El Diario De Una Lectora ✓ [Completa]

ESPECIAL

5 años atrás...

Allison 12 años

Hace dos meses había tenido mi tercera mudanza, nunca pensé que me llegaría a sentir así la verdad... Las mudanzas habían ocurrido últimamente una tras otra y no había algo que yo pudiese decir para que nada de esto pasara.

En este momento me encuentro sentada junto a la ventana en clase. Veo como poco a poco todos van llegando y tomando asiento, entre ninguno de ellos logro divisar a mi mejor amiga Mía.

Comienzo a preocuparme... Ella nunca había... Ella prometió... Respira Aly no pasa nada.

Salvo que otra persona se está cansando de ti

No comiences ahora, por favor

Hace apenas unos meses comencé a tener conversaciones conmigo misma. Muchos pensarán que me estoy volviendo loca, pero es de alguna manera lo que me ayuda a no sentirme sola todo el tiempo.

Entre todas las personas que entran logro diferenciar a un chico... Poseía una tez clara, ojos verdes, unos labios rosaseos y se veía bastante alto para su edad. Camino hasta el puesto junto a mi y sin siquiera dirigirme una mirada comenzó a prepararse para la clase.

Yo sonreí de lado. ¿Será nuevo?. Si es así quiero ayudarlo a integrarse... Al fin y al cabo eh pasado mucho por eso últimamente.

—Hola —Comencé con una gran sonrisa.

Él ni se inmutó, siguió haciendo sus cosas fingiendo que yo no había dicho ni una sola palabra.

—¡Oye! Te estoy hablando —Refuté cruzandome de brazos.

—¿Que quieres?. —Alzo una ceja y me dirigió la primera mirada.

Lo mire un momento, parecía algo alterado... ¿Acaso hice algo mal?. Debí quedarme callada para así no incomodarlo.

¿Eso crees genia? ¡Es obvio que no quiere hablar!

Desvié la mirada hacia la ventana... ¿Lo incómode?

—Lo siento... —Me disculpé —Solo quería conocerte, no te había visto por aquí antes.

Pasaron unos minutos en completo silencio mientras yo intentaba no dejar de mirar la ventana. ¿Que estará pensando de mi?, Fui demasiado imprudente... Me juro a mi misma no volver hacer esto.

—Me mudé aquí la semana pasada y esto es extraño para mí ¿Sabes? —Murmuro en lo que yo supongo fue un modo de disculpa.

—Creeme... Te entiendo más de lo que querría hacerlo.

—¿Eh?

—¿Que? —Me volteé para hacer contacto visual.

Siempre con mi imprudencia, no debí decir eso... Ahora tendré problemas con mamá. A ella nunca le ha gustado mucho que hable sobre nuestras mudanzas.

—¿Y que se hace aquí?

—Estudiar —Es lo que respondo.

Sonrío y casi al instante llega el profesor...

La clase transcurrió de manera normal, a excepción de que hablaba con aquel chico a escondidas del profesor. Ni siquiera con Mía había hecho eso, ella siempre me decía que me callara porque necesitaba escuchar lo que decía el profesor.

En el receso, él no tenía con quién pasarla y yo tampoco —.Ya que Mía no había venido hoy .— Nos la pasamos juntos. Nos conocimos y a decir verdad me calló muy bien, era alguien muy simpático con quién podía iniciar una conversación de manera muy fácil. Y con el transcurso del tiempo llego a robarme muchas sonrisas, nos hicimos amigos muy cercanos.