Cuando los ángeles lloran 2: "Perdido en el pasado"

Capitulo 12 + Epilogo

Hola!

Chicas, este es el ultimo capitulo de la segunda temporada. 

Por favor, si estan en posibilidades de leer el capitulo con la cancion que anexe, por favor escuchenla mientras leen. Creo que queda bastante bien  con el cap. 

Sin más... A Leer!

Capítulo 12:

*Había una vez, pero ya no*

POV NICK: 

La primera señal de que algo anda mal, es el silencio sofocante. 

Son las 12 en punto y para esta hora de los domingos todos los trabajadores de la casa comienzan a llegar, pero esta vez no hay nadie. 

Me adentro un poco más en la casa y dejo mi maletín junto con mi maleta en el sofá más grande de la sala. Todo está en orden, todo reluciente, pero de alguna forma sé que algo anda mal. 

Me quito mi saco y lo dejo al lado de mi maletín. 

Enciendo las luces de la sala y me dirijo a la cocina. Estoy muy cansado, así que lo único que quiero es beber algo de agua e irme a dormir. Seguro Edward ya estará dormido, pero no puedo ahogar estas ganas de volver a verlo por lo menos dormir.  

Hay un vaso en la barra, así que solo tomo la jarra de agua y vierto un poco en aquel vaso, bebo hasta el fondo y recargo mi mano en la barra, solo para sentir algo caliente, un tanto pegajoso y que hace que mi corazón comience a latir más a prisa. 

Bum, bum, bum. 

Aun con las luces apagadas, reconozco esto. 

Sangre.

El vaso se resbala de entre mis manos y yo me dirijo a toda velocidad a la habitación que compartí la última noche con Edward, la noche en que él se entregó a mí, la más especial desde que llegamos a Japón. 

Él no está ahí, ni siquiera Moony está aquí.  

Comienzo a entrar en pánico, ¿Dónde está? ¿Qué pasó? ¿Será que mientras no estuve ocurrió algo? 

Miro hacia todos lados, el pánico crece en mi interior. 

“Edward” 

Llamo con desesperación una y otra vez, pero él no está aquí, ni en su habitación. No está en ninguna de las habitaciones de huéspedes, pero hay un lugar en la planta alta que aún no he revisado. 

Me tiemblan los pies y las manos del nerviosismo y cuando llego a la puerta del baño veo a Moony arañando la pintura que cubre la puerta de madera. Debe llevar bastante haciendo esto, ya que la puerta ya tiene serios daños. 

Aparto al pequeño perro con mi mano y el solo gruñe con desesperación. 

Giro la perilla y debo ser fuerte para no echarme a llorar con la imagen que hay delante de mí. 

Lo encontré… y es peor de lo que imaginaba. 

El piso que solía ser blanco ahora tiene una suave capa de color rojo que lo cubre por completo, puedo ver un objeto de color dorado en el piso, el cual amenaza con desaparecer entre tanto color carmín.