One-shots. Natasha Romanoff

El ruby más brillante de entre todos los diamantes.

Que sería de él ahora que ella ya no estaba para regañarlo, o simplemente molestarlo y tomarle el pelo con sus frases de doble sentido.

Cuando Clint se hayo solo en la plataforma de la máquina del tiempo no estuvo seguro de quién de todos sus compañeros se veía más triste ante la perdida de su hermana de vida.

No supo quién era el más roto: su compañero de travesuras se veía decaído, y distraído. Seguramente rezando por que fuera una de sus estúpidas bromas.

Su antiguo interés amoroso, ahora verde de dos metros, se notaba impotente. ¿Quién no?

El dios del trueno y compañero de compras, se encontraba en negación. No aceptaría así de fácil en hecho de que la mujer más fuerte que había conocido se encontraba muerta. Esto enserio paso.

Y su mejor amigo, su confidente, su pilar, su compañero de misiones... Y su prometido, estaba en shock. ¿Cómo es que a la rusa se le había dado por no volver poco después de que él le pidiera matrimonio?.

Después de la llamada que recibió de su esposa, la mujer que creyó desdé cinco años atrás que nunca volvería a escuchar, se puso en marcha el plan en el que regresarían las gemas a su tiempo original.

Pero eso no paso, el capitán y todos los demás sintieron el piso temblar bajo sus pies, el complejo, tan figurativo como literal, había explotado dejando a la mayoría bajo los escombros.

Steve como pudo y jadeando se levantó buscando con el tacto su escudo, observó a lo lejos la nave de ¿Thanos?, ¿Que no se supone que Thor lo había fusilado frente a sus ojos?.

Los vengadores que no se fueron con el chasquido luchaban lo más que podían contra Thanos. Del pasado si no es que había entendido mal. Algo escucho por su intercomunicador un simple pero claro "A tu izquierda" los muchos portales portales se abrierón mostrando a todos aquellos que se fueron con el chasquido y algunos otros que habían estado por el mundo. Creyó reconocer a las viudas de las que alguna vez le hablo Nat, guardo la esperanza de... Que en algún momento su necia prometida hiciera acto de presencia, que entrara en el momento más dramático haciendo una entrada totalmente dramática, pero no paso así que cuando todos los héroes vivos en la tierra se pusieron atrás de él y a sus costados se aseguro de dejar un lugar a su derecha esperando por la bonita espía pelirroja.

¿Su escudo? Pues... Su escudo se rompío, se rompío durante el enfrentamiento en el que estaba furioso con el titán, en sus ojos logro distinguir la compasión de la perdida de una vida. Su escudo ya no tenía propósito a su lado, si ya no estaba la valiente y voraz espía soviética a quien debía proteger.

Tony chasqueo los dedos ¿En que estaba pensando? Suponía que en sus familia. Tony se desintegró, alguien más que lo dejaba solo. Oh pobre de él, pronto se quedaría totalmente solo.

Durante su funeral no pudo evitar pensar en Morgan que ahora se encontraba triste, sino solo el estaba triste, significava que necesitaba ser más fuerte por las dos personas que se sacrificaron con tal de que llegara esa victoria que les devolviera a los caídos y acabará con el villano.

Quién diría que al faltarle dos gemas por entregar no supiera a qué destino ir primero, opto ir paso por paso: primero dejar la del alma y luego dejaría las correspondientes al 1950.

¡Oh que dolor fue el suyo! Sufrió al ve el risco del que el amor de su vida salto; que ironía ¿No? El guardián de la gema no era nadie más que su compinche de la segunda guerra mundial.

Siguió todas sus indicaciones, el guardián le comento que si su alma deseaba mucho el regreso de su pelirroja, volvería. Que sorpresa se llevó cuando despertó en medio de lunas de agua, con dos cuerpos encima suyo. Que miedo.