintenant