Para verte sonreír

Capítulo 7

"¿Estas seguro acerca de esto?" Rei miró la forma actualmente sin camisa de Izuku mientras estaba acostado en el piso boca abajo, dándole una excelente vista de su espalda. Honestamente, nunca se dio cuenta de cuántos músculos tenía la espalda; para ella era solo su espalda. Pero para Izuku.

Para Izuku había mucho que descifrar allí.

Izuku se movió un poco y le sonrió, con la cabeza aún en el suelo. "Rei, eres como una bolsa de hielo viviente, créeme, estaré bien, y probablemente me ayudarás a recuperarme un poco."

"Eso no es lo que quise decir, solo soy uhh". Agarró el aire, las mangas de su blusa negra que había intentado enrollar se desabrocharon y se desplegaron hasta la muñeca. Honestamente, considerando todas las cosas, era asombroso lo rápido que se había acostumbrado a que Izuku la viera en ropa de salón. Lo cual fue en realidad desde el primer día que se conocieron. "¿No seré demasiado pesada?"

Él la miró enarcando una ceja verde y le dio una mirada en blanco. "Rei, hago más peso que tú para calentar. No me vas a hacer daño, en todo caso vas a ayudar mucho".

Eso fue una especie de excitación.

"Aún así," dejó caer los hombros y luego se pasó la mano por la cola de caballo. "Estás herido y no quiero empeorar las cosas". Ella miró su herida. "Además, ¿cómo te esguinces todo un hombro?"

"Bus en llamas".

"¿No deberías estar en el hospital?"

"¿Y ser gritado por Recovery Girl y perder tiempo de calidad contigo?" Izuku se inclinó un poco con su hombro menos hinchado. "Además, estoy bien Rei, he tenido esguinces antes. Una bolsa de hielo y un par de días de descanso me dejarán como nuevo."

Rei dejó escapar un largo suspiro. Honestamente, en el transcurso de su relación de tres meses se había acostumbrado a salir con un héroe y todo lo que venía con él. Aunque en el caso de Izuku, ser un héroe fue la mayor parte de su vida. Eran iguales en ese sentido. Antes de conocerse, su vida era su trabajo y su trabajo era su vida. Ahora, juntos, tenían motivos para volver a casa temprano.

Una sonrisa apareció en el rostro de Rei mientras miraba a través del condominio de Izuku. Claro, ella todavía pagaba el alquiler de su apartamento, pero hoy era el quinto día consecutivo en que había decidido quedarse con Izuku nuevamente. Una vez que finalizara su contrato de arrendamiento, podría terminar preguntando sobre la mudanza.

"Bien, viene un helado masaje de novia." Ella se sentó a horcajadas sobre él y colocó su peso en la parte posterior de su cintura y luego presionó ambas manos sobre la parte roja y ligeramente hinchada de su espalda. Tras una inspección más cercana, vio algo más allá del esguince y sus otras cicatrices. Marcas de rasguño. "¿Alguien te arañó o algo así?"

"Uhh," su cuerpo entero pareció moverse mientras hablaba. Un leve gemido recorrió todo su cuerpo, y debido a que Rei estaba a horcajadas sobre él, lo sintió de la mejor o de la peor manera posible. "Sí, eras tú."

"¿Cuándo hice—" Parpadeó y sintió que sus mejillas ardían un poco. "Oh, umm, ¿lo siento?"

Izuku se rió entre dientes. Otra sensación que se sentía bien y extraña desde su posición actual. "No lo estés. A mí, uhh, me gusta un poco."