CAPÍTULO 179. SIEMPRE QUE ESTÉS BIEN

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En el momento en que escuchó las palabras en el teléfono, Chu Xiao sintió que su corazón casi dejaba de latir.

"¿Dónde está?" Chu Xiao hizo todo lo posible por controlar su voz, pero no importa cuánto lo intentó, su voz todavía estaba llena de pánico.

Solo tres palabras, solo el cielo sabe que había usado todas sus fuerzas.

"Uhh, Ling Fan se encuentra actualmente en el Hospital No. Tres, vendando sus heridas", dijo Wen Gaoshang al otro lado del teléfono. Sin embargo, antes de que pudiera terminar su oración, Chu Xiao ya colgó.

De este lado, al ver el rostro de su jefe palidecer después de contestar el teléfono, su expresión también se volvió solemne.

Aunque no sabían quién llamaba y no sabían de qué hablaban, podían sentir que definitivamente no era algo bueno a juzgar por la expresión del jefe.

Y mucho más Ling Tianchen, incluso Chen Feng, que había estado siguiendo a Chu Xiao durante más tiempo, nunca había tenido esa expresión en el rostro de su jefe.

Excepto Ling Fan, nadie tenía esa habilidad ...

En cuanto a lo que le sucedió a Ling Fan, realmente no se atreven a preguntar en tales circunstancias. Además, Chu Xiao tampoco les dio la oportunidad.

Al ver al jefe tomar las llaves del auto y salir de la oficina incluso olvidándose de tomar su abrigo, Chen Feng frunció el ceño. Finalmente, todavía intentó detener a Chu Xiao.

Por supuesto, no era que quisiera evitar que Chu Xiao fuera por Ling Fan.

"Jefe", enderezó la voz, "Déjame ir contigo. No es adecuado que conduzcas en esas condiciones."

Sobre este punto, Chen Feng no dijo nada malo. Con la condición actual de Chu Xiao, conducir era algo muy peligroso.

Por lo tanto, después de escuchar la sugerencia de Chen Feng, Chu Xiao no dijo nada.

Solo le entregó las llaves del auto.

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En el auto, Chu Xiao permaneció en silencio.

En ese momento, realmente no quería decir una palabra ...

"Acelera", esto fue lo único que dijo Chu Xiao en el auto.

Al mirar el aviso de exceso de velocidad, Chen Feng no dijo nada, pero aún así siguió las instrucciones de Chu Xiao y aceleró.

"Jefe, en realidad, no tiene que preocuparse demasiado. Ling Fan debería estar bien", le consoló Chen Feng cuando vio el rostro pálido de Chu Xiao en el espejo retrovisor.

"Además, con las capacidades de Ling Fan, tal vez tenga otros secretos", dijo Chen Feng después de pensar un rato.

Aunque no sabía lo que le sucedió a Ling Fan, según su comprensión de ese tipo, no parecía alguien que tuviera una emergencia.

Aunque reacio, tuvo que admitir que con la habilidad de Ling Fan, debería estar bien.

La gente dice que las personas malas viven mucho tiempo ...

Por supuesto, Chen Feng no se atrevió a decir esa oración.

Chu Xiao frunció el ceño al escuchar las palabras de Chen Feng.

Entonces, de repente, recordó que hace unos días, Ling Fan le había dicho en la cama que podría pasarle algo malo, pero no se lo tomó en serio ...

Y sobre ese mensaje que le envió ... pidiéndole que no se preocupara por él ...

Por lo tanto, era muy probable que este asunto estuviera bajo el control de Ling Fan, e incluso podría ser planeado por él.

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