como entrenar a tu dragón ua

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Apenas subieron los escalones del templo, la tierra donde estaban parados se movió de repente, pareciera que fuera algo vivo, pero la densa niebla impedía ver lo que era, la niebla solo cubría la montaña que estaba debajo del templo, pero se podía apreciar como algo se movía en ella, chimuelo emitió un rugido y

Hipo: tienes toda la razón, sigamos adelante

Entraron por la primera puerta de dicho templó y frente a ellos estaba el patio interior, en el cual se podía ver el mapa del mundo, pero era raro, hipo en sus muchos viajes no había visto un mapa así, es más era muy diferente, pero de repente el mapa comenzó a moverse, nuevas tierras emergían y otras se hundían, los desiertos vio como iniciaron y cubrieron grandes zonas del mundo, también vio cómo se inició la creación de muchos lugares, entre ellos la isla de los druidas, un lugar el cual había visitado muchas veces, estaba tan distraído viendo el mapa, pero cuando escucho como chimuelo gruñía un poco, miro al lugar al cual chimuelo apuntaba, en eso vio como un dragón en una de las esquinas, pero era un dragón de piedra, así que hipo creyó que era una estatua del lugar, pero en eso escucha un sonido detrás de ellos, voltean y ven otro dragón de piedra en otra esquina, como en las otras esquinas, pero de repente uno de esos dragones voltea la cabeza hacia el, eso lo sorprende un poco, pero no sé alarmó mucho, pero lo que los alarmó era un rugido muy fuerte el cual provino de afuera del templo, pero dicho rugido hizo retumbar la paredes del templo, fue en ese momento que

Hipo: es mejor seguir adelante, no debemos perder tiempo

Chimuelo emitió un rugido y acompaño a su amigo humano

Mientras tanto con los compañeros de hipo

Patán: no lo encuentro por ningún lado

Patapez: yo tampoco

Brutilda: no vimos nada

Brutacio: que estábamos buscando?

Brutilda: da, acaso no lo recuerdas, estábamos buscando a, que buscábamos?

Astrid: a hipo, a hipo

Alexios: no creo que lo encontremos así

Astrid: que sugieres entonces?

Alexios: hipo sabe dónde estamos, el vendrá cuando sea tiempo, solo podemos esperar y rezar que todo salga bien, supongo que una oración en este lugar llega más rápido a los dioses, eso es lo que en verdad creo

Patán: alexios tiene razón, lo mejor será esperar

Astrid: entonces debemos estar sentados sin hacer nada

Patapez: no exactamente, podemos rezar como dijo alexios, pero tenemos que ser pacientes

Patán: es cierto, además si nos separamos e hipo regresa, no sería eso más perjudicial para nuestra misión

Astrid: tienes toda la razón

Alexios: hipo no salió de este lugar

Astrid: cómo puedes estar así de seguro

Alexios: mí conexión con mí nuevo amigo me permite ver varías cosas, estuve viendo lo que él ve, y no salió de este lugar

Astrid: entonces en donde demonios esta?

Alexios: no lo sé, pero no podemos hacer nada más que esperar

Aunque a Astrid no le agradaba dicha idea, alexios tenía razón, solo podían esperar a que hipo regresará sano y salvo, mientras tanto tendrían que esperar pacientemente

Mientras tanto con hipo, el seguía caminando por un corredor y en las paredes de dicho corredor, se podía ver murales de dragones, pero no eran como los que él conocía, eran mucho más grandes y más feroces, eso se notaba ya que el los murales se los podía ver peleando con otras criaturas, a medida que avanzaban más pesado se sentía el ambiente, era como si más delante de ellos estuvieran alguien con un gran poder, la primera vez que sintió algo como eso fue cuando encontró a tieru y la isla de los druidas, por fin llegó al final de dicho corredor y al salir allí lo vio, era un salón espacioso y no tenía techo en dicho lugar, y sentado en una especie de trono se encontraba una figura de forma humanoide, pero se notaba que era mucho más grande que un humano, al ingresar al lugar el ser que estaba sentado en dicho tronó, levanta la cabeza y se fija en hipo, eso lo pone un poco nervioso, no sabía si debía avanzar o debía salir de allí, fue chimuelo el cual lo empujó y lo motivo a seguir adelante, una vez en frente del imponente ser, hipo decide hablar