Capítulo XII

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*Historia creada/escrita por Chispasrojas [Beatriz Ruiz Sánchez]. Si quieres apoyar a la autora, puedes encontrar contenido exclusivo y el libro completo en Patreon.com/chispasrojas.

Capítulo XII. El Bosque Ondulado

Sin monturas, el grupo partió al amanecer del pueblo montañés de Azmar, tomando la ruta que atravesaría el bosque. Cargaban mochilas de viaje con ropa, con provisiones de comida, armas enfundadas y colgadas tras sus espaldas, así como bastones con los que atravesar mejor la maleza. Iban acompañados por el león blanco de Ronan, que sirvió como auxiliar para cargar algunas cosas más, como utensilios de cocina y la carpa enrollada.

—Volver a estirar las piernas siempre sienta bien —reconoció el Enano.

—Decidlo por vos, que tenéis a Ventisca para descansar. El resto moriremos por las agujetas —rebatió Darien, tan alegre como siempre.

—No creáis que los bosques tienen mi devoción. Espesa maleza, copas de árboles que llegan a lo más alto, y puestas de sol eclipsadas desde el interior.

Taehyung y Namjoon compartieron una mirada cómplice mientras caminaban. Justo lo que los feéricos adoraban.

—Si quieres recuperar tu forma feérica, lo entenderé —musitó Taehyung a su lado—. Puedes viajar en mi bolsillo.

—No pienso darle el gusto a ese Enano de dejar de ser el más bajito.

El Elfo soltó una risita mientras caminaban, Jungkook les miró de soslayo, sintiendo habitual su cuchicheo y risitas desde que Namjoon había regresado.

Todavía quedaban unas horas hasta llegar al bosque, y mientras caminaban bajo capuchas, una brújula en la mano de Jungkook marcaba los puntos cardinales y el mapa era revisado a cada tanto por él y Ronan. El paisaje empezaba a transmutar, abandonando los parajes escarpados, las cordilleras salpicadas por pinos azules y la visión de la elevada montaña que colindaba con Azmar. El horizonte daba paso a campos más abiertos, menos áridos, y con más zarzales. Cedros de hojas afiladas y madera fragante, cipreses alargados, de corteza rojiza, con piñas redondeadas, y arces menores.

Taehyung arrancó un par de piñas que cabían en la palma de su mano, le ofreció una a Namjoon y la otra se la guardó en el bolsillo del pantalón.

Unas horas tomaron caminando hacia el horizonte hasta ver la linde del Bosque Ondulado. Verde oscuro, salpicada por árboles enormes y alargados, cuyos troncos se encontraban curiosamente torcidos. Cuanto más se acercaban, más llamativo era el paraje rociado por la zarza, las hojas ocres y amarillentas del suelo, el musgo sobre las rocas y el ambiente espeso.

—Caramba, mirad eso. Es como si les hubieran soplado hasta quedar curvados —expresó Jungkook con los ojos muy abiertos.

—¿Será por eso que lo llaman Bosque Ondulado? —formuló Darien.

Sus pasos les adentraron en el bosque, donde el aroma se volvía más intenso. Namjoon cerró los ojos sintiendo cómo todas las membranas nasales se hacían a un lado para dejarle apreciar los verdaderamente sutiles olores del bosque: el musgo en las zonas húmedas, la tierra marrón oscura hundiéndose a cada suave paso bajo las suelas de sus botas, el romero que estaba cerca, el humo de alguna hoguera lejana con resquicios a brasas y leña, la hierba cortada, la amalgama de aromas florales emanando y entremezclándose entre sí, la resina que fluía del tronco agujereado de un árbol. Incluso el calor del sol refractando en una piedra. Las copas eran bien altas, creaban un microclima y una atmósfera única en cada bosque. Y aquella sensación era deleitable, especialmente para un Elfo y un hada que extrañaban tantísimo el precioso y mágico valle en el que siempre habían estado.

Dynasty I: Viajeros del Alba ⋆ Kookv [Chispasrojas]Where stories live. Discover now