Reencarne En El Mundo De Un Juego... ¿Verdad?

44

No era que me sintiera culpable. Al contrario estaba de mejor humor que antes. En verdad golpear a alguien tiene un excelente efecto terapéutico.

Pero no creo que estos dos que me están mirando con una cara que dice “Por favor no me golpees” piensen igual.

Cargue en mis brazos a la inconsciente Charisa como un costal de papas y me dirigí a los otros dos estudiantes para continuar el viaje de regreso.

Está vez fue un viaje rápido y callado. Cuando llegamos a la escuela los dos estudiantes salieron corriendo como si sus pies estuvieran en llamas.

El costal de papas fue dejado en la enfermería porque aún seguía inconsciente. Claro antes de dejarla le di una de mis píldoras curativas para que se redujera la inflamación y algunas heridas externas.

Después de ver el aspecto de Charisa me arrepentí un poco... Debí haber terminado el combate... Solo después de golpear un poco más.

Además de los dos estudiantes, los profesores también miraron mi viaje a la enfermería con curiosidad.

Había vuelto volando en un dragón divino, cargando a una inconsciente Charisa y no dudaba que los dos estudiantes ya se habían ido de lengua.

- Señorita Clairnes, su Alteza necesita hablar con usted, por favor sígame. - Kai el ayudante de Claude rompió la tensión y me alejo de la multitud.

- ¿Has averiguado quién es el culpable? - pregunte cuando Kai cerró la puerta a mis espaldas.

- Me temo que la situación es más problemática, Clairnes. - dijo con un suspiro mirando a Kai. Este asintió y me empezó a explicar.

- La verdad, desde el pasado incidente hasta ahora todas las personas que hemos capturado apuntan a la señorita Clairnes como el cerebro de la operación.

- ¿Qué dices? Yo no tengo la necesidad de hacer algo como eso. - era la primera vez que escucho esto. Con razón el caso no llego a nada hasta ahora. Si el Príncipe se basaba en esos testimonios ahora estaría en pleno juicio.

Que problema.

- Pelee con alguien más antes de que llegarás. Ese hombre estaba peleando con Deia cuando llegaste. - el sabía de mi y pensaba en mi como el resultado de uno de los traidores. El era una pista importante, puede incluso la única.

- Fue interrogado por mi en el terreno de entrenamiento pero además de decir que estabas relacionada con uno de los traidores de su organización no dijo más. - eso era genial. Decir eso solo me hacía más sospechosa. Claude era inteligente, no se dejaría llevar por comentarios como esos…¿Verdad?

- No te preocupes. Creó en tí, pero necesito que tengas cuidado de ahora en adelante. Parece que te convertiste en parte de sus objetivos. - eso sería un dolor de cabeza pero al menos no se esconderán de mi. Soy un buen cebo para la organización pero también estaré en constante riesgo a partir de ahora. Tal vez debería dejar la escuela por un tiempo.

- Entiendo, soy su mejor objetivo y la pista más cercana. - En ese sentido la situación no era tan mala.

- Será mejor que vayas y descanses. - dijo sacudiendo el polvo de mi cabello. Solo entonces empecé a pensar en las horribles pintas que llevo.

Adiós a la elegancia y delicadeza. No pude evitar suspirar en mi regreso, mi imagen en los ojos de Claude estaba demasiado lejos de ser femenina. Si es que no me resultaría extraño que pensará en mi como su compañera de armas y no como un objetivo romántico.

Entre a la habitación para encontrar todo destrozado desde los muebles hasta muchas prendas destrozadas por el suelo. Sin embargo todas las pertenencias con excepción de las que pertenecen a Charisa estaban intactas, desordenado pero intacto.