como entrenar a tu dragón ua

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La tormenta había empezado a empeorar, el mar estaba embravecido ni una embarcación lograría soportar todo el daño que recibiría si lo navegará, Por otro lado en el cielo también se podía notar el poder de las corrientes del aire sín mencionar los relámpagos que aparecían sin advertencia alguna, por eso dos motivos patán junto a los demás jinetes decidieron sobrevolar por encima de la tormenta, la cual aún seguía su rumbo hacia Berk

Patán: patapez, como está Hipo?

Patapez: por el momento está bien su respiración es normal y no veo ni una herida sería

Patán: mantenlo vigilado, supongo que en unos cuantos minutos llegaremos a Berk

Patapez: referiría que alguien bajará y revisara donde estamos, no sea que nos pasemos de la isla

Patán: tienes toda la razón, oigan ustedes dos

Brutacio: si ya oímos

Brutilda: vamos a ver

Descendieron por debajo de las nubes y para su sorpresa ya estaban sobrevolando Berk, rápidamente subieron Y le avisaron a patán y a patapez, los cuales descendieron con sus dragones, patán dejó a chimuelo en el ruedo y se quedó junto a él para revisarlo, mientras tanto patapez llevo a Hipo con gothi ya que por alguna extraña razón tenía una fiebre muy alta, gothi no perdió tiempo y empezó a preparar algunos remedios.

La noticia del regreso del jefe se extendió rápido por todo Berk, muchos estaban felices de que por fin su jefe había vuelto, pero su felicidad se vio empañada por la noticia de que el jefe había terminado un poco herido

Claro está que al enterarse de eso Astrid fue rápidamente con gothi para saber el estado de salud de Hipo, al igual que Estoico y bocón, aunque gothi solo dejo que pasara Astrid ya que ella sería de mucha más ayuda

Astrid: no hay nada que podamos hacer?

Gothi: solo podemos pedirle a los dioses que le den fuerza y regrese en si

Lo escribía en el piso

Mientras tanto en el subconsciente de Hipo

Narra Hipo

Se podía ver un lugar oscuro, y una densa neblina la cual impedía que se pudiera ver lo que allí estaba, lentamente empecé a avanzar esperando encontrar una salida, pero de repente frente a mí aparece alguien con una armadura oscura, empieza a caminar en mí dirección he instintivamente me pongo en guardia, pero a pesar de eso en no se detenía, saco mí espada y apunto hacia su dirección para así detener su avance, pero increíblemente mí espada lo atraviesa y el sigue avanzando, e incluso atraviesa mí cuerpo, volteó bastante confundido y me preguntó a mí mismo si se trataba de un fantasma, de repente la niebla se disipa y estoy en medio de un círculo, a los costados veo como hay varios sujetos viéndome fijamente, cada uno tenía armaduras distintas, no solo el material sino también signos distintos, me preguntaba que significaba todo esto, fue en ese que se empezó a escuchar una voz

¿??: Cada uno de ellos fue mí portador, grandes guerreros y estrategas

Después de escuchar esa voz los sujetos que me rodeaban desaparecieron como sí de humo se tratara, no sabía muy bien de quién era la voz que había escuchado pero algo dentro de mí me decía que ya hace mucho tiempo le había escuchado, pero de repente en medio de toda esa oscuridad se pudo ver un ligero destello de luz al cual me dirigí rápidamente hacia dicho lugar, una vez llegue allí quede bastante impresionado por todo lo que veía frente a mis ojos, humo, fuego y una ciudad prácticamente destruida, llegue a preocuparme bastante ya que creía que Berk estaba bajó ataque, pero al ver mejor pudo ver que no se encontraba en Berk, entonces dónde demonios estaba, escucha un fuerte estruendo y veo como muchas rocas cubiertas con fuego eran lanzadas en dirección hacia la ciudad, destruían casas y parte de la muralla la cual protegía la ciudad, rápida tuve que saltar de la muralla ya que una de dichas rocas destruyó gran parte de la muralla en la cual me encontraba, caí cerca de un charco de agua y pude ver mí reflejo, fue allí donde pude notar que ese no era mí reflejo, ya que era un sujeto bastante robusto con barba y una cicatriz cerca de mí ojo derecho, rápidamente me levanté y vi como por una brecha en la muralla los enemigos entraban rápidamente y atacaban a todos los hombres que protegían dicha ciudad, al igual que ellos mí cuerpo se movía solo y acababa con todos los enemigos a los cuales me enfrentaba, rápidamente comprendí que estos posiblemente sería los recuerdos de alguien más, Hipo solo se dejó llevar por la situación y efectivamente eran los recuerdos de otra persona, justo cuando dio el golpe fatal al líder del ejército enemigo una luz lo deslumbró y estaba en otro campo de batalla, así paso sucesivamente hasta que volvió a ese lugar oscuro rodeado por tinieblas, pero en esta ocasión estaban alrededor de él las personas que había visto en sus recuerdos, pero le extraño mucho que había otro junto a ellos, se acercó un poco para verlo mejor ya que desde el lugar donde estaba no podía verlo tan bien, pero antes de dar el último paso tuvo un extraño presentimiento, instintivamente se hizo hacia atrás justo a tiempo para evitar un golpe de dicho sujeto, Hipo estaba bastante impresionado por dicha acción, pero a pesar de su asombro se puso en guardia para enfrentarlo, fue allí cuando empezó un nuevo combate, al cabo de dos minutos Hipo se dio cuenta de que su contrincante era bastante bueno en el combate así que lo único que podía hacer era defenderse, ya que su fuerza superaba por mucho a la suya, pero Hipo sabía que no solo con fuerza se podía superar a un enemigo, así que decidió enfrentarlo usando otros medios, pero dichos medios fueron inútiles contra él, así que hipo decidió dialogar un poco pero sin bajar su espada, pero al ver más de cerca a su contrincante pudo notar que estaba en una especie de transe por lo cual no podía razonar con él, así que decidió atacar de frente a su enemigo esperando que tal vez por algún milagro logrará vencerlo, para su suerte vio una apertura en la defensa de su enemigo y atacó allí y logro vencerlo, su enemigo calló al piso de rodillas y cuando vio a Hipo solo le pudo decir "gracias" justo en ese momento desapareció frente a sus ojos y recibió todos sus recuerdos los cuales le ocasionaron un terrible dolor de cabeza.