CAPITULO 18

311 18 0
                                    

Allana Smith:

La semanas pasaban ágilmente una tras otra, en el santuario cada vez había más problemas con la comida y mi padre cada vez se alejaba más de mi.

Mi relación con Carl iba muy bien, nos intentábamos ver todos los días o alternábamos días, incluso algún día me he quedado a dormir en Alexandria y nadie lo noto. Llevábamos unos 2 meses saliendo a escondidas y nadie lo sabía excepto Daryl ,

Dormir con Carl era una de las mejores sensaciones que había tenido nunca.

Los problemas en la base era por culpa de los de Alexandria, los suministros no nos llegaban ni con su ayuda obligada tampoco.

Hoy seria un día diferente, tenia un plan, ayudar a Daryl a escapar, le he cogido mucho cariño a ese hombreton, aqui no hacen más que pegarle palizas y matarle de hambre aunque yo evito eso ultimo.

Baje  hacia la zonas de las celdas y le abrí la puerta, era aproximadamente las 4 de la mañana y todo el mundo dormía,  así que nadie se daría cuenta.

Quite su ballesta de mi hombro para dársela a él, se la he estado guardando todo este tiempo, a pesar de que al principio la tuvo uno de las salvadores se la conseguí quitar y esconder

-¿Preparado? -susurre.

-Siempre enana -nuestra amistad se volvió más unida, con el pasar de los días.

Carl le estaría esperando con un coche al otro lado de la verja de alambres, al coche le habíamos echo unos arreglillos con ayuda de uno de los salvadores que mas confiaba, y que sabia que no diría nada.

Conseguimos pasar el pasillo superior con éxito pero hasta llegar a la planta baja hacia un buen tramo que estaba vigilado por salvadores con armas.

Lia una de las mujeres de mi padre se ocupo de eso, pegando un grito que los hizo alarmar e ir tras ella, los llevo hasta una habitación y los encierro ahí.

-Vía libre, cambio y corto -dijo Lia a través del Walki-Tolkie que le había dado para poder contactar con nosotros.

Enseguida llegamos al exterior haciendo el mas mínimo ruido y consiguiendo que nadie nos viera.

-Por aquí, vamos rápido -los susurros de Carl nos alertaron en que debíamos darnos prisa.

Su mano aguantaba el trozo roto de alambre para que pudiéramos pasar.

Le di un abrazo.

-¿Todo bien vaquero? -le dije cuando le solté del abrazo.

-Todo perfecto All -dijo depositando un corto beso en mis labios y acercando me mas a el.

-Oh venga dejaros los morreos para otro momento -dijo Daryl resoplando por nuestra actitud adolescente.

Se montaron en el coche y fueron marcha atrás en dirección a la carretera, antes de que los perdiera de vista, Carl me guiño un ojo y me dedico una de sus pequeñas sonrisas.

Daryl ya sabia todo lo que teníamos Carl y yo, de principio a fin, se había vuelto como mi confidente cuando estaba encerrado en aquella cueva subterránea, lo echare de menos.

Y por muy poco que me gustara también echare de menos su manera de revolverme el pelo.

De repente las luces del patio se encendieron, los focos me dejaron sin visión ya que todos apuntaban a mí y con bastante intensidad.

Mierda me habían pillado, esto era malo, muy malo.


[...]


Mis oídos pitaban por los golpes que me estaban dando.

Uno tras otro, mi visión estaba comenzando a distorsionarse.

-Parar porfavor -dije con el pequeño hilo de voz que me quedaba.

Lagrimas caían desconsoladamente de mis ojos, dolía mucho, queria que pararan

Golpe

-Vas a respetar a tu padre asquerosa zorra -dijo una voz que ahora mismo no podía reconocer.

Golpe

-Basta -susurre

Patada

Un hilo de sangre caía de mi ceja, pasando por mi mejilla.

Tosí y me levante de inmediato para expulsar la sangre que salía de mi boca debido a los golpes, no tenia fuerzas, no podía seguir, por una vez en mi vida me rendí, por mucho que hubiera luchado no habría ganado, eran mas en numero y mas fuertes.

Otro golpe

-Eres una puta -dijo uno de ellos.

El pitido se intensificó aún más, mi cuerpo ya no aguantaba, notaba como las hojas del suelo se me pegaban al cuerpo debido a la sangre, partes de mi cara palpitaban, lo único bueno es que debido a algunos golpes en la cabeza el dolor no se notaba apenas aunque seguía estando ahí .
 
  Todo se volvió negro al pasar los minutos, no podía abrir los ojos, no tenía fuerzas para toser, estaba perdida .

[...]

Note como unos brazos me envolvieron, no te como alguien me acariciaba la cara con cuidado de no hacerme daño, las voces que intentaban despertarme se oían lejanas, no sabía quién era , no podía abrir los ojos, no era capaz , el miedo recorría mis venas, no quería mas golpes no los iba a soportar. 

-Vas a estar bien enana , tranquila.... -enana.. solo una persona me había llamado así, Daryl.

TWD:Te odio  {Carl Grimes} #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora