Por fin ha logrado el futuro que deseaba, pero.. ¿realmente todo acaba aquí?
Las consecuencias de sus viajes y experiencias anteriores pueden quebrar a cualquiera y él, no es la excepción.
𝐀𝐝𝐯𝐞𝐫𝐭𝐞𝐧𝐜𝐢𝐚
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Dos semanas han transcurrido desde la última vez que Mikey estuvo en casa, luego de eso este comenzó a actuar de forma extraña y dejar de visitar, algo que para esas alturas era un continuo y a lo que todos en casa estaban acostumbrados. Incluso Hinata parecía sorprendida de no encontrarse con el mayor tras llegar de su trabajo.
Las razones recaían sobre diferentes excusas que ofrecía el instructor de artes marciales con tal de no dejarse ver frente a su familia.
Mentiría si dijera que sus ánimos no han ido descendiendo en picada debido a esto, llegando a preguntarse en más de una ocasión si acaso había cometido algún tipo de error por el cual Manjiro podría haberse molestado o sentirse incómodo, pero ninguna respuesta viene a su mente. Sinceramente no tiene idea a qué se debe el repentino distanciamiento.
Porque sí, Mikey había comenzado a distanciarse, de nuevo.
Y ese tipo de acciones solo habían traído consecuencias desastrosas en todos los futuros que pudo vislumbrar con anterioridad.
Mikey no puede caer en el abismo de nuevo, no...
Solo repara en el constantr temblor de sus manos cuando Kuroba se acerca para sostenerlas con delicadeza.
— ¿Papá? —Le escucha llamarlo, con clara preocupación reflejada en esos vivaces ojos.
Para ese entonces, a pesar de ser una niña, se había dado cuenta de que algo andaba mal desde hace unos días.
Takemichi exhala el aire contenido en sus pulmones de golpe antes de sonreír y agacharse a la altura de la niña para tranquilizarla.
— Todo está bien cariño, no pasa nada —Sostiene sus pequeñas manitas con algo más de seguridad, intentando transmitir una calma que en su mente ahora mismo no existe, pero que se fuerza a tener para no preocupar demasiado a la pequeña.
Kuroba no parece muy convencida pero termina por asentir un par de veces. En un principio ante la repentina ausencia de su tío se había animado a preguntar en varias ocasiones qué pasaba y por qué no los visitaba.
Eso hasta que la mueca inconsciente en los labios de su padre le indicaron que debía parar de preguntar, aún cuando le encantaría que su tío esté ahí con ellos. No entiende bien qué sucede pero si sabe que todo eso está afectando de alguna forma a su papá y quiere ayudarlo.
Pero no sabe cómo.
Takemichi se endereza y pone de pie, no sin antes acariciar el cabello de la niña con cariño. Su sonrisa se borra de golpe en cuanto Kuroba se da media vuelta para seguir jugando sobre la alfombra con sus legos.
Necesita moverse rápido si no quiere que nada malo pase, necesita proteger ese futuro por el cual tanto esfuerzo puso, necesita proteger a Mikey, necesita que no se distancie, necesita que no caiga en la oscuridad, necesita... que esté a su lado.
