Capítulo 1"Un recuerdo que escoce el alma"

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Para Maquia traer a memoria esas imágenes la obligaron a que sus lágrimas bajaran por sus mejillas. Recordar a su bebé, a su Ariel crecer, volverse cada día un hombre, un hombre que poco a poco le fueron cambiando sus sentimientos y emociones hacia ella.

Para ella, ella seguía siendo su mamá, pero para él, ahora solo era Maquia aquella mujer (no mamá), aquella mujer que lo rescató de poder morir siendo bebé, siendo niño y siendo un adolescente.

Quien diría que esos recuerdos más adelante serían su ancla para seguir recordando a Ariel como hijo, y no como el hombre hermoso y amable que ella había criado pero que de una u otra manera su mente, su cuerpo, incluso su corazón palpitaba por él.

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~Era ya de noche Maquia dio de cenar a Ariel, él tenía que prepararse para salir al trabajo~

Esa fue la primera vez que Ariel borracho, sí borracho, había mostrado sus verdaderos sentimientos hacia Maquia. Inspirado por aquellos hombres que confundidos había creído que ellos eran una pareja joven. De amantes que se volvían uno por la noche, lo incitaron inconscientemente a creer que él era quien la poseía en cuerpo y alma.
Para nadie era un secreto que Maquia amaba y cuidaba de Ariel, aquellos hombres creyeron que como pareja, pero para ella era como mamá, para Ariel....para Ariel......ni siquiera él lo sabía.

Que difícil era tratar de leer a la bella Maquia, ¿Qué podría pasar por su cabeza? ¿Quién es la razón para que suspire de amor carnal? ¿Quién podría ser aquel hombre que la haría suya? Ariel no quería que nadie la poseyera sino solo él. Pero como rompería esa barrera que ella le tenía a él.

Por eso fue que estando borracho, no le importo.
Deseaba a Maquia, dolía su corazón, su alma, su cuerpo de la impotencia que sentía al no poder tenerla.
Y se atrevió, casi la beso, ¡Dios! Su corazón jamás se había sentido tan acelerado por casi rozar sus labios contra los de ella, la sensación de tener acorralada contra esa pared donde a 50 centímetros estaban pegados aquellos regalos que le había hecho a ella como hijo, cuando era un niño que corría por la ciudad, que viajaba con ella en los barcos.

|| Por esa razón, ella no pudo. Su hijo la estaba irrespetando de una manera tan vana, ella nunca, nunca había sido tratada de esa forma, ni por alguien de afuera y jamás se imaginó que si hijo lo haría. ||

Una cachetada, una cachetada que lo hizo caer de espalda contra el piso y una asustada Maquia fue lo que recibió por su impulso, le dolió su rechazo, le escoció el pecho, hizo que la borrachera que tenía desapareciera en segundos.

Salió, salió a como pudo. Y se propuso alejarse de ella, irse, para no dañarse ni a él, menos a ella. La amaba por esa razón no haría nada al respecto, no esperaría nada de ella.

Los dulces y extraños sueños de Maquia (PAUSADA)Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt