Dagan vagabundeaba por mi habitación, estaba sola, Ian estaba en un TAC de control para ver la reacción y efectos del tratamiento que él estaba tomando.
-¿Quieres hacer algo hoy?-Propuso Dagan.
-No, voy a ver cómo funciona mi corazón, pedí una TC para eso.
-Ya veo, espero que te esté funcionando bien, aunque en teoría si es de tu mismo tipo de sangre, no creo que haya ningún problema.
-Hoy me dicen con certeza si no me tengo que cambiar más de corazón.
Dagan soltó un "Aaaah" de entendimiento.
-Bueno, ya sabes más de mi dura vida.-Sonreí algo sarcástica.
Dagan daba vueltas bicheando mis cosas hasta que encontró mis dibujos.
-¿Los has hecho tú?-Preguntó impresionado.
-Si, los he hecho yo, me gusta mucho dibujar.
-Son muy bonitos. ¿Puedo preguntar quién es él?
-Es mi mejor amigo, el de la habitación de enfrente, lo dibujé cuando él era más pequeño, es un regalo de cumpleaños para mañana.
-Te ha salido muy bien, me gusta, tienes talento.
-Gracias.
Fui al baño unos minutos y cuando entré de nuevo a la habitación, él ya no estaba.
Me centré en escribir hasta que vinieron mi madre y mis hermanos.
-Hola, cariño, ¿cómo va tu día?
-Hola mamá.-Saludé con un beso en la mejilla a cada uno.- Hola Dex, Dain-Les saludé con un choque de puños.- Va más o menos bien, Ian está en un TAC que tiene para ver como funciona el tratamiento.
-Esperemos que el tratamiento responda.
-Si, eso espero.-Musité precoupada.
Mi madre me trajo mi pastel favorito. Pastel de nata portugués.
-Mm, ahora tengo una TC, para ver cómo está mi corazón.-Hablé con la boca llena.
-No hables con la boca llena, que asco, Sylvie.
-Perdón, mamá.-Sonreí con carita inocente.
- Ay, ¿qué voy a hacer contigo?-Me dijo cariñosa y me dio un beso en la frente.
-¿Y papá?-Pregunté extrañada.
-Está en el trabajo, lo ha llamado Adrien para algunas cosas que hay que apañar para dentro de poco.-Explicó.
Comenzamos a hablar de estupideces y Dex trajo mi juego favorito de cartas "República Bananera".
Jugamos mientras que llegaba mi turno de la TC y nos echamos unas buenas risas con todo lo que ponían en aquellas cartas blancas.
Me llamaron para mi TC.
Vino la nueva interna y me preparó para mí escáner.
-¿Sylvie Hockerman?
-Sí, soy yo.
-Soy, Olivia, puedes llamarme Via, soy la nueva interna de tu doctora, te toca hacerte una TC, siéntate en la silla.
Me senté en la silla de ruedas y Via me trasladó hacia la sala de la TC.
-Bien, Sylvie, no te muevas, no hagas nada que pueda perjudicar el funcionamiento de la máquina, ¿está bien?-Me pidió con sutileza y amabilidad.
-Si, claro.
-Bien, ¿estás preparada?
Asentí con la cabeza.
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Heart Exchange
Teen FictionTengo 20 años, y padezco del corazón desde que nací, y prácticamente el hospital es mi segunda casa. Me han cambiado el corazón más de 3 veces, ya que me los transplantaron de personas mayores poco funcionales. Mi vida no es muy interesante que se...