40. Myah se descuidó, Myah se alteró

100 29 0
                                    

16.12.2021

[...]

02:45. Myah miró al reloj una vez más, complemente vencida de que no podía dormir. 02:50. Necesitaba estar con sus madres.

Por más que sabía que tenía que aprender a dormir en su cuarto y que no podía estar durmiendo toda la vida con sus madres a los lados, aún no podía acostumbrarse, solo cuando el sueño le ganaba, ella podía dormir. Esa noche era algo distinto, no tenía sueño y se sentía insegura, sabía que si le decía esto a sus madres, la entenderían, la dejarían ser y por último va a terminar acostadas con ellas acurrucadas juntas.

Como pudo, se levantó de su cama despojándose de toda sabana que estaba encima suyo, se dirigió a la puerta, abriéndola con mucho esfuerzo por su corta altura, tuvo que aprender a hacerlo a la mala, gracias a Suyeon, luego fue hasta la puerta de ambas mujeres y tocó la puerta con su mano.

Dos minutos pasaban y aún no había repuesta desde el interior, intentó tomar de la manilla como había aprendido, pero fue inútil, no le resultaba a la pequeña. Sus ruidos que hacia al intentarlo tampoco parecían llegar a los oídos de las mayores, ya se estaba comenzando a poner triste.

Ahora se dirigió a la sala de estar, tal vez encontraría algo con lo que subirse lo suficiente como para hacer más cómoda su maniobra para abrir la puerta de la habitación. Veía silla, también cojines, para ninguna de esas sillas ella tenía fuerza como para llevársela, tendría que seguir buscando.

Cerca del sillón, encontró esa pequeña silla que usaba Cai Bing para dejar libros, de seguro se la podía. Con sus manos, empujó los libros para que cayeran, no eran muchos, por lo que el desastre no era algo por el cual alarmarse, por lo que tenía que alarmarse, estaba apunto de suceder.

Cuando Myah empujó el libro base, botó los demás que fueron cayendo como torre, para su desgracia, uno de ellos cayó sobre el control remoto de la televisión. La televisión se aprendió de inmediato.

Para su seguida mala suerte, estaba prendida en un canal de música, a los segundos, la fuerte música de rock comenzó a sonar a todo volumen.

La pequeña rápidamente se asustó y comenzó a desesperarse, ella no había visto cómo es que el libro cayó en el control y pulsó el botón de prendido, por lo que le asustaba que se haya prendido sola. La desesperación se hizo parte de ella, comenzando a dar vueltas para ver cómo apagarla, la televisión estaba muy alta, la música también y ella no sabía cómo es que prendió eso.

—¿¡Myah!?— escuchó la voz de Cai Bing aparecer, en ese momento la niña ya se encontraba llorando en su pequeño error —¡Myah!— hablaba más fuerte para ser escuchada, la música estaba retumbando en todos lados.

—¡Mamá~!— Myah corrió hacia ella y extendió sus brazos —Mamá— sacó sus sollozos sin control.

Yujin había aparecido también cuando Cai Bing tomó a la niña, exactamente para apagar la televisión. Mientras Yujin buscaba el control remoto para apagarlo, Cai Bing buscaba tranquilizar los sollozos de la hija y dirigiéndose a la habitación para que durmieran juntas.

—Myah, ¿Por qué estabas despierta? ¿Se puede saber?— le susurró, cerrando la puerta, la música aún sonaba, al rato que Myah recuperaba sus sollozos, dejó de sonar.

—Q-quería estar con mami— se abrazó más a Cai Bing y volvió a llorar por lo que ella misma dijo.

—Ya estás aquí, pero cuida no aprender el televisor a las 3 am— meció el cuerpo de la pequeña Myah, buscando tranquilizar su llanto que no paraba, sabía que le iba a funcionar en corto tiempo y ya estarían luego durmiendo todas juntas.

___

Por los otros lados, era obvio que esa música no pasó desapercibida para nada.

Xiaoting fue la única de su familia en despertarse, miró a sus alrededores, Yurina seguía en sus brazos y escuchaba a Hikaru roncar en la habitación de al frente, se preguntaba cómo es que ninguna despertó con tan fuerte ruido.

En la casa de Suyeon y Yaning, todas se despertaron, pero ninguna hizo fuerte berrinche. Suyeon fue la primera en abrir los ojos, pensando en que Yaning podía estar despierta también, al rato sintió como la peli naranja se removía en sus brazos y entonces entendió que también estaba incómoda con la música que la despertó, Bahiyyih por su parte, fue directo hacia la habitación de las dos mayores, sabiendo que estaban despiertas, se acurrucó entre medio de las dos y buscó que el sonido fuerte desapareciera entre la muralla que los cuerpos de las mayores provocaba, como adelanto, sí le funcionó.

Luego estaba Wen Zhe y Dayeon, que a esas horas seguían despiertas viendo una película y comiendo palomitas, rezaban que Rui Qi no despertara, hasta que escucharon algo directamente desde esa habitación:

—¿¡Quién me despertó!?—

Y entienden que a la pobre la interrumpieron de su adorado sueño, tenía sentido cuando era exactamente la habitación de Rui Qi que daba a la pared donde el televisor se prendió esto tal vez la tenga idiota por mucho tiempo durante el próximo día.

—¿Vas a cantarle de nuevo?— preguntó Dayeon tomando una palomita en sus manos.

—Sí, ¿O quieres hacerlo tú?— se levantó dispuesta a ir a la habitación para hacer dormir a su hija otra vez.

—No, ve tú— le respondió, en esa sienten otro ruido aparte de la música.

—Mamá~— eran los pasos de Rui Qi aparecer, parecía que la niña no perdió el tiempo y fue en busca de las mayores apenas despertó frustrada.

—Ven aquí— Wen Zhe que ya estaba levantada, extendió sus brazos para que la niña rápida corriera hacia ellos y se abrazaron con ternura —Mañana le damos su merecido a Cai Bing por despertar a la princesa— Y la pequeña le celebró.

¡𝐕𝐄𝐂𝐈𝐍𝐀, 𝐒𝐔 𝐇𝐈𝐉𝐀! ' 𝗚𝗣𝟵𝟵𝟵Donde viven las historias. Descúbrelo ahora